So Different, So Close [Sin Editar]

4/40. Familia

Papá y Malcom llegaron tarde en la noche. Malcom tenia las mejillas coloradas de haber estado bajo el sol y un nuevo corte de cabello.

- ¿Quién eres y que has hecho con mi hermano?- interrogué a Malcolm de brazos cruzados.

- Ash - un pequeño apodo que me quedo con los años- Soy yo. Malcolm - dijo el apenado.

- ¡Malcom! ¡Te extrañé tanto!- dije corriendo hacia él y estrujandolo en un fuerte abrazo.

- " Papi yo tambien te extrañé, gracias hija" - imitaba papá en broma - Ven aquí y abraza a tu padre- dijo abriendo sus brazos.

- También  te extrañé - dije abrazandolo sin soltar a Malcom.

Durante el almuerzo, les conté sobre las semillas de zanahorias, patatas y acelga que había  sembrado. La pequeña huerta, fue idea y fruto de Malcom, pero nos turnamos para cuidarla. Les comenté sobre los nuevos vecinos y Malcom se emocionó ante la idea de hacerse nuevos amigos.

- El señor Mitch y Missy son agradables. Aunque su esposa y su hijo tienen cara de haber bebido agua del retrete - dije haciendo ademán con el tenedor, a lo que Malcom, escupió el jugo que estaba sorbiendo debido a mi comentario y nos echamos a reir.

- Ash que hablamos de los modales- reprendió papá .

- De acuerdo - me corregí - Cara de haber tomado agua del toillete.

Mi madre se llevó  la mano a la frente como diciendo << No tiene remedio >>.

- Choca esos cinco - dice Malcom mantiendo la palma en alto. Papá  arquea una ceja en reprobación  pero lo deja estar.

- ¿Qué? - digo en tono de inocencia - Malcolm  es la persona mas responsable que conozco. Si me da su aprobación, es que no estoy tan errada como los demás piensan .

- Es cierto - acuerda Malcolm dándome la razón.

- ¡Van a volverme loco!- dijo papá negando con la cabeza. Relaja la mirada, nos sonrie y luego nos cuenta sobre sus hazañas de fin de semana.

Mas tarde, levantamos la mesa. Yo lavo, Malcom seca, mamá pone la vajilla en el lugar y papá busca en YouTube rock de los años 50. Cuando todo esta listo, hacemos los muebles a un lado y nos ponemos en pareja a bailar. Cada vez que comienza una pista nueva, cambiamos de pareja, y asi, todos terminamos bailando con todos. Todos reimos y chocamos. A lo último, terminamos haciendo pasos locos que nada tienen que ver con la musica. Finalmente caemos rendidos sobre la alfombra, todos cabeza con cabeza como formando una gran estrella. Las luces se apagan y permanecemos cautivados mirando las proyecciones enfocadas hacia el techo del cielo nocturno. Algunas son imágenes fabulosas del telescopio de la NASA y otras, de acampadas y vacaciones. Una de las fotos - mi favorita - es frente a un lago en - no recuerdo que parque nacional - y sentados de espaldas a la camara. En ella, estamos Malcom y yo, sentados sobre un tronco de pino. Él, esta de unos nueve años y señala la primera estrella a lo lejos. Yo - de seis - lo observo con admiracion. Esa noche no solo aprendí  los nombres de muchas constelaciones, sino que, Malcom le dió mí  nombre a la estrella de la foto, la cuál  luce como un diminuto puntito blanco en el dedo indice que mira al cielo.

Y en ese momento, me doy cuenta que las personas, somos con las estrellas, a veces muy cercanas, a veces muy lejanas, pero todos tenemos algo en nuestro interior, ese algo que irradiamos, un cierto brillo que en el infinito cosmos, nos hace distinguir como pequeñas luciernagas en busca de vidas que iluminar.

....

Bien, hasta aquí llegó la parte introductoria. Ya tienen una mera idea de como piensan y como sienten mis niños. Ahora si se viene lo divertido.