Capítulo Veintiocho

4.1K 155 9
                                    


[WILL]

Salgo del baño con una toalla alrededor de la cintura y me encuentro con Beth delante de la cama abrochándose el pantalón. Se ha vestido rápidamente, porque no he tardado casi nada en ducharme.

-¿Tienes prisa? -la pregunto sin entender a qué viene tanta rapidez si decía que no quería moverse de la cama.

-Si, ehm..., Me ha llamado Loren, quiere..., quiere que la ayude con una cosa de las uñas o algo así. Ya sabes, cosas de chicas. -Sé perfectamente que miente y no entiendo a qué viene esto ahora.

-¿Nos vemos después entonces? Yo iré un rato a la fiesta, podrías acompañarme. Así después volvemos juntos. -Me acerco hasta ella y la beso con suavidad, sujetando con firmeza su cadera.

-Prometí a Loren que me quedaría con ella y con sus amigas que iban a venir. De todas formas pásalo bien ¿vale? Mañana me cuentas. 

Esquiva mi mirada torpemente, mientras la observo con el ceño fruncido sin enterarme de nada. ¿Qué demonios me he perdido en estos cinco minutos? Abre la puerta rápidamente y sale de la habitación sin decir nada más. 


[BETH]

Ya hace unas horas que salí de la habitación de Will con la mente bastante confusa, pero nada comparado con el estado en el que me encuentro ahora mismo. No hay nada peor que imaginarse algo que seguramente no sea verdad, pero es inevitable. Intento pensar por qué anoche estuvo con ella, por qué quiere hablar a solas con él y por qué le llama bombón. Al parecer habían quedado como amigos de nuevo, ¿no? En ese caso, ¿por qué no me cuenta que anoche estuvo con ella? ¿Y si lo de hoy fue una compensación por lo que hizo ayer con ella? No puedo aguantarlo más, necesito distraerme.

Todos se han ido ya a la fiesta, excepto Loren  y sus amigas que se quedarán aquí viendo películas y cotilleando, como suelen hacer normalmente. Loren me dijo que estarían en el salón, por si quería bajar, pero primero decido darme una ducha. Cuando termino me hago una trenza de espiga que cae por encima de mi hombro derecho y me pongo unos jeans con una camiseta ajustada negra de tirantes y una camisa de cuadros desabrochada por encima. Antes de salir de la habitación me pongo unas zapatillas cómodas que tengo en el armario y, con el móvil en el bolsillo trasero del pantalón, salgo directa al salón.

Cuando entro veo a las chicas sentadas alrededor de la mesa grande, hablando y riéndose de algo o alguien. 

-Al final te has decidido a bajar, ¿eh? -Me dice Loren mientras intenta esconder la sonrisa.

-Bueno, no es que haya mucho más que hacer. -Bromeo.

-Siempre haciéndote de rogar. Me gusta. 

-Estábamos hablando de Nicole. ¿Te puedes creer que ha ido a la fiesta esta noche? Es una falsa. -Suelta Layla de pronto, claramente molesta con lo de su amiga.

-Espero que al menos mañana nos cuente todos los cotilleos. -Contesta Lucy mientras sigue maquillándose las uñas de un color rojo fuerte.

-Seguro que sí. Voy a por algo de beber, ¿queréis algo? -Pregunto.

-No, gracias. Tenemos suficiente. -Contesta Loren a la vez que levanta su vaso para que pueda ver lo lleno que está.

Entro en la cocina, soltando un largo suspiro, y abro la nevera para coger mi bebida favorita de siempre. Mientras me estoy echando el hielo en el vaso se abre la puerta, pero no me giro porque sé que es alguna de las chicas.

-¿Falta algo ahí dentro? Puedo llevarlo ahora cuando termine.

-Lo cierto es que sí. -Contesta una voz masculina.

Deseo IncontrolableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora