Cerrando Ciclos

Primer amor

Dicen que el primer amor nunca se olvida, que siempre vas a sentír algo por esa persona que logró hacerte ver el mundo de otra manera, que siempre habrá un lugar en tu corazón para ella.

Pero no me refiero a la primera persona que nos gustó en escuela primaria, sino a la primera con la que logras conectar perfectamente, que te enamoras de ella y ella de vos. La primera persona a la que le abrís tu corazón completamente sin peros, ni por qué, sin excusas, sin pensar en el "¿Y que tal si?" del futuro.

Y en verdad no crees en esto, hasta que te pasa, no crees en el amor hasta que amas y te aman.

Y ahí te das cuenta de lo hermoso que es el amor y de cuanto desearías que nunca se acabara, desearías ver a esa persona todos los días, hablar con ella, tenerla para siempre con vos. Crees que es un amor perfecto. Porque lo es, el primer amor siempre es perfecto, porque amas sin condiciones, amas sin importar nada.

Ese primer amor que nos toca a todos, ese primer y único amor que siempre estará con nosotros.
Aunque ames a alguien más ahora, siempre vas a querer a ese primer amor, porque fue un amor tan puro y sincero que jamás dejas que se vaya.

Por muchos motivos pudieron ser separados, un tercero involucrado, ya no sentir lo mismo, o simplemente distancia. Sea cual sea la razón es igual de dolorosa y más cuando la separación es abrupta y sin despedidas, cuando tan sólo se va y ya no volvés a saber de ella.
La cosa es que más allá de todo, seguirán con nosotros esas ganas del "por siempre" que nunca fue, y que si pudiéramos encontrarnos otra vez, le daríamos tantas oportunidades de volver a intentarlo como estrellas hay en el cielo.

Y por más que quieras ya no amas de la misma manera, ahí empiezan los miedos, las inseguridades, los peros t
Y por qué, los "¿Y que tal si?" y sobre todo los "ya no es igual que antes".
Y no, no es igual enamorarse por segunda o tercera vez. Nunca será igual que la primera. Porque nuestro corazón nació y murió el día que amamos por primera vez