Insomnio

94 10 2
                                    

Eran las 5 de la mañana en algún lugar de Madrid, a lo lejos se escuchaban a las aves madrugadoras despertar y alegrar al mundo con su canto, mientras muchos madrileños dormian en algún lugar sin ubicación fija para los lectores se encontraba despierto Rubén Doblas, alias Rubius para los amigos y fanaticos alrededor de el mundo.

Había sido una semana agitada, estuvo preparando por varios días lo que sería su próxima gira por el continente americano con sus amigos y había grabado vídeos para sus seguidores,  pero aun así, aquella madrugada de marzo nada parecía ser bueno o que alcanzara el mínimo de las grandes expectativas que se había auto impuesto, frente al ordenador que tenía tres pantallas dividía sus trabajos para ir avanzando un poco más en la noche ya que no quería dejar ningún detalle sin revisar y quería tener suficiente material preparado antes de irse al Ultra a fines de mes

En eso la alerta de Skype se encendió súbitamente haciendo que se  sobresaltara, pero esa sensación pronto desaparecio, solo una persona en todo el mundo podía hablarle tan tarde y lo sabía, no tenía que ver el nombre de usuario, acepto la video llamada y le sonrió al pelinegro que lo observaba desde el otro lado de la línea con sus ojos traviesos, no era otro más que Miguel Ángel, conocido como Mangel

Su Mahe...

Y tú qué haces despierto a esta hora? -Dijo Rubén a modo de saludo mientras sonreía, no era la primera vez que hablaban tan tarde en la noche y francamente no sería la última-.

Nah, que he visto en el twitteh que hiciste una encuesta de que si te ibah a dormih o no y pues decidí llamarte -le dijo su amigo susurrando en voz baja ya que en el fondo de la habitación desde la cama se oía la respiracion de una persona profundamente dormida

"Ella...suertuda" pensó para sus adentros Rubén pero le dedico una sonrisa sincera a su mejor amigo - Si, lo que pasa es que ya me conoces, con lo de el Club Media Fest que se venía y además que se viene el ultra en menos tiempo aún quise adelantar algo de trabajo para nuestra presentación, he avanzado mucho, pero ya sabes, no quería dejar nada al aire - Susurro también por la presencia femenina de fondo y sin querer se le escapó un bostezo- lo lamento, llevo horas método en esto - río entrecerrando los ojos y miro a su mejor amigo-.

Tranquilo Rubiuh, que todo saldrá bien, me tieneh a mi para ayudarte en todoh, lo sabes, no? -le dijo preocupado Mangel, en los ojos de Rubén se le marcaban las ojeras por la falta de sueño-.

Si, lo sé -río-. Tranquilo que me falta solo unos toques y terminó por hoy

Vale, vale -sonrío Mangel-. Por cierto que he votado no, en la encuenta que hiciste, por favor vete a la cama luego que nos veremoh mañana y no te quiero todo muerto de sueño cuando vallamoh por unas cañitah

Que si tío, que si -dijo mientras el sueño de a poco lo iba venciendo, siempre que hablaba con Mangel se relajaba y, a pesar de la presencia de el fondo, le agradeció a su amigo por su preocupación-. Mañana hablamos que...emm..-suspiro y empezó a cabecear

Al ver que su amigo se había dormido delante de él Mangel intentó ocultar su risa para no despertar a su invitada pero fue en vano, la joven se revolvió en las sabanas por los ruidos que ambos hacían y el la miro divertido, cuando se volteó para ver a Ruben y sacarle una foto para subirla a Twitter se sorprendió de algo, en el regazo de Rubén estaba la almohada, aquella que le había regalado años antes para el día de los enamorados, le había dicho que el regalo era de broma pero Rubén siempre la cuido con devoción, al extremo que la lavaba a mano y nunca tuvo manchones de suciedad en ella conservando su blanco original, lo que sorprendió a Mangel no era que estuviera la almohada allí, sino que estuviera debajo de su camisa como protegiendola, eso lo hizo sentir feliz, sentía que su deseo se cumplía, Mangel en secreto le había regalado la almohada para estar allí y con él cuando nadie estaba y le alegraba que la almohada cumpliera su misión, ya desde el lado de Rubén se empezaban a escuchar sus leves ronquidos mientras inconscientemente abrazaba la almohada y Raspberry, la gata de Rubén se instalaba en sus piernas.
La imagen cautivó a Mangel, quien acaricio la pantalla como si pudiera acariciarle a el, pero pronto el momento se vio interrumpido por la voz de su acompañante

Miguel? Es muy tarde -dijo somnolienta y estirando una mano a él mientras sonreía acurrucada a las sabanas-. Ven que tengo frío... -le susurró ella a su novio sin hacerle preguntas de que estaba haciendo, para eso estaba la mañana- vamos a dormir...

Voy ahora cariño -le sonrió Mangel y tras mirar la imagen de Rubén una vez más dormido delante de sus ojos apago el ordenador y volvió a la cama, lo que no sabía Mangel era que, desde el otro lado Rubén abrió los ojos, había visto como la compañera de su amigo había abierto los ojos, no quería que los escuchara conversando, le agradaba la muchacha, había traído alegria, muchas alegrías a la vida de su amigo, aunque significará que ya no estaban tan juntos como antes, de a poco ambos fueron creciendo y las bromas "Rubelangel" quedaron algo rezagadas en el pasado.
Sacudio la cabeza tras este pensamiento y tras guardar el trabajo de el día ya realizado, tomó a su querida Raspy y aferrandola tanto a ella como a la almohada se dirigió a la cama, se tiro en ella con cuidado para no despertar a su otro gato, Wilson, y miro al cielo que se iba despejando a lo lejos a través de la ventana

Buenas noches Mangel...-Susurro antes de taparse la cara con la almohada de su amigo e intentaba olvidar a la chica que estaba ahora en la cama de él y en la cual sentía que no era su lugar, sino de el

Buenas noches Rubiuh -susurro en respuesta Mangel como si pudiera oírlo y cerró los ojos para volver a soñar con los viejos tiempos en los que solo habían sido ellos dos solos.

----------------------------------------------

Hola a todos! Si les gusta déjenme en los comentarios si les gustaría que hiciera más one shots, ya sea de Rubelangel, Wigetta o Luzana :)

Cualquier idea es bienvenida!

A.

InsomnioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora