CAPITULO 5

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-_____ (TN) –gritaron. Por inercia voltee a ver de quien se trataba. Era Taehyung. -¿Por qué caminas tan rápido? –se quejó, tratando de recuperar el aire perdido.

Solo reí ante la acción de este. –Me gusta llegar lo antes posible –respondí.

Sin previo aviso recordé lo de hace algunas horas. No pude evitar sonrojarme. – ¿Sucede algo? –pregunto preocupado. ¿Quieres ir a comer algo?

-No. –conteste seca. No planeaba hablarle, me sentía apenada, fue extraño.

-¿Es por lo de la mañana verdad? –suspiro. No lo negué. -¡Era una broma! –se rio a carcajadas, despeinándome.

-¿¡QUÉ!? –me exalte.

-Debiste ver tu cara –este continuaba riendo sin parar.

Estaba muy molesta. –Con eso no se juega –me queje.

Me tomo por el hombro y comenzó a caminar. –Tengo hambre. Vamos a comer. –No me negué, tenía que admitir que tenía hambre, aparte que necesitaba relajarme, el día de hoy había sido muy estresante.

Entramos a una gran pizzería y él pidió la pizza más grande. Después decidimos sentarnos a comerla.

-Se ve que tenías hambre –bromee al ver como devoraba la deliciosa comida. Como respuesta sonrió, sin soltar la pizza.

En menos de lo que esperaba la pizza se había terminado. –Que delicioso –se sobo la barriga Taehyung. No pude evitar reírme.

Me exalte al ver la hora. Ya era muy tarde. –Me tengo que ir –me despedí, tomando todas mis cosas para poder irme.

Salí corriendo del lugar, detrás venia Taehyung. -¡Espera! –gritaba apresurado. Yo me detuve de golpe y le mire. Mala idea. Él callo sobre mí, ya que no esperaba que hiciese semejante cosa.

Estaba a nada de que nuestros labios chocasen, pero ninguno de los dos planeaba hacer un movimiento, solo nos mirábamos. Nunca me había tomado la molestia de ver tan determinadamente a Taehyung; era un chico muy apuesto.

-Lo siento –se levantó sin dirigirme la mirada, le imite. –Te acom... acompañare a casa –intentaba decirlo, sin embargo se trababa, casi hablando en silabas, como cuando recién aprendes a hablar.

En el transcurso del camino intente hacer tema de conversación pero él solo asentía o negaba, todo el tiempo se la pasaba mirando el suelo. ¿Qué pasa con él?

Al llegar a casa no se despidió, tan solo suspiro y cambio de dirección, sin despegar la vista del piso.

-¿Qué pasa con él? –seguía preguntándome.

Estuve a punto de entrar a casa, pero al escuchar pasos acercándose me detuve. ¿Taehyung?

-¿Puedo hacerte una pregunta? –se veía angustiado. Acepte. -¿Sientes algo por Jungkook?

No era capaz de responder, ni siquiera lo sabía. ¿Qué significa para mí?

-Un amigo –respondí. Al ver su rostro me percaté de que le había alegrado mi respuesta.

-¡Adiós! –se despidió energético, saltando como si fuera caperucita roja caminando por el bosque.


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Él joven Taehyung caminaba regreso a su casa, pero alguien lo estampo violentamente contra la pared.

JUNTO A TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora