... MAL TERMINA

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En la tarde salí con mis amigos como acostumbraba, lo más divertido de vivir en un pueblo es que tienes una libertad impresionante, disfrutas, te ríes, gozas como no se podrán imaginar, la vida no me pudo dar mejor regalo que vivir mi infancia y adolescencia en ese lugar.

Fuimos por un helado, eramos un grupo grande. De repente Sonia me dice:

- Manuela, prepárate, mira quienes vienen allá...

-Sonia, no veo nada, ¿dónde ? 

- Ayyy! es que en realidad te faltan gafas, al lado del carro rojo.

Cuando por fin logro ubicarme, veo que viene Camilo y con la persona que menos me lo esperaba, mi peor enemiga, Angie.

- Nena relájate, no vayas a reaccionar, ni a  darles gusto, todo normal.

- No te preocupes sabes la clase de chica que soy, no merecen nada, pero no me quedó con esta.

Nos nos movimos, simplemente hicimos como si no estuviese pasando nada, todos tenían fija en mi esa mirada de lastima, estaba fastidiada. No se por qué cuando estamos más tristes la risa fluye como si no estuviese pasando nada, esa maldita risa falsa que sólo queremos cambiar por lágrimas, es una estupidez. El ser humano funciona de esa manera, pero esa corteza no dura toda la vida, con el pasar de los años se va deteriorando y entendemos poco a poco que somos solo humanos en busca de menos dolor.

- Angie me miró, él aún no notaba mi presencia, y como si sencillamente no importara nada en ese momento,  ella lo beso. Sentí que mi mundo se derrumbaba no supe cómo reaccionar, yo bese esos labios esta mañana, yo lo abrace esta mañana ¿qué paso? ¿qué hice mal?

Aún me pregunto en que estaba pensando, pero de un momento a otro, cuando reaccione el helado que tenia hace segundos en mi mano, apareció en el cabello de ella...

Camilo me miró con cara de sorpresa, obviamente no esperaba verme.

- Jajaja, divinos, Angie acabas de despejar mi duda más grande definitivamente eres una zorra, te lo regaló, disfruta mi sobras.

Mire a Camilo con odio y entonces le dije: 

- No me vuelvas a buscar, hablar, nada, nada, olvídate que existo, que alguna vez paso algo entre nosotros, eres lo peor ¿sabes? creo que espere mucho de ti y resultaste no valer ni mierda.

Decidí con la poca tranquilidad que me quedaba irme a casa, Sonia corrió detrás:

- Querida, no te vayas quédate, siento que de alguna u otra forma es darles gusto y no se merecen eso de ti.

Le sonríe.

- jajaja, boba estoy bien, no te preocupes, crees que me voy a morir por esto, no te preocupes, no será ni la primera, ni la última vez que tenga que afrontar esas situaciones. Hablamos mañana.

- Bueno, es mejor darte tu espacio,  te llamo más tarde, cualquier cosa, aquí estoy para ti.

Con la poca cordura que me quedaba en ese momento caminé hacia mi casa, como si no hubiese pasado nada.  Al llegar mi abuela me pregunto  pasaba algo, le sonríe, le dije que estaba cansada  llegue y al fin cuando cerré la puerta de mi habitación sentí mis mejillas húmedas, me encontraba llorando, mal diciéndome por lo pasado. Yo sentía algo por él, ¿por qué se comporta  de está forma? si no quería seguir conmigo ¿por qué no solo lo dijo? Cobarde.

Busque la carta que me había hecho y la despedace en pequeños trozos; pensaba en todo lo que habíamos vivido y que todo lo que me dijo fueron mentiras, ""te quiero, no te dejare", comencé a golpear la almohada, estaba destrozada.

En esas entra una llamada.

- Luis me está llamando...

Una Historia De Amor RealistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora