Alice estaba agota, el ser psicóloga era agotador, aun mas cuando tenía que lidiar con pacientes que no paraban de hacerles piropos y halagos, sin poder evitarlo, su mente viajo más allá de lo que ella hubiera querido, y en su mente aparecieron recuerdos que para ella eran los más hermosos, Leonardo tenía en sus manos un hermoso ramo de rosas, y le dijo que alguien muy atractivo se lo había mandado, entonces ella con su inocencia tomo el ramo y leyó la carta del anónimo, Leo se la arrebato de las manos cuando ella lo miro con las mejillas sonrojadas, y expresión desorientada.
- Feliz Cumpleaños Bella- dijo este y la tomo por la cintura, para entonces besarla. Alice no lo creía, Por fin pensó ella
Despertó de sus recuerdos, eso era cosa del pasado, él era prohibido, siempre lo fue, y ella no entendía porque se dejó llevar por tan dulce agonía... Leonardo era un seductor de primera, debió suponer que algo así sucedería.
Al llegar a la casa, lo primero que quiso saber era si su amor estaba despierto, eran más de las 7 de la tarde, dejo su bolso y abrigo en el perchero, y subió las escaleras una por una, estaba muy cansada, pero ese cansancio fue sustituido por angustia al escuchar los gemidos de su precioso tesoro. Corrió escaleras arriba y abrió la puerta, su corazón se rompió en dos cuando vio un bulto lleno de mocos, estaba llorando mucho, lágrimas y lágrimas.
- ¿Ela?- pregunto- Amor...- espero respuesta
Daniela se dio la vuelta y la miro con ojitos hinchados.-Tía...- su voz se partió por tanto llorar, a Alice casi se le cae el corazón, no espero más y se acercó a ella, la tomo entre sus brazos y la abrazo tan fuerte que pensó que la partiría en dos, aflojo un poco su agarre, y la meció entre sus brazos, como cuando era una bebe que aún no conocía la crueldad de las personas. Ale lloro y grito toda la noche, y cuando se tranquilizó ella le pregunto.
- ¿Qué ha sucedido preciosa?
- Mis padres... Me regañaron porque Zayn vino... Y porque yo salí de la casa... pero Nana me dijo que podía y entonces... - Volvió a sollozar.
Alice no espero más y la volvió a abrazar, entonces se dijo así misma que preguntaría que había sucedido, aunque ya algo se imaginaba.
- Tengo hambre tía- dijo Daniela
- ¿No has comido?- pregunto Alice
- No... Mama despidió a Nana. Alice quedo anonadada, eso no podía ser posible, se tenía que poner en contacto con ella lo más pronto posible
- De acuerdo- dijo- ¿Qué quieres comer linda?
- Cualquier cosa...-dijo sin ánimos, Alice se espantó al oírla, esa no era su Daniela, algo había sucedido, algo malo.
- Bien... ¿te parece si comemos pizza? Daniela alzo los hombros en señal de que daba igual, Alice tenía que hacer algo...
- Con mucho queso, Jamón, maíz.... – dijo esperando que continuara ella
- Y peperoni, con anchoas, y... y ¡el vegetal verde que sabe muy rico!.
Alice se alegró mucho, su pequeña se había contentado, se arreglaron y salieron, encontrándose con las personas a las que no quería ni ver en pintura, el destino parecía siempre estar en su contra.
- ¿A dónde crees que vas con esa mocosa?- pregunto con desprecio Charllotte
- Primero, ella no es ninguna mocosa, es un encanto- miro a Ela y ella le sonrió- Segundo, lo que yo haga o deje de hacer no es cosa tuya, así que si me permites...
- Lo que hagas o dejes de hacer me importa- interrumpió Leonardo, a Alice se le revolvió el estómago- Ella está castigada.
- ¿y te parece que la mejor forma de castigo es dejar que muera de hambre?- pregunto horrorizada
- Ella está castigada, y la forma como la castigo no tiene por qué importarte, déjame recordarte que eres su tía, no su mama
A Alice le dolió lo que dijo, en su interior algo se rompió, ¿Cómo se atrevía?, ya no cabía duda, que había sido hipnotizado por la bruja de su hermana, ya no más aprecio, era rencor, rencor y odio ligado con lastima lo que sentía por ellos dos, se llevó a su preciosa agarrada de la mano y salió caminando como si no le importara lo que hubieran dicho, y así era, ya no importaba mucho.
Leonardo la tomo del brazo bruscamente- ¿A dónde vas?- ella se soltó deliberadamente de su brazo
- ¡No me toques pedazo de imbécil!, ¿Que no entiendes que me das asco?, ¡no me vuelvas a tocar en tu miserable vida!. No tengo porque seguir dándote explicaciones- dijo y salió cerrando la puerta de un portazo.
- ¡Que mujer!- dijo Leonardo frustrado y al ver a su esposa enmudeció
- Si, ¿a caso la extrañas?- preguntó dolida y guiada por el odio
- Amor yo... Lo lamento no quise-fue interrumpido
- Calla, vamos a dormir amor.
Ambos estaban marcados por el dolor, y actuaban como si no se dieran cuenta de ello
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Alice estaba contenta, Daniela charlaba muy animadamente con Catherine, la hija de Jully, su mejor amiga, y ambas niñas eran ajenas a la conversación de las dos adultas.
- ¿Qué vas a hacer ahora? – pregunto Julls
- Voy a ponerme en contacto con ella, no puedo dejarla sin empleo, comprare una casa y ella será parte de esta familia que voy a formar.
- Alice, me parece un poco excesivo lo que estás haciendo, no puedes simplemente llevártela sin que se den cuenta
- ¡Jully!- exclamo Alice- Tu más que nadie sabe lo que ambas hemos sufrido, ella ya no pude estar en ese ambiente tenso, como psicóloga sé que le hará daño en un futuro, y lo que quiero evitar, es dejar que suceda algo traumático en su vida.- dijo Alice, con amor y angustia
- Si en eso estoy de acuerdo, pero ¿que dirán sus padres?
- Ellos no harán nada, ni siquiera Leo- dijo con amargura
- Tienes razón también pero... ¿cómo harán para vivir?,
- Julls en Brasil la psicología da un buen sustento económico, ¡Con lo que ganare, daré de alimentar a media docena!
- Si pero, ¿no puedes esperar un poco? ¿Que pasara con nosotras dos?, ¿ya no nos veremos más?
- Sabes que seguiremos en contacto Jully, les pagare los pasajes para que puedan visitarnos, por favor, ¡necesito tu apoyo en esto!- Alice estaba que lloraba, fuerte era la palabra que definía a Alice.
Jully la abrazo fuertemente.
- Sabes que cuentas conmigo para o que necesites, para lo que necesiten, lo sabes- ambas se miraron y rieron – yo me encargare de ayudarte, desde aquí.
- Si, lo que necesito es ir asegurando primero un empleo y comprar una casa, en donde estamos todos... y ustedes.
- ¿Te refieres a la Nana?
- Sabes que si, pero su familia también, no puedo dejar que se separe de su familia.
- Tienes mucha razón, pero eso implica que te iras pronto para estar segura de que alla en Brasil tendrán todo, ¿cierto?
- Si, necesito que Ela se quede solo un tiempo más en aquella casa
- Si
- Bueno, jaja, creo que es muy tarde ya.- dijo Alice
- Tienes razón
Ambas se despidieron con un fuerte abrazo, y se juraron que estarían en contacto, en todo momento.
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Por fin!!
Capitulo nuevo!! Espero lo disfruten, asi culmina este pequeño maratón ;)
Gracias por favor si les gusto no se olvide de votar y comentar! :D
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Salvaje Z.M By: Daniela Peralta
FanfictionElla era lo que el mas odiaba Él era lo mas desagradable que pudo haber conocido Ambos se odiaban mutuamente... Pero eso era solamente "cosas del pasado"