Alivia Mi Corazon

La visita

Era una mañana calurosa en el nuevo mundo. El Thousand Sunny se encontraba en reposo, ya que no había viento y por tanto no podían seguir la ruta, por lo que cada uno de la tripulación aprovecho para descansar y hacer sus cosas individualmente.

Zoro, como siempre se encontraba en el gimnasio ejercitándose, Sanji, cocinando y haciendo postres para sus hermosas damas, Franki, trabajando en su taller en nuevas armas, Nami, dibujando mapas en su estudio, Robbin, leyendo tranquilamente un libro de historia en la sala del acuario, Chopper, en la sala de curas creando una nueva medicina para el dolor, Ussuf estaba cuidando sus plantas para que salieran las semillas y pudiera usarla en su arma, Brook, tocaba una canción relajante en el exterior del barco, y por ultimo, se encontraba el capitán, durmiendo en la cabeza del león.

O al menos eso pensaban todos sus nakamas, ya que en realidad no se encontraba durmiendo si no en estado reflexivo.

Si, señoras y señores, Luffy estaba pensando.

Tumbado y con los ojos cerrados, sentía como la casi inexistente brisa acariciaba su cabello.

Le encantaba aquella sensación porque le traía mucha relajación tanto físicamente como espiritualmente.

-"Me pregunto que harán Ace y Sabo... Hace mucho tiempo que no los veo..."- Penso el azabache con gran nostalgia.

Y es que la ultima vez que los vio, fue en Dressdrosa, ya que tenían un asunto pendiente en ese país.

Y ahora os estaréis preguntando ¿Como es posible que Ace este vivo? La pregunta es fácil de contestar, Sabo nunca tuvo ese accidente pesquero por lo cual se hizo pirata y no perdió la memoria. Y al cabo de unos años, junto con Ace, se unió a la tripulación de Barbablanca. Por lo tanto el rubio estuvo en Marineford, el cual cuando vio que Luffy no podía levantarse lo cogió y se lo llevo en brazos, evitando ese golpe mortal que Ace estaba destinado a interponerse en su trayectoria, pero como eso no sucedió, Ace sobrevivió. Lastima no podamos decir lo mismo de Barbablanca, ya que se interpuso en el camino de Akuine para darles la oportunidad de escapar de aquel infierno.

Volviendo al presente Luffy suspiraba por décima vez de lo que llevaba en la mañana.

Desde que Ace y Sabo se marcharon, antes de que el se pudiera hacer pirata, se dio cuenta, gracias a Makino, que se había enamorado de sus dos hermanos.

Cuando los vio en Alabasta, pensó que su corazón saltaría de su pecho. En ese instante decido que era el momento de confesarles sus sentimientos, pero por alguna razón, su cobardía se apodero de el y no les dijo nada.

La siguiente vez que los vio fue en la ciudad de Franky, donde ambos hermanos le dieron un beso en la mejilla del menor. Este se ruborizó fuertemente, pero gracias al cielo nadie se percato de aquella reacción. Total, que al final esa vez Luffy tampoco se vio capaz de decirles nada.

Las otras veces ya fueron un autentico caos, Luffy, junto a Sabo, intentando rescatar a su hermano de las garras de la marina mas después los tres hermanos tuvieron que reponerse de sus graves heridas, por lo que Ace y Sabo se separaron de Luffy sin poder despedirse de el, ya que el menor fue tratado en lo de las Kujas.

Dos años después volvieron a reunirse en Dressdrosa, pero nuevamente todo sucedió muy deprisa ya que estaban en una guerra contra Doflamingo y su familia. Cuando Luffy despertó tras la pelea con el pájaro emplumado sus hermanos ya se habían ido, pero le dejaron a sus nakamas un mensaje de que volverían a verse pronto.

-"Son unos mentirosos, ya han pasado tres meses y aun no los he visto"- Penso molesto el ojinegro- "Pero la próxima vez que los vea, si o si les diré lo que siento por ellos"- Penso decidido, mientras se incorporaba de golpe de su asiento.

Y como si fueran palabras mágicas un pequeño navío se acercaba hasta su barco.

Zoro fue el primero en divisarlo, por lo que fue rápidamente a avisar por el megáfono;

-¡Oiiii, un barco se acerca!- Aviso el peliverde.

Todos dejaron lo que estaban haciendo para salir al exterior del barco y ver como se acercaba una pequeña embarcación directos a ellos.

-¿Eso es un barco? ¿Acaso son idiotas? ¿Como pueden usar un barco así en el nuevo mundo?- Comento asombrado Ussuf al ver aquella pequeña nave.

-Jujujuju quien sabe- Comento divertida Robbin.

Cada vez estaban mas cerca de ellos, por lo que al fin se distinguió las siluetas en las que iban en esa pequeña embarcación.

Al ver de quienes se trataban, el corazón de Luffy empezó a latir muy rápido, mientras una gran sonrisa se extendía en su rostro.

-¡ACE! ¡SABO!- Los llamo en voz alta, con voz muy alegre.

-¡¡LUFFY!!- Gritaron los dos hermanos contentos, cuando ya estaban atracando el barco justo al lado del Sunny, lanzándose abrazar al chico.

Ambos hermanos saludaron a su hermano con un beso en la mejilla, cosa que al azabache menor le encanto, porque se ruborizó, pero supo disimularla con su risa alegre.

-Shishishi, ¡Ace, Sabo! ¡Me alegra volver a veros!

-Y nosotros a ti pequeñajo- Dijo divertido Ace, mientras le revolvía el pelo, a lo que el azabache menor hizo un puchero.

-No me digas así Ace, ya tengo 19 años mooo- Se quejo con los mofletes hinchados.

-jajajaja deja de molestar a Lu, Ace- Dijo Sabo con una sonrisa

-Tsk, siempre me arruinas la diversión Sabo, esta bien ya paro- Le reprocho el pecoso al rubio.

-Y ¿A que viene vuestra visita?- Pregunto Sanji, mientras daba una calada a su cigarrillo que había encendido hace unos segundos.

Por alguna razón el rubio no se alegraba de verlos, tenia la intuición de que algo malo iba a pasar y tenia que ver con ellos.

Ace paso un brazo por los hombros de Luffy mientras comentaba lo siguiente muy contento:

-Hemos venido a pasar unas semanas con vosotros, ya que hace tiempo no estamos los tres juntos y se nos hacia nostálgico ¿Verdad Sabo?- Declaro el pecoso muy contento.

-Asi es, si no tenéis ningún inconveniente nos gustaría quedarnos un tiempo para disfrutar de la compañía de nuestro hermanito- Comento con una sonrisa, aunque lo primero que dijo fue para el cocinero, que se había percatado de un leve tono hostil hacia sus personas.

-¡Por supuesto que no hay ningún problema! ¡Os podéis quedar aquí cuanto tiempo queráis! ¡Sera genial!- Exclamo emocionado el monito, mientras abrazaba a sus dos hermanos con emoción.

-Jujuju, parece que sera una temporada ruidosa- Comento divertida Robbin, al ver como interactuaban los tres hermanos.

-Yo pienso que sera una temporada muy agotadora- Suspiro resignada Nami.

Mientras que Sanji seguía observando a ellos tres con el ceño fruncido.

¿Por que cada vez iba aumentando el mal presentimiento respecto a esos dos y a su capitán?

Mientras todo eran risas en ese instante en el barco, la premonición de Sanji no tardaría en cumplirse...

El pobre corazón del pelinegro se rompería de manera inevitable pasados los tres días que llevaban de viaje junto a sus hermanos.

Y es que escuchar a escondidas una conversación es lo ultimo que puedes hacer, si no quieres descubrir que te han engañado durante mucho tiempo...

Continuara...
Y aquí una nueva historia. Si lo se, tengo muchas historias ya publicadas y sin terminar, pero no pude resistirme a hace esta idea que me apareció un día repentinamente, y es que desde que leí un oneshot de esta pareja, me dieron ganas de escribir sobre ellos, pues por lo que aquí estoy. Sin mas que decir espero que os guste esta nueva historia.