Rodeada de siete hombres.

La fiesta del campo

[ en la foto esta Francis ]

Estaba tan cómoda y me sentía tan relajada como si estuviera flotando en una nube de algodón. La canción Major Lazer - Light it up empezó a colarse en mis oídos y estaba segura que no formaba parte de mi sueño.

Quise despertarme pero no pude de ninguna manera. Se estaba demasiado bien en esa nube imaginaria.

Oí como la puerta de mi dormitorio se abría y pensé que sería Isaac haciendo un intento de que me levantara de la cama. De todas formas no lograría conseguirlo.

Seguía escuchando la música de fondo y de repente fue como si estuviera en la playa y una ola gigante chocara en mi cara. Fría e imprevista.

- ISAAAAAAAAC - grite levantándome de golpe.

- Error bonita!

Abrí los ojos y me fije en el estúpido e imbécil de Benjamin.

- Benji.. - murmuré mirándolo con odio.

- Te dije que te la devolvería! - hablo sonriente y orgulloso por haberme tirado una olla llena de agua fría encima.

- Te vas a enterar!!! - hable con maldad como si llevara el diablo adentro.

Baje de la cama rápidamente y me dirigí hacia la puerta con la intención de ir hacia la cocina en busca de algo. No sabía exactamente lo que buscaba pero algo tenía que encontrar. Algo tenía que hacer!! Maldito Benjamin!!!!

Abrí la puerta con fuerza y tan solo di un paso al frente y mi vista se volvió blanca. Empecé a toser y a sobarme el rostro para ver quien habia sido el capullo que me habia tirado harina encima.

Cuando por fin recupere mi vista, vi a los dos hombres más inútiles de este planeta partiendose el culo de risa.

Benjamin y Oliver.

- Os voy a cortar en pedacitos y os tiraré en un río donde se os coman los peces y nunca nadie vuelva a encontraros jamás!!!!!!! - grite bajando las escaleras.

- Pero que.. - murmuró Isaac al verme entrar en la cocina.

- Ni se te ocurra abrir la boca! - grite advirtiendo con el dedo índice.

- No puede ser - hablo Gian entrando en la cocina - Te la han devuelto!

- Daria, deja de abrir y cerrar los armarios y ve a darte una ducha. Te quiero lista en una hora! - dijo mi hermano haciendo un trago de su vaso con whisky y coca-cola.

- Lista para que? -pregunte parandome en seco.

- La fiesta , lo has olvidado? - preguntó Gian encendiendo un cigarrillo.

- Oh, cierto.. - dije alejándome de ellos.

_ _ _

Me duche rápidamente y me sequé el pelo. Salí envuelta en una toalla y abrí el armario para elegir algo que ponerme. Pero no tenía nada sexy y elegante, ni siquiera un maldito vestido..

Bufe rendida y saque unos tejanos blancos y una camiseta de manga corta negra. Me vestí y me puse las bambas negras con toques blancos y empecé a alisarme el pelo. Me hice la raya , aplique rímel y un pintalabio marrón oscuro. Adoraba este color.

Mire mi reloj y marcaba 21:40 . Milagro de Dios, logre estar lista en menos de una hora. Esto no suele pasar normalmente. Deberían darme un premio por esto!!

Metí en mi pequeño bolso mi móvil y un paquete de pañuelos y salí de la habitación vigilando que nadie más me llene de harina.

Baje las escaleras dando pequeños saltitos, tenía ganas de asistir a esa fiesta. Al fin y al cabo tenía que disfrutar de este verano de alguna forma. Aunque fuera con la pandilla de mi hermano y sin ninguna amiga.