Pasillo equivocado

Capítulo 3

Me despierto con la melodía del remix "TRNDSTTR - Black coast" sonando a modo de alarma de mi móvil.

Me levanto de un salto que refleja la emoción que siento por comenzar la universidad y, seguidamente, me dirijo al baño, comenzando el día con una ducha fría, que hace la labor de lavarme y ayudarme a despertarme, y, al salir del agua, puedo oír como hay gente caminando por nuestro pasillo, mientras que yo me comienzo a vestir y maquillar, finalizando a la hora que que deseaba.

Cuando salgo, adentrándome al pasillo, me encuentro con un gran dilema: no sé dónde está la cafetería y tengo que desayunar.

Oigo, aliviada, como una puerta se abre a mi izquierda, pudiendo ver como Michael sale ya preparado de ella.

-Qué cara. -digo nada más verle, frunciendo el gesto.

-No soy madrugador, que digamos. -responde, riendo levemente.

-¿Te dejo maquillaje? -ofrezco con una sonrisa socarrona, comenzando a recorrer el pasillo, con el chico junto a mí- Una cosa, ¿sabes ir a la cafetería?

-Sí, ¿desayunamos? -pregunta, abriendo la puerta del pasillo, dejando a la vista las escaleras que conducen a la planta baja.

-Claro. -acepto, saliendo hacia la escalinata- Te digo en serio lo del maquillaje, estás horrible. -le repito, enseñándole un pequeño neceser blanco que saco del bolso, el cual contiene mi maquillaje.

-El día que me maquille, ¿puedes darme de collejas hasta que me despierte? -pregunta, riendo de forma suave y somnolienta mientras bajamos los escalones tapizados.

-Ni lo dudes.- respondo, escuchando de fondo el golpe sordo que realizan nuestros pies cada vez que bajamos un escalón.

Continuamos charlando de camino a la cafetería, cruzándonos con más alumnos medio dormidos cuyos rostros se asemejan al de Michael.

¿Soy la única que tiene ganas de empezar?

Me siento un bicho raro.

Finalmente, tras recorrer los distintos pasillos de color amarillo pastel revestidos con madera clara por la parte baja, llegamos al comedor, del mismo color que los pasillos ya mencionados, con mesas blancas de plástico, material del que están hechos los respaldos las sillas, del mismo color también, y sujetos por patas negras de frío metal.

Voy hacia el buffet de desayuno, donde coloco sobre un plato blanco, que he cogido al principio, una manzana y una magdalena grande de frutos rojos, volviendo hacia una mesa libre al lado de la cafetera, que está separada del resto de la comida.

Coloco mi desayuno sobre una mesa, a la cual se acerca Michael un poco después con dos vasos de cartón, llenos de café humeante.

-¿Me has cogido uno? -pregunto frunciendo el ceño en cuanto deja las bebidas en la mesa.

-Eh...-comienza, sonriendo incómodamente- Sí, toma. Voy a por más café. -informa, yendo de vuelta a la cafetera, haciendo que ría levemente mientras cojo la bebida caliente.

(...)

Aparco mi scooter roja en la plaza gris con cuatro rayas blancas que delimitan el espacio, colgándome el casco del codo para, seguidamente, guardarlo en un hueco bajo el asiento que cierro con llave.

Me paro a observar el lugar, un gran edificio construido en colores blancos y grises que sólo son alterados por las numerosas ventanas que reflejan el interior del edificio y sus clases.

Camino hacia allí, atravesando el camino regular de piedra, para adentrarme a la estancia en busca del aula donde comenzaré mis clases.

-¿Está libre? -pregunta un chico de cabello rubio, señalando con sus carpetas el asiento que está situado junto a mí.

-Sí, siéntate si quieres.- respondo sonriente, mientras continúo ordenando mis cosas en el pequeño pupuitre de madera, pues solo caben un cuaderno y un estuche.

El chico de antes se sienta en la silla de color azul, dejando las cosas en la tabla pegada a un reposabrazos que queda delante nuestro y hace la labor de mesa.

-¿Cómo te llamas? -pregunto curiosa, girándome lo máximo posible en el poco espacio entre mi estómago y el pupitre.

-Jackson. -responde con una sonrisa amplia, alzando la mano, la cual yo estrecho.

-Yo Meredizth. -informo al igual que él, volviendo a fijar mi vista en el cuaderno y mi estuche en cuanto vislumbro al profesor adentrándose al aula, yendo en dirección a la pizarra y su mesa, situadas en frente de todos los alumnos, cuyos asientos, colocados de forma escalonada, estan llenos de universitarios con cara de sueño.

(...)

-Vaya, pues no hemos hecho nada. -bufo colocándome el asa de la mochila en el hombro.

-En los primeros días solo hay presentaciones. -responde él, caminando hacia el aparcamiento junto a mí.

-Esa es mi moto- informo señalando mi scooter -, hasta mañana. -me despido sonriente mientras me acerco hacia mi medio de transporte.

-¡Hey, Meredizth! -me llama Jackson en cuanto me alejo un par de metros -. ¿Vas a ir hoy a la fiesta de los Alpha?

-¿Fiesta? -pregunto frunciendo el ceño.

-Los de una fraternidad van a hacer una fiesta por principio de curso. -explica él sonriendo.

-Ya se lo diré a los del pasillo, nos vemos allí. -me despido sonriente mientras voy hacia la moto y saco el casco.

Ya sentada sobre mi scooter, me despido finalmente de él con un gesto de la mano y arranco, iniciando el camino de vuelta al campus.

(...)

-¡PASILLO 2C! ¡REPÓRTENSE! -exclamo, haciendo que mis compañeros se asomen por la puerta y, al ver que soy yo, salgan al exterior de sus habitaciones.

-¿Qué pasa? -pregunta Aaron, con cara somnolienta.

-Hoy hay una fiesta... -comienzo a explicar, caminando por el pasillo de forma pausada y tranquila con las manos entrelazadas en mi espalda- Yo voy...

-¿Tú no eras la que venía sólo a estudiar? -pregunta con una sonrisa socarrona James, interrumpiéndome.

-Calla, y déjame acabar, pesado -digo parándome un momento frente a él, pero, seguidamente, reanudo la marcha sobre el suelo frío del pasillo, que suena con cada paso que doy-. Voy porque, de momento, no voy a hacer nada que no sean presentaciones hasta la semana que viene, ¿os venís?

-¿Cómo te has enterado? -pregunta Michael frunciendo el ceño.

-Me lo ha dicho un amigo de clase, bueno, no quiero ir sola, ¿venís o no? -finalizo, mirándolos con mi mejor cara angelical.

-Yo me apunto. -adjudica James, dando un paso al frente con una sonrisa más amplia, haciendo que de pequeños saltos como una niña pequeña.

-Venga, va, yo también. -dice Aaron, haciendo que les sigan el resto del pasillo.

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Un beso ❤

-writerspain32