Capitulo 4

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El dolor en mi pecho aumenta y mis piernas tiemblan, debilitándose, mientras lágrimas se acumulan en mis ojos.

No...por favor...no...

Empiezo a maldecirme, a odiarme más que antes. Todo lo que hago esta mal, solo causo dolor y temor. Soy un fraude...un monstruo...Ya no puedo más...

Si solo la hubiera sacado...maldita sea...

Sigo maldiciendo en mi mente, sin saber que hacer, sin saber que sentir.

De repente, escucho algo activándose. Miro al frente y veo que las manos de Kate empiezan a brillar de color azul.

Mis ojos se abren como platos y me quedo estupefacto mirándola. ¿Funcionó?

En ese instante, sus manos brillan más y empieza a temblar levemente. Ella sube su cabeza y me sonríe con sus ojos cubiertos por su cabello. Su manos brillan más y su temblor aumenta. De momento, el brillo se refleja en el cristal y este se rompe en millones de pedazos. Kate me sigue sonriendo, con sus ojos aun tapados por su cabello. Ella sale del contenedor y sus manos brillan aún más. Ella sigue "mirando" hacia mi dirección hasta que camina, para luego correr hacia mi. Mientras corre sus manos brillan más y más, sin saber que hacer me quedo paralizado viendo como se me acerca. En ese momento, el temor se apodera de mi. Tiemblo sin saber lo que puede hacer y la miro con terror. Ella corre y se abalanza en el aire para caerme encima. Con un impulso inesperado cae sobre mi y ambos caemos al suelo.

Ella se apega a mi, como un imán, sus brazos y piernas alrededor de mi. Me quedo estupefacto de nuevo, sin saber que hacer, hasta la escucho sollozar. Empieza a temblar, pero no por la reacción, sino por el medio. Se aferra más a mi, juntando más sus brazos y piernas alrededor de mi. Siento sus lágrimas caer en mi ropa, humedeciéndola y sigo escuchando sus pequeños sollozos.

El dolor en mi pecho regresa , por verla de esta manera y por que todo esto fue mi culpa, pero una leve y dulce sensación se mezcla con el dolor, por saber que esta bien. Acaricio su cabeza, en forma de confortación. La agarro con mis brazos y la aferro más a mi para hacerla sentir segura.

-Tranquila...todo esta bien, te tengo...-sigo acariciando su cabeza mientras ella sigue llorando.

Poco a poco, Kate se va tranquilizando hasta que deja de sollozar y temblar. Su peso cae completamente sobre mi y su respiración se vuelve normal y pacífica. Creo que se quedo dormida.

-Kate-la llamo para ver si responde, pero no lo hace, esta dormida. Todo esto debió cansarla, la entiendo.

Me levanto poco a poco, tratando de no dejarla caer. Ya que ella esta apegada a mi por sus extremidades que están alrededor de mi, decido cargarla de esa forma. Me levanto por completo y pongo mis manos debajo de ella, prácticamente en su trasero, para que no se caiga. Dejo que su cabeza repose en mi hombro y me la llevo de esa manera. Debo admitir, para una niña pequeña de esta forma.

Salgo del laboratorio y del lugar. Cierro todo como puedo y me dirijo al auto. Trato de abrir el auto sin dejar caer a Kate y la acuesto en el asiento del pasajero. Me siento en el asiento del conductor y conduzco devuelta a mi lugar. Mientras guío, no evito ver a Kate dormir por el rabillo de mi ojo. Se ve tan linda y delicada, como una muñequita, fue así desde la primera vez que la vi. No evito en sonreír y sigo conduciendo. Cuando llego a mi laboratorio, la bajo y la cargo a su habitación. La acuesto en su cama, la arropo y apago las luces para que duerma bien.

Suspiro, hoy si que fue un día medio agotador. Decido ir y darme una ducha, relajarme y despejar mi mente de todo esto. Me quito mi lentes, mi ropa y suelto mi cabello que esta un poco largo. Entro en la ducha y dejo que el agua caliente corra por mi cuerpo. Suspiro, dejando que mi cabello mojado cubra mis ojos. Hace mucho no me relajo, siempre he estado preocupado o estresado por algo. Ni modo, así es la vida de un científico, ¿no?

Lavo mi cuerpo y muchas imágenes cruzan por mi cabeza. No las quiero recordar...no ahora...ya no esta. Siento una leve calidez en mi rostro y frunzo el ceño frustrado. Agito mi cabeza y me dio varios golpes en ella con el propósito de olvidar y concentrarme en otra cosa. Termino de ducharme y salgo de la ducha. Me seco y pongo la toalla alrededor de mi cintura como siempre. Salgo del baño y camino hacia mi habitación.

Siempre me pasa...Cosas tan diminutas y simples, me hacen recordar cosas que quiero olvidar. Es tan frustrante, me siento como un idiota que vive en el pasado. Me visto con una camisilla blanca sencilla y unos pantalones a las rodillas. Me dejo caer en mi cama y miro el techo blanco. Muchas veces he hecho esto, quedarme toda la noche, sin poder dormir, mirando el techo blanco, pensando o simplemente dejando que el tiempo pase sin tener nada en mente. Incluso, hay noches en que simplemente me hago preguntas, pero la más común es, "¿Por que sigo con vida?" Ya no le encuentro el propósito de ello. Como habia dicho, todo lo que hago esta mal, no hago nada bien, todos sufren por mi culpa.

Con el tiempo, el sueño me vence y caigo en el, mientras las memorias vuelven en mis sueños.

A new beingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora