DarkGirl in Troubles -James Sullivan-

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  - ¡Mira esta! -Stefanie. se abalanzó sobre una cámara Nickson por unos breves segundos antes de que su mirada viera una aún más bonita- ¡No, no, mejor mira esta!

Revoloteó por la tienda por tercera vez, yendo de un lado a otro, observando las cámaras por medio segundo antes de ver una aún más bonita y también con más funciones. Se sentía como el paraíso, como en casa. Arrastró a James hasta la siguiente cámara y lo obligó a seguirla por toda la tienda, pero el pelinegro ya se estaba cansando.
Él era de los que entraban en una tienda, compraban y se iban, no perdía tiempo viendo cosas que sabía no compraría después. Dejó que la pequeña figura de Satefanie. lo arrastra hasta la quinta cámara que veían en las dos horas que llevaban allí y se plantó a un costado.

- Oh... Está me gusta -Murmuró la peliverde, inclinándose para ver mejor la cámara.

- Cómprala -La voz ronca de James hizo que levantara la mirada, observándolo extrañada- ¿Qué? te gusta, llévatela.

Stefy. se apartó de la cámara lentamente y negó con la cabeza, moviendo su cabellera verde.

- No es tan fácil -Murmuró, moviendo su peso de un pie a otro.

Jimmy la observó sin entender bien que decía. ¿De que hablaba? Era, de hecho, bastante fácil y más porque era él quien pagaría por la cámara, no ella. Le dio un vistazo rápido a su reloj; ya eran casi las dos de la tarde. Soltó un bufido casi inaudible, era bastante obvio que pasaría allí todo el día con ella. Se plantó frente a ella, encogiéndola con su enorme figura y la tomó de los hombros.

- Cógela, la pagaré yo. -Los ojos del pelinegro se fijaron en los de ella, y por segundo, pudo notar un brillo de bondad, pero llegó tan rápido como se fue y pronto la soltó- No sé porque le das tanta importancia.

Stefy. volvió a la realidad al escucharlo decir eso último. Subió su mirada y frunció el ceño, ¿Tan vacío era por dentro?. Negó con la cabeza y tomó la cámara del aparador, se podía gracias a que estaban atadas y eran de prueba. Se agachó un poco, doblando la espalda y le tomó una foto.

- Eh, ¿Qué haces? -James se volteó justo después que el Flash le dio en la cara, capturando ese momento para siempre.

- Por esto, es que es tan importante -Stefy. le enseñó la foto recién tomada, casi pegándosela al rostro- Las fotos son para siempre. Una buena foto demuestra sentimientos, pensamientos... Muestra, a la persona vista en una perspectiva hermosa, ¿Lo ves? -Le aventó la cámara, dándosela en sus manos- Y si una cámara no me deja captar eso, no la quiero.

Stefanie. salió de la tienda lo más rápido que pudo después de haber dicho eso. Necesitaba aire y caminar; sí, tenía que despejar su mente. Sabía que no todas las personas lograban captar el arte de la fotografía, que no muchos la amaban como ella y que nadie entendería su pasión por eso, pero al menos pedía que nadie la cuestionara.
Pasó de largo por varias tiendas del centro comercial hasta que se dejó caer en uno de los banquitos del área central.

Se relajó poco a poco, le gustaba ver a la gente pasar; simplemente observarlos para olvidarlos unos segundos después. Se soltó el cabello, liberando la presión en su cabeza y se quedó así, limitándose a respirar y a existir por un rato.
Estaba pensando en regresar y soportar a Jimmy un rato más; quizás fue su culpa, no la de él.

- Así que aquí has estado. -James apareció frente a ella, Stefy. se arrimó en el banquito, dándole espacio.- Pensé que sería fácil encontrar a una persona con cabello verde. Pero resulta que no -Dijo mientras se sentaba.

Stefany. se encogió de hombros, no sabía muy bien que decir, así que prefirió quedarse callada. Ambos se quedaron así, en silencio por unos minutos hasta que Jimmy depositó algo en el regazo de ella.