© La chica de los RapPlays ↪Kronno & Zarcort

8. Los vecinos siempre cortan el rollo (3/3)

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Me fui de la cocina y Nery me siguió, riendo.

-¡Hey, ______! ¡Nery! ¡Tomad!

Zarcort nos tendió un cubata con un líquido transparente dentro y las dos aceptamos. Lo olí y arrugué mi cara. Posé mis labios sobre el filo del vaso y sorbí. Un escalofrío recorrió mi cuerpo.

-¡Uf...! Qué fuerte -dije.

-Está bueno -dijo Nery-. ¿Nunca lo has probado o qué?

-Claro que sí, pero no me acostumbro.

-¡Que comience la fiestaaa! -gritó Cyclo.

La música se puso más fuerte y todos comenzamos a bailar. Bueno, no exactamente, sino que movíamos el cuerpo al ritmo, no sé si me explico.

En un momento, llamaron al timbre y bajaron la música.

-¿Has invitado a alguien más? -le preguntó Zarcort a Kronno, con el ceño fruncido.

-No -respondió él, con el mismo gesto.

Kronno caminó hasta la puerta y la abrió.

No podíamos ver quién era la persona que estaba al otro lado, ni escuchar la conversación. Pero Kronno parecía avergonzado y hablaba en tono serio.

Finalmente, se despidieron y Kronno volvió al salón.

-¿Quién era? -preguntó Katia.

-La vecina -reímos-. Dice que no hagamos tanto ruido, que es muy tarde y la gente está durmiendo -nuestras carcajadas aumentaron la intensidad.

-Callaos, que nos van a regañar por reírnos también -dijo Piter-g y volvieron las risas.

Continuamos con la fiesta, pero decidimos quitar la música para no recibir más quejas.

La fiesta acabó a las dos de la mañana, cuando se fueron yendo Piter-g, Cyclo y sus novias.

-Yo también me voy a ir -me dijo Nery. Creí escuchar murmullos por parte de las otras dos chicas.

-¡Jo...!

-Lo siento -se encojió de hombros-. Pero otro día me mandas un WhatsApp y hablamos, ¿vale?

La abracé durante bastantes segundos y mientras, le acariciaba la espalda.

-Me alegro de haberte conocido -dije.

-Yo también, guapa -respondió-. ¡Adiós, chicos! -le dijo a los demás.

-¡Adiós! -respondieron los cuatro.

-Vete ya -escuché a Anna, lo decía para que solo la escuchara Katia, y estas dos rieron.

Ayudé a recoger el desorden de platos y vasos de plástico, llevándolos a la cocina y tirándolos a la basura.

-No hace falta que hagas nada -dijo Zarcort.

-¿Por qué no?

-Porque eres la invitada.

-Pero he ensuciado, así que lo justo es que yo también colabore.

-Pero yo te digo que no lo hagas.

Me arrebató los platos y los vasos con cuidado de que no se cayeran y los tiró, él mismo, a la basura. Yo sonreí sin saber qué decir.

-Gracias -dije y ladeé la cabeza.

-No me las des -cogió un trapo y se secó las manos-. En todo caso, gracias a ti por venir -sonreímos.

-Supongo que me voy a ir ya.

-¿Quieres que te acompañemos? -dijo Kronno, entrando a la cocina.

-No hace falta, cogeré un taxi.

-Está bien -Kronno se me acercó y me dio un par de besos a modo de despedida-. Adiós.

-Adiós, ______ -Zarcort también se despidió como Kronno.

-Adiós chicos. ¡Adiós, Katia! ¡Adiós, Anna! -alcé la voz para que me escucharan.

-¡Espera, mujer! No te irás sin darnos un beso, ¿no? -dijo la pelirroja.

Y eso hice. Les di a cada una otros dos besos en las mejillas.

Abrí la puerta y caminé hacia el ascensor, que estaba a unos pasos. Miré hacia la casa y vi a Anna agitando la mano y con una sonrisa que dejaba ver sus dientes, y a Katia sonriendo, al contrario que la otra chica, sin mostrar sus dientes.

Cuando vino el ascensor, agité la mano y entré en este. Ellas cerraron la puerta.

Era raro... antes me habían hablado en tono amenazante y ahora, se despedían con amabilidad.

Bueno..., ahora no me centraría en eso. Volvería a mi casa y me acostaría. Mañana (bueno, hoy por la mañana, mejor dicho) tendría que preparar una nueva canción.

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Y con este capítulo acaba la maratón. ¡Nos vemos en el próximo! Bye!^^