Sorpresas

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Ay no.

Me quedé helada durante un segundo, me sentí aliviada al ver que el jefe no se había dado cuenta, no iba a dejar que me descubran después de todo lo que había pasado.

-Lo ví, una de las habilidades que acabo de descubrir.- Mentí y el jefe me miró sorprendido, ingenuo.

-Entonces, ¿Puedes ver a cualquiera, en cualquier momento, en cualquier lugar?

- Así es y lo estaré vigilando, así que tenga cuidado, seré jóven, pero no soy estúpida.- Y llena de valor me fuí.

Eso estuvo cerca.

Camine hasta mi habitación y cuando entré me quedé sorprendida, habían entrado a mi habitación, estuvieron husmeando mis cosas y las dejaron en orden pero no dónde yo las deje, igual no importa, no tengo nada de valor aquí y nada me puede delatar.

Me duché ignorando el hecho y me fuí a la cama, mañana necesitaba mantener ocupados a todos, necesitaba tiempo para que "Ender" encuentre a Abby.

(...)

-¡Ayuda!- Pidió una castaña creída tirada en el suelo, hice que le cayera una flecha en el pié, eso tendría ocupados a los guardias de la zona.

Se que mi plan de <<Mantén ocupados a todos>> no es el mejor, pero no se me ocurría otra cosa, además esa estúpida se lo merecía siempre la veo molestando a todo el mundo.

Sonreí victoriosa al ver a los guardias distraidos, Edward sólo pidió medio día y ya conseguiría a Abby.

Ahora mi próxima victima, voy a ir por uno de los amiguitos de Daniel, alguién tiene que bajarlos de su nube. Fuí hasta el gimnasio y ¡Bingo! Estaba ahí.

Estaba golpeando un pelota que estaba amarrada en la pared y colgaba del techo, él estaba abajo, perfecto. Fuí hasta la pared y corté la soga haciéndo que la pesada pelota cayera sobre él, cayó noqueado en el suelo, momento perfecto para llamar a un guardía, íba a salir pero un grito me detuvo.

-¡¿Will?! ¡Guardias!- Esa era lo voz de Daniel, asomé mi cabeza un poco, mierda, si era Daniel.

¿Y si me vió? No, no, eso es casí imposible, revisé que no hubiera nadie. Llegaron los guardias y se llevaron inconsciente a Will, esperé a que de fueran todos y salí.

-Kate para.- La voz de Daniel me dejó helada, me quede estática, ni siquiera podía ver hacía otro lado.- ¿Por que lo haces?- Lo miré roja como un tomate, me había atrapado con las manos en la masa.

-¿Hacer qué?- Pregunté haciéndome la descentendida.

- No te hagas, ví como empujaste a ese chico al desagüe, como le tiraste la flecha a Melani y como tiraste ese saco a Will.- Sonreí al recordar lo del desagüe, fue muy divertido.

-¿Me has estado espiando?

-N-no.

-Es que a caso ¿No puedes vivir sin mí?- Trataba de desviar el tema a toda costa.

-No cambies de tema, ¿Porque lo haces?

-Éso no te lo puedo contar, pero debés sabes que de loca yo no hago las cosas, la razón por la que hago esto es muy importante para mí sobretodo.

-¿Y que piensas hacer después de esto?

-¿Que a caso quieres ayudarme?- Dije irónica, Daniel río y se acerco a mí y me dió un abrazo, me quedé helada, eso si que fué inesparado, a los pocos segundos lo abracé también.

-Se puede saber ¿Porque me estas abrazando?- Pregunté todavía abrazandolo.

-Porque debes estár pasando cosas tan duras que te obligan a hacer esto.- me alejé de él despacio.

-Daniel quiero que sepas que nadie me está obligando, lo estoy haciendo por un motivo importante, aún no te lo puedo contar porque aún no confío en ti lo suficiente, pero créeme que es por un buen motivo.

-Ven te voy a ayudar.- Me tomó la mano y salimos al pasillo, se acercó a un botón y lo presionó, empezaron a sonar las sirenas y luces azules palpitaban, me jaló hasta el ascensor y presionó el botón de el primer piso, pero a los pocos segundos el acensor se trabó, nos sentamos uno al costado del otro, el ascensor era suficientemente grande.

-¿Que fué lo que hiciste?- Pregunté divertida y con la adrenalina al máximo. Daniel me miró y reímos al mismo tiempo.

-Presioné la alarma contra incendios.

-Gracias, esperaba algo más de tu estilo, como tirarle sopa caliente en la cara a alguien.- Dije y reímos, estos momentos alegres eran los que me daban ánimos, la alegría era lo que menos abundaba éstos días, al menos conmigo.

-No me agradescas, sea cual sea el motivo no creo que sea malo.

-¿Como puedes estar tan seguro?- Dije retandolo dándole leves codazos en el brazo.

-Porque no me gustan las chicas malas.

-¿Que y yo te gusto?- Le pregunté, era imposible, nunca había convivido con chicos, pocos me hablaban, es imposible que él se fije en mí.

-Sí.- Lo miré sorprendida y esta vez no estaba roja, estaba morada, es imposible esta jugando, reí falsamente.

-Que vá, deja de jugar.- Daniel posó los ojos en mí, se le veía sincero, se pasó una mano por el pelo y sonrió.

-Ahora no me creés, pero con el tiempo lo verás.- Me acarició la mejilla, todo esto era nuevo para mí, nunca un chico me había dicho o hecho algo así, pero se sentía lindo.

-Cambiando de tema-Dije sin pensar separandonos-, si precionaste la alarma, ¿Porque te metiste al ascensor?- Daniel se paró junto conmigo.

-Para poder hacer esto.- Daniel me agarró de la cintura y me besó.

¿Qué está pasando?

Daniel me está besando, eso pasa.

Parece un sueño y no quiero despertar.

Ojalá les guste, lo hago con amor ;)
#RegalenmeUnaEstrellita

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