¡Mi vecino es mi jefe!

Capítulo 7.

CONNOR POV'S.

Veo un semáforo en rojo y lo paso a alta velocidad... solo quiero llegar rápido a mi destino.

Cruzo las avenidas y cada vez me acerco más a casas y edificio destruidos y andrajosos me pregunto si no me habré equivocado con la dirección... tras unos edificios viejos y andrajosos veo un cartel con luces neón o al menos eso era "DESTINY" para nada llamativo, y con las letras que a algunas les falta las luces y apenas se pueden ver las que están alumbradas y eso que es neón o mejor dicho alguna vez lo fueron ¿quién lo diría? Un club a escondidas detrás de éstos andrajosos y ya casi destruidos

"edificios" claro me imagino que ha de ser uno de esos clandestinos... me lo debí imaginar, con David siempre suceden estas cosas. Aparco y bajo de mi moto.

Saco mi celular.

– David ya estoy aquí, ¿cuál es la palabra que tengo que decir? O tal vez la seña.

– Tienes que decir "Running".

–Ok, nos vemos entonces.

-Fin de la llamada-

Sé lo de la "clave" o la seña, porque acostumbro a andar en lugares así, me coloco frente al pequeño interruptor y digo la clave.

La asquerosa puerta se abre, si no supiera que más allá hay un ambiente asquerosamente millonario y mucho morbo, diría que en éste lugar se la pasan andrajosos y vagos.

Entro y camino unos metros más allá hay otra puerta más ésta no está asquerosa ni grasienta, es de plata y el picaporte está echo de un material fuerte la abro y me encuentro con dos hombres me miran y me dejan paso, más allá veo la barra camino hacia allá y me siento viendo el ambiente... mujeres prácticamente encima de los ancianos casados y con mucho dinero, ellas sobándole las cosas que ya no funcionan ellos excitados y sintiéndose poderosos de tener y obtener lo que querían, chicos y chicas bailando en la pista de baile o más bien tocándose y sobándose con mucho morbo... chicas saliendo de los baños arreglando sus vestidos y retocando el labial regado de sus labios, otros saliendo y frotando sus narices.

–Un Bourbon por favor. – Grito a la mujer que atiende las bebidas.

La mujer sonríe coqueta, pero noto que es forzada su sonrisa... me gusta mucho observar a las personas soy bueno en ello.

–Ya lo traigo guapo.

Miro más allá de la barra y noto a alguien familiar-

–¡David! –Grito.

David y su conquista voltean, quien le hace un puchero para que no la deje toca toqueteada y se la lleve a su casa, así son la mayoría de las chicas que se la pasan en éstos lugares solo buscan diversión y mucho sexo o solo olvidarse de sus demonios.

David quita sus manos de encima y le da un último beso tierno en su coronilla... raro nunca lo había visto hacer eso, le da una sonrisa triste y le dice algo al oído, la chica se le ve molesta y le grita algo que no puedo escuchar debido a la alta música que hay, le grita cosas y David se le ve herido y furioso a la vez, lo conozco muy bien y sé que está sintiendo en éstos momento, le grita y debido a su expresión deduzco que se arrepintió, la chica lo mira fijamente y se va, David la agarra de ambas manos y le suplica con la mirada que lo siga... ella baja su mirada y sin mirarlo quita sus manos de encima y se va del club, David la ve marcharse.

Se acerca a donde estoy yo y sonríe.

– ¡Amigo! ¡Te extrañe eh! – Grita.

Sonrío –Lo sé cabezón, yo te extrañe más...