Mi Pequeño Sesos De Alga

Capítulo VIII: Tour Grace

Kate:

Oliver era como tontin de los 7 enanitos, pero era tierno, recorrimos todo el campamento y me explicó con de lujo y detalle todo el lugar. Nos reímos a gusto y disfrutamos de la compañía del otro, nos acercamos a un lago que había y nos sentamos como indios mirándonos de frente. Nos hicimos preguntas para conocernos, hacíamos chistes y esas cosas, Oliver era el tipo de chico agradable, nerd y por supuesto tímido. Con el poco tiempo que llevábamos juntos nos hicimos buenos amigos; igual estaba preocupada porque no veía a Sebastian y nadie sabía de él. Ya era hora de comer y con Oliver fuimos como si siempre nos hubiéramos conocido, puso su brazo al rededor de mi y comenzamos a caminar al pabellón. Oliver empezó a hablar sobre lo increíble que era la mitología griega, yo solo me reía de como habla de todo, le brillaban los ojos al hablar de esto. Llegamos al pabellón y en una de esas miradas rápidas me dí cuenta de unos ojos grises mirándome, me quedé paralizada de inmediato.
-¿Qué pasa? - Oliver se puso de frente y me tomó los hombros, le agradecí mentalmente por tapar a Sebastian.
-Nada nada - sonreí forzadamente - Vamos a comer, ¿Si? - lo tomé del brazo y fuimos hacia donde había una vacía.
-Llevamos poco tiempo juntos, pero ya te conozco cuando mientes - me sonrió y me tocó la nariz.
Rápidamente una mano le tocó el hombro a Oliver.
-Hola Oliver, ya conociste a mi novia Kate, ¿Cierto? - sonrió de lado. Oliver extrañado asintió y le devuelve la sonrisa.
-Si, es muy simpática, pero Kate no me dijo que era tu novia.
Seriamente después le pegaría a Oliver por hablar de más.
-¡Si! No tuve tiempo - le sonreí a Sebastian - pero ven siéntate - golpee la banca al lado mío. Sebastian sin despegar su mirada de mi, se sentó y con su brazo me rodeó.
-¿Así que le diste un Tour? - hizo su abrazo un poco fuerte.
-Si - Oliver se puso nervioso - Sebastian no tienes porque ponerte así - se acomodó sus lentes.
-Yo estoy bien Oliver, el que parece raro eres tu, estas nervioso, ¿Hiciste algo? - se inclinó así él.
-No, claro que no... vamos Sebastian me conoces - cada vez bajaba más la cabeza.
-¿Sebastian puedo hablar contigo? - le pregunté molesta.
-Que coincidencia yo también quiero hablar contigo, bueno, Oliver hasta luego - le tendió la mano y Oliver tímidamente la estrechó, Sebastian obviamente le apretó fuerte la mano.
-Tienes fuerza Sebatian - se quejó Oliver con una sonrisa ladeada.
-Si, entreno todos los días.
Con toda esa conversación y silencio incómodo se terminó todo y arrastré a Sebastian cerca del Lago.
-¿Qué te pasa? - le pegué en el brazo.
-¿Qué te pasa a ti? ¿Por qué pasaste toda la tarde con ese? - comenzó a subir el tono.
Bufaste - Primero a mi no me vengas a levantar la voz ¿Entendido? y segundo ese al que dices se llama Oliver y es un gran chico, se volvió mi HERMANO, ¿Escuchaste? - terminaste ahora tu levantando la voz. Estabas tan enojada, triste y decepcionada con Sebastian, te diste vuelta y esperabas una disculpa por parte de él.
Seguía el silencio y te volviste a girar para verlo, esqueletos los sostenían de pies a cabeza; por un lado te sorprendiste y por otro te dio gusto verlo así. Te quedaste viéndolo por un buen rato hasta que unas manos se posaron en tus hombros, de inmediato supiste que estaba en problemas.
Suspiraste y los esqueletos de hundieron en la tierra dejando a Sebastian tendido en el suelo.
-Perdón - miraste a tu padre.
-Después conversamos en la cabaña - esta vez no estaba tan serio lo cual te extrañaste.
Nico fue a conversar con Sebastian alejados de mi y me quedé con la compañía de Will, el cálido Will.
-No me gusta ser chismoso, pero... ¿Que pasó cariño?
-Tuvo celos de alguien que no debería tenerlo - suspiraste.
-Oh, hombres, siempre pensando en malas situaciones, aunque yo sea uno igual no entiendo porqué pasa, pero no te preocupes se le pasará luego - me guiño un ojo.
-Lo se, pero disgusta que desconfíen de uno
-Te entiendo, que te parece si... ¿Jugamos a captura la bandera? Le diré a Quirón que haga una con sólo nosotros - sonreía emocionado.
-Esta bien pero me tendrán que ensañar como se juega
-No te preocupes James Grace te puede enseñar, dicen que es el mejor en esta generación.
No por favor, no quiero otra discusión pensaste.
-Bueno, nos vemos Will
-Nos vemos Kate
Y Will se alejó hasta llegar a la Casa Grande.
Necesitaba un rico baño, miraste por alrededor y no había nadie, aproveché y me saqué la ropa hasta quedar en ropa interior, de un tiro te metiste al lago. El agua estaba fría pero rica, disfrutaste un buen rato nadando o sólo descansando.
-¿Disfrutando del agua no? - una voz femenina se escuchó.
Fue tan repentino que te hundiste de inmediato, después asomaste tus ojos para ver quien era.