Una Historia De Amor Realista

CÍNICO

- Estaba furiosa, harta, destrozada... Estaba apunto de colapsar

- ¿Qué quieres?

- déjame explicarte todo, fue... fue cosa de momento, no me dí cuenta de lo que hacia.

- El daño esta hecho, me humillaste, no entiendes por el dolor que pase, me viste la cara de estúpida, te besaste con ella en mi cara, solo vete.

- No, no estas escuchando toda la versión de la historia.

- Una imagen vale mas que mil palabras y yo obtuve el vídeo completo.

- Ella me beso, fue ella.

- Espero que lo hayas disfrutado.

- ¿Por qué eres tan cruel?

- Tu mismo te encargaste de que me este comportando así, ¿recuerdas? Te estabas besando con ella, en mi cara, hasta hoy tuviste la valentía de buscarme, dejaste que las cosas pasaran no te importo como me sentí en ese momento, cobarde. 

Decidí seguir con mi camino, no quería escuchar las disculpas de una persona falta de cobarde

Dispuesta a seguir, el me tomo por la muñeca mirándome a los ojos con una expresión sin sentido después de todo lo que había pasado ayer, le grite que me soltara, si seguía hablando terminaría llorando y no quería que me viera hundida en el abismo por él. Hice un poco de fuerza pero no sirvió de nada. Cuando estaba a punto de gritar y que mis lagrimas se derramaran, 'él me atrajo hasta hasta su pecho, me abrazo mientras yo rompía en una rabieta, me tomo de la barbilla me susurro cálmate, me quede mirándolo y me beso. La carne es débil  como se dice coloquialmente, y a pesar de todo lo que me había hecho moría por probar de nuevo sus labios.

Mi reacción fue empujarlo, le lance una cachetada.

- Idiota, atrevido, lárgate olvídate de mi, que creías, ¿qué podías venir esperarme en la esquina de la casa pedirme perdón y todo terminaría? Pues no, ya no Camilo, nuestro camino llego hasta aquí, fue un placer coincidir en esta vida, pero ya es hora de decir adiós.

Comencé a Caminar mientras mis lagrimas caían por mis mejillas, era la primera persona que había querido, no sabia que la consecuencia brutales que podría traer consigo una traición, era morir poco a poco y que al final una parte de tu vida se fuera.

Llegue directamente a mi habitación, mi abuela golpeo y me pregunto si me sentía bien, me pidió que pasara a almorzar, le dije que tenia migraña, quería estar sola, quería matarme la cabeza pensando por qué el amor es una mierda. Quieres a una persona de esa forma y te corresponde rompiéndote el corazón en pedazos imposibles de recoger en un intento. Leí una una vez que  todo lo cura el tiempo, pero para mi el tiempo es eterno,  ahora más si se trataba de curar mi corazón.

Después de llorar hasta quedar casi deshidratada salí a beber agua, me encontré con mi abuela sentada mirándome fijamente, solo me dijo:

- Mija, lo único que te puedo decir es que, es mejor haber amado y que te hayan roto el corazón, a que nunca hayas amado de verdad.

Sus palabras razonaban en mi interior,  una oleada de tranquilidad vino a mi.