Confusión en el alta mar(Luffy x Boa Hancock)

Parte 19 Mar de los Anhelos II

Cubierta del Sunny, 8:10 pm

-Pero ¿qué estás diciendo?- pregunto molesto, confundido y un poco decepcionado el joven de cabello verde

-Señor Roronoa Zoro, no puedo aceptar a casarme con usted...-dijo de manera muy seria la señorita de cabello negro, mientras ocultaba su rostro

-Soy un idiota...-Murmuro con una sonrisa forzada y una mirada perdida mientras se alejaba de donde estaba ella

-¿A dónde vas?- pregunto ella

-Si no te tengo, no puedo estar en el mismo barco que tu- dijo mientras se quitaba la camisa y ataba sus espadas con la misma a su cintura

-Pero eres el vice...

-No me importa ninguno de esos cargos ahora, ya que solo soy un hombre común y corriente, un sanguinario, alguien que solo piensa en sí mismo y que lo único que hace es actuar conforme a su ego o no fue así como me llamaste ¿niña demonio?-nuevamente la mirada herida de el vice capitán apareció en su rostro y un tono de melancolía se escuchaba en su voz, hizo una pausa y dijo- además- ya más calmado- Luffy ya nos dio la orden a Sanji y a mí de que la banda se desintegrara, mañana teníamos planeado decirles...

-¿Pero qué demonios dices?- pregunto completamente confundida

-Lo siento, tengo que irme, si quieres saber más pregúntale a el capitán...-sonrió nuevamente a la mujer que tanto amaba y se lanzo al mar en la oscuridad de la noche. La lluvia empezó a caer y lagrimas salieron del rostro de la dama al momento de caer de rodillas en la cubierta.

Cubierta del Sunny, 8:05 PM

En esa noche le tocaba la guardia de proteger al Sunny a nada más y nada menos que a la arqueóloga más famosa y reconocida de todo el grand line. Después de haber ayudado al mejor amigo de su novio, ella se encontraba exhausta sin mencionar que se estaba un poco confundida respecto a todo, aunque en el fondo ella sabía la razón de tanto sufrimiento. "Roronoa Zoro" era en lo único que podía pensar en ese momento, hasta que unas manos asperas provenientes de su espalda  la tomaron por la cintura y unos labios resecos empezaron a besar su cuello

-Hola Nico Robin- le dijo al oído de manera sensual el guapo muchacho
-Hola Roronoa Zoro- contesto ella de manera fría

-¿Recuerdas nuestra promesa? He traído un poco de sake de la bodega y unas mantas, creo que empezara a llover dentro de poco...

-Gracias, pero no es necesario, puedo cuidarme sola

-Robin, si es por lo de en la tarde, lo siento mucho, prometo no ser tan celoso cuando nos casemos...- automáticamente, el joven cambio de color y se volvió rojo como un tomate mientras trataba de pensar en un tema mejor para que ella olvidara eso que el acababa de decir

-¿Casarnos tu y yo?- pregunto confundida ella

-*Glup trago saliva* si, tu y yo... para toda la vida, tener hijos, vivir en un lugar tranquilo, no se tener alguna mascota, tu les enseñaras cosas de historia a los niños, y yo les enseñare a cómo defenderse... Me gustaría que fuera una niña, para que sea igualita a ti, sabes me gusta mucho el nombre Mabel, y que podamos ser felices, los tres, o cuatro, o los nueve, es decir tu, yo y nuestros hijos...- contesto un poco apenado, pero con mucha emoción y convicción Zoro a su muy amada Nico Robin

-Fu fu fu... así que al final el espadachín si tenía corazón... Lástima que todo esto fue un engaño- dijo ella mientras se apartaba de el