Capítulo 5. "La verdad sale a la luz"

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Me tropezaré y me caeré, todavía estoy aprendiendo a amar.

Levi caminaba seriamente a la par de Petra, ambos metidos completamente en sus pensamientos. Eren iba de tras de ellos pero aún asi tardó unos instantes en alcanzarlos puesto que por el golpe de su superior le costaba retener el aire.

Cuando los tres entraron al sótano, se llevaron la sorpresa de que nadie estaba ahí.

La muchacha comenzaba a desesperarse y Levi lo podía notar claramente.

- Tranquilízate, Petra. –gruñó enojado llamando la atención de su novia. Le molestaba su actitud porque ella no era de perder la cabeza salvo en situaciones complicadas y decisivas, pero ahora nada más por no encontrar a los demas provocó que Petra se enloquezca de esa manera.

La pelinaranja asintió, aun dudosa y para nada segura.

Eren le indicó a la pareja que Annie se encontraba en uno de los calabozos, por lo cual se encaminaron por aquel largo pasillo que estaba frente a ellos y, al hacerlo, notaron una luz proveniente de la última celda.

Petra acelero sus pasos y Levi no se quedó atrás, aunque maldecía ese accionar impulsivo de su novia, mientras que Eren los miraba dudoso.

- Luego de los cañones me quede sin ideas por un tiempo. –se escuchaba la voz de Hanji cada vez más cerca- pero, decidí que utilizaría a uno de los titanes que capturamos para las pruebas –explico dolida y con un llanto a punto de salir de su garganta por tal sacrificio- por lo que luego de matarlo, colocamos el cuerpo de Annie en el estómago del titán. Con semejante calor... -aplaudió victoriosa- ¡Mi plan fue perfecto! ¡Todo gracias a la información de Petra!

Cuando llegaron a dicha celda, Levi lo hizo con una ceja levantada porque le generaba molestia que ese plan hubiera funcionado. Él estaba a favor de usar los cañones y volar todo el cuerpo del titán hembra desde un principio, pero nadie decidió ir por el camino fácil.

Petra observó a todos los que se encontraban en la habitación: Armin, que miraba fijamente a Annie; junto con Mikasa, que estaba más seria de lo usual; y Erwin, que escuchaba atentamente a Hanji.

Retumbó el sonido de más pasos y algunos murmullos provenientes del mismo pasillo por donde ellos habían avanzado, y Petra se dio cuenta que se trataba de los soldados de la promoción 104 al escuchar las voces.

- ¿Qué haremos ahora, Erwin? –preguntó Hanji seriamente, mirando a Annie quien se encontraba inconsciente.

La pelinaranja cerró con fuerza sus puños, enojada por el estado de la joven Leonhardt. La odiaba con todo su ser, estaba molesta y completamente rencorosa con Annie.

Petra detestaba que no estuviera muerta puesto que ella era quien habia acabado con la vida de sus amigos y camaradas. Pero lo que más le molestaba de Annie era que mataba sin razón, aunque era humana mataba civiles inocentes y lo peor era que, si ella pensaba como Luke, no le importaba en lo absoluto el daño que causaba.

Levi miró de reojo a su novia, notándola tensa y furiosa. Petra temblaba mientras mordía con fuerza sus labios, seguramente para no decir nada imprudente o soltar algún frustrante grito.

- Bueno... -comenzó a hablar el comandante atrayendo la atención de todos.

- Matémosla. –sugirió Mikasa de una forma seca y sin levantar mucho el tono de voz.

Los presentes la miraron atónitos, bueno en realidad no todos.

El joven Ackerman asintió con entendimiento, haciendo que eso fuera incluso más sorprende. Mikasa y Levi nunca estaban de acuerdo, era extraño de ellos dos. Pero en este caso tenian un mismo enemigo: Annie Leonhardt, la titán hembra que había matado al equipo de operaciones especiales, lastimando a Eren y Petra en el proceso.

Siempre contigo [Rivetra]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora