Cuando la realidad llama.

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Podía escuchar una voz en la lejanía.

Una voz que me llamaba, muy tenuemente pero la escuchaba.

Rápidamente se volvió más y más fuerte.

De repente todo a mí alrededor empezó a temblar y a desmoronarse.

Podía ver como el cielo se empezó a oscurecer desde un punto en el centro del mismo y fue volviéndose cada vez más grande y absorbiendo todo lo que se había creado a mí alrededor.

Hasta dejarlo todo en una penumbra absoluta.

Y aquella voz que escuche en un inicio se volvió tan fuerte que hasta podía sentirla a mi lado.

De repente simplemente... desperté.

-¡Hey Charl ya terminó la clase, despierta!- exclama fuertemente Alice.

Ella llevaba ya un rato llamando a Charlot para que reaccionara de su sueño.

Ella no se atrevía a tocarla o a moverla mientras dormía ya que eso provocaba un ataque de nervios a Charl por no saber que era lo que pasaba y quien era la que la movía de un lado a otro.

Las veces que Alice se quedaba a dormir en casa de Charl y ella por casualidad cometía ese error de moverla cuando dormitaba se encontraba que ella de un momento a otro comenzaba a gritar de ansiedad y habría los ojos de par en par llamando a Alice y preguntando en donde se encontraba.

No era una escena bonita de ver, en realidad era triste, inclusive ella ha llegado ha ponerse en posición fetal en medio de la habitación y lloraba llamando por Alice o Natalli.

Aunque eso fue ya hace varios años y ella esperaba que ya hubiera superado ese trauma, pero aun así Alice no quería arriesgarse y se limito a solo llamarla.

Y finalmente ella despertó.

Al momento de que desperté gire mi rostro hacia la dirección de donde se dirigía ese ruido molesto y estire mi mano para callarlo, lo hice sin miramientos pero solo pude tocar aire.

Poco apoco mis sentidos empezaron a funcionar y aunque aquella voz se seguía escuchando algo distorsionada lo único que pude pensar en ese momento fue ¿en donde estaban mis audífonos?

Se sentó firme en su asiento y empezó a toquetear sus bolsillos en busca de su teléfono, los audífonos deberían de estar conectados al mismo, si ese no fuera el caso habrían serios problemas.

Pero para su fortuna hay se encontraban, y para el momento en que ella encontró sus audífonos ya se había despabilado mas o menos, y lo primero que hizo fue hacer una pregunta.

-¿Alice estas hay?

-Si, lo estoy, si eres difícil de despertar muchacha, ¿tienes idea de las veces que te llame?

-Jeje ¿en verdad esperas que responda eso?- Dice Charl en un tono semi-dormida.

-Jajaja no, lo que espero es que te seques esas gotas de baba que tienes en la mejilla.

El rostro de Charl re repente se ruborizo y paso la manga de su sweater de un lado a otro en su rostro.

-Jajaja no te preocupes no hay nadie en el aula, todos salieron porque el profesor de la siguiente hora falto y todos fueron a sus casas a esperar volver en la tarde.

Charl después de secarse la baba en su rostro intento concentrarse para ver si escuchaba a alguien en el aula solo para estar segura y solo pudo escuchar la voz de Alice a su alrededor.

-Pues así parece- reafirma Charl con voz serena.

-Entonces... ¿el estuvo aquí?- pregunta Charl.

"Tal parece que no"

Responde Alice con una voz algo baja.

-Entonces hoy no vendrá- dice Charl con un rostro que simplemente describía por si solo como se sentía.

Era como si sus bellos ojos de repente perdieran momentáneamente un poco de su brillo.

-(¿Que se ponga en ese estado solo porque el aun no aparece?)- es lo que piensa Alice al ver el rostro de Charlot.

El amor sincero ciertamente es algo que va mas allá de los conocimientos de Alice que nunca tuvo una relación amorosa que valga la pena mencionar.

Como acto seguido Alice dice.

-No te preocupes, aun queda todo el día por delante así que puede que aparezca por aquí tarde o temprano.

Las palabras de Alice logran subirle el ánimo a Charlot y de esa manera, sus ojos recobran su hermoso brillo.

-¡Es cierto!- exclama Charlot con voz animada.

-Entonces dirijámonos a la cafetería, se me antoja algún chocolate o algo así jajaja. dice Alice parra alentar a Charlot a salir del aula.

Charlot se levanta de su asiento seguida por Alice, esta toma su mano y se dirigen hacia la puerta, no antes de que Charlot diga en voz baja para si misma.

-Solo tengo que esperar... ¿verdad?

Y con esas palabras la puerta del salón se cierran tras de si.

A ojos cerrados - Pausada Por Edición-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora