Del Otro Lado (Agustín Bernasconi)

Parte 5

Cuando Mara dijo que tendría las tardes ocupadas no creí que fuera tan literal, hoy comenzaba su rutina de ser guía de turistas y por lo que me había dicho comenzaba de una de la tarde a ocho de la noche.

Bueno por lo menos ya no se podía quejar de que no tenía nada que hacer, yo por mi parte tenía un chorro de tarea y era ahora cuando la idea de viajar en metro no parecía tan llamativa como en la mañana cuando decidí dejar el carro en casa.

- ¡Vale espera!- se me atravesó Mara en el camino.

- ¿Qué te pasa? ¿Quiéres ser atropellada?- lo cierto era que debido a que mi facultad quedaba en el extremo opuesto de la parada del metro había decidido traer mi bicicleta y transportarme en ella cada que no trajera auto.

- Ay no seas exagerada, ni que me pudieses atropellar con eso.

- No la escuches Rae solo te tiene envidia- abracé a mi bicicleta.

- Bueno ya que terminaste de hablar sola, ven, te quería presentar a mi grupo de túristas.- la muy insensible me empujo ante un grupo de chavos.

- Un gusto conocerlos, bienvenidos a Monterrey... bueno bye- me voltée lo más rápido posible y tomé mis cosas de nuevo.

- ¿Qué? ¿Eso es todo? Dijiste que sí había chicos guapos me ayudarías, y los hay, así que cumple.- me regresó ante el tumulto de gente.

- Bueno hola, mi nombre es Valeria y me encantaría quedarme pero tengo mucha tarea así que más me vale apurarme.- y me devolví a lo que estaba haciendo.

- Valeria no seas grosera y ayudáme, mira ellos son Michael, Caro...

- No te molestes, después tendré la oportunidad de conocerlos, pero me tengo que ir- y sin dejarla objetar de nuevo, la dejé con el grupo e chavos y me encaminé a la estación del metro.