TIEMPO DESPUES:
- TaeHyung- sollocé abrazandolo con fuerza,sintiendo mi cuerpo temblar. Me aferré lo mas fuerte que pude a él, para que esa sensación estuviera ahí.
- te voy a echar mucho de menos- susurró en un sollozo, pegando su cabeza a mi cuello.
-mi amor, nos veremos pronto...- me separé y lo cogí de las mejillas con manis temblorosas, acariciando sus labios con mis dedos pulgares- son un par de años... Solo un par de años - pasé las manos por su cabello, acariciandolo. Pegué su frente a la mía, dejando que por primera vez me viera llorar.
- te amo. Te amo, no te olvides de mi porfavor... No te olvides de mi- puso las manos en mi pecho, cogiendo mi camisa con algo de fuerza.
- es imposible olvidarse del amor de mi vida- susurré antes de juntar nuestros labios en un beso, que se mezclaba con nuestras saladas lágrimas.
Nos separamos y él cogió su maleta, secandose las lágrimas con la manga de la camiseta.
- te amo- pronunciamos los dos a la vez, sacandonos una amarga risa. Me miró por unos pocos segundos y se dio media vuelta, para asi ir al avión.
TaeHyung quería retomar los estudios,despues de que el grupo se separara por todo lo que pasó con HoSeok.
Me senté en una silla, sintiendome mareado. Me cogí de la cabeza y lloré ignorando a la gente que pasaba, junto a los que se me quedaban mirando.
No se cuanto tiempo pasó, y tampoco me importaba, pero cuando me levanté y miré la puerta de cristal me di cuenta de que ya era de noche. Salí sacando las llaves de mi moto y me subí a ella, sintiendo los ojos escocidos. Suspiré y arranqué. Estuve manejando por diez minutos, sin dejar de pensar en mi pequeño novio, que se había marchado. ¿Que iba a hacer yo sin él?
Vi la casa en la que vivíamos TaeHyung y yo. Aparqué la moto y caminé pesadamente hacia la puerta, abriendola.
Normalmente,cuando entraba en casa me encontraba a un TaeHyung, que rapidamente venía y me abrazaba, para después hacer la cena mientras yo simplemente me sentaba y lo observaba con una sonrisa. Soliamos hablar de tonterías, y eso me encantaba. Escuchar su risa cuando yo soltaba alguna burrada, o simplemente cuando me quedaba mucho tiempo mirandolo y él se sonrojaba...
Pero lo único que pude encontrar era la luz apagada y silencio. Entré sin ganas y subí las escaleras, sin cenar. No tenía ganas. Entré a la habitación y abrí el armario sacando uno de los pijamas que Tae usaba, colocandolo en su parte de la cama, la derecha. Delicadamente pasé las manos por encima, imaginandome que era TaeHyung y no solo su pijama.
Contraje los labiis aguantando las lágrimas y me puse ropa de chándal, la que yo acostumbraba a dormir.
Fui al baño, me lavé los dientes, me puse crema en la cara y me tumbé en la cama abrazando el pijama de mi mayor, que tenía su dulce aroma y así intenté conciliar el sueño.
Los dias pasaron así. Esos dos años en los que TaeHyung no había estado, mi día era solo: despertarme, trabajar, comer, ir al gimnasio y volver a casa.
En eso se resumieron esos dos años de tortura, solo podiendo ver a mi novio por una pantalla de ordenador.
A pesar de nuestra distancia, y mi tristeza, siempre que lo veía por Skype, llevaba una camiseta de las mias, y siempre intentaba subirme el ánimo.
Hasta que esos dos años pasaron, y el día llegó:
DOS AÑOS DESPUÉS:
Bajé de la moto con una amplia sonrisa, de esas de las que hace tiempo no soltaba.
![](https://img.wattpad.com/cover/57625208-288-k943196.jpg)