Capítulo 7

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Hace más de una hora que Rualy se ha ido, y ahora estoy sola en la habitación, se supone que debo estar descansando, pero estar en esta cama sin moverme me aburre mucho, aunque a decir verdad no puedo moverme mucho, con estas heridas que tengo no puedo hacer casi nada, solo puedo mover un brazo y un poco la pierna, no sé cómo es que he estado estas semanas así, aunque cada vez estoy mejor.



También ha pasado días desde que la puerta principal sonó y de que él hermano de Rualy anuncio su llegada, pero todavía no lo conozco. Estoy tan aburrida en este justo momento que no sé qué hacer. Al parecer ya es de noche, la luz de la luna entra por la ventana.



-Renata...- la voz de Rualy anuncia su llegada a la habitación.


-¿Si? Pasa.


-Saldré un rato, vale, ¿necesitas algo?


-No, estoy bien, gracias.


Necesito moverme, hacer algo, estoy toda entumida o me volveré loca. Muevo un poco la pierna que tengo libre, para poder salir de la cama, me apoyo con la mano en la cama y así quedar sentada. Agarro el bastón de madera improvisado que Rualy trajo para que pueda estar parada y tenga equilibrio.


Al estar frente la puerta del baño, tomo aire y descanso un poco, me ha costado mucho llegar hasta aquí.


Al girarme para salir del baño, piso un poco de agua y caigo al suelo, provocando un ruido fuerte. –Rayos, Ahh!- esto tiene que ser una broma; mi espalda está completamente mojada, me duele mucho la pierna, y creo que no podre levantarme.


La puerta de la habitación es abierta bruscamente, dejando a la vista a un joven, alto, con ojos color grises, rubio, espalda ancha, con un poco de barba y guapo, está completamente vestido de negro, quiero suponer que es el hermano de Rualy ya que tienen un ligero parecido.


Su vista recorre la habitación hasta que los posa en mí.


-¿Qué paso?- su voz suena grave y agitada


-Pisé un poco de agua y me resbale, lo siento...- trato de ponerme de pie, pero es inútil, no sé que mas hacer, la presencia de él al parecer me pone nerviosa.


-Tranquila, te ayudaré.


-No no, estoy bien, puedo sola.- sé que no lo conozco, sé que también es la primera vez que lo veo, pero no sé, me pone nerviosa, aunque no sé si sea porque es la primera vez que lo veo, por su hermosa cara o porque tal vez él fue el que me salvo . A lo mejor es por las tres cosas. Debo dejar de pensar esas cosas y concentrarme en ponerme de pie o quedare como una tonta. Pero camina hacia mí con cautela.


-Dije que te ayudaré.- se agacha, pasa su mano por debajo de mis piernas y mi espala, y me alza como si nada, dejándome con la palabra en la boca, me deja sobre la cama con mucho cuidado, me acomodo lo mas que puedo.


-Debes tener más cuidado.- su voz cada vez es más profunda y molesta. Creo que no le caigo bien, por la expresión que tiene, no tengo ninguna duda.


- Si... lo siento, solo quería ir al baño.-


-Bien, solo fíjate bien por donde pisas. -Sin más, se gira y se marcha.


Pero que hombre tan más frió, no puedo creer que tenga ese rostro tan hermoso. Pero bueno, sí solo no quería ayudarme no lo hubiera hecho, a decir verdad pensé que estaba sola, pero me alegro de que haya aparecido, si no, estaría todavía tirada en el piso, esperando hasta que Rualy llegara.


Aunque, hay algo raro en él, o bueno, no sé si sea yo, pero ese rostro, creo que lo he visto antes, pero no sé dónde.


No sé si por como estoy, no pienso mucho en lo que sucedido aquel día, ya llevo muchas semanas en este lugar, no sé nada de Tom, Rualy dijo que investigaría y me diría pero no tengo noticias todavía.


Y mi papá, lo extraño, ¿será que ya sabrá lo que paso?, no lo sé, pero si ya sabe, espero y se encuentre bien, no me imagino a mi papá triste y no quiero que lo este, no sé que estará pensando pero creo que es mas que obvio, ''en mamá'', no quiero que sufra pensando que me paso lo mismo que ella; sé que no me escucha ahora, pero quiero que tenga esperanzas, quiero que sepa que estoy viva y de que Tom también lo está, aunque todavía no tenga noticias sobre él. Pero sé que lo está.


Siempre había escuchado, eso sobre, ''Toda tu vida pasa frente a ti en un santiamén'', cuando te pasa algún accidente. Y ahora lo creo. Cuando estaba en el avión sentí que moriría, prácticamente toda mi vida paso por mi mente rápidamente.


Pero, ahora que lo pienso se me hace muy raro que haya sobrevivido, digo, porque el avión se caiga y prácticamente estábamos por el océano, y yo desperté en el bosque, y no había nada ni nadie, que diera señal de que le avión había caído ahí. Es como que si me hubiera o me hubieran transportado a ese lugar. Simplemente no puedo entenderlo, pero se me hace muy raro.


Por más que trato de recordar en donde he visto ese rostro, el rostro de ese chico, no puedo, pero sé que lo he visto antes y muchas veces.



La luna cada vez alumbra mas la habitación, opacando el foco que esta encendido, el cielo está lleno de nubes grises, pero dejan ver las estrellas, dando una imagen hermosa. Mi mamá siempre me decía, - Cuando estés en una situación difícil, ve al cielo y todo estará bien.- Ella siempre tiene razón, siempre funciona, ver al cielo y apreciar lo que veo, me da una tranquilidad que no puedo explicar.


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Espero que les esté gustando.

-Ady AM.

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