Capitulo 3

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Capítulo 3:

-Mocosa vete de una vez, viene gente importante y no quiero que te vea.

Anya huyo a su cuarto y al poco tiempo escucho como golpeaban la
puerta, se sentó en el piso contra la pared con la esperanza de
escuchar la conversación de los recién llegados.

-Bradd ya paso un mes y sigues sin darnos el polvo que prometiste.-
Una voz grave desconocida sonó.

-Lo sé pero yo no lo fabrico y no me llego.- Esa fue la asustada voz
de su padre.

-Dijiste que el estúpido de tu proveedor era confiable.-Esta era otra
voz con un extraño deje francés.

-Claro que lo es Jean, solo que hubo un problema en las entregas -un
fuerte ruido de vidrios rotos resonó.- Tranquilo Chris, déjame hablar
con Jean si quieres puedes entretenerte con Marie ella está en el
cuarto puedes pasar y estar tranquilo de que va gratis.

Su padre ofreció gratis el cuerpo de su madre para tratar de distraer
unos mafiosos. Unos pasos resonaron por el pasillo, Anya se encogió,
pero el hombre paso de largo su cuarto y al poco tiempo escucho los
fuertes gemidos de su mama.

-Eso me está calentando, trae a otra de tus perras.

-¡Ilsa ven aquí!

Temerosa abrió lentamente la puerta y asomo su cara al pasillo y pudo
ver la cocina, donde un hombre grande con unas leves canas estaba
sentado en una silla y bajo la mesa estaba su hermana realizándole una
mamada, y en frente estaba su padre.

-Bradd esto también es gratis.

-Por supuesto es atención de la casa.

-Bien -soltó un leve gruñido- no tenías otra?

-Si pero esa es inexperta no ofrece tan buenos tratos como esta perrita...

-Ni se te ocurra separarte puta barata -Jean exclamo mientras hundía
su polla aún más hondo en la garganta de su hermana.- ¿Sabes que solo
te daremos dos días para que nos entregues la cocaína?

-¿Dos días? No es suficiente

-No pedí opinión -lo interrumpio.- solo debes hacerlo o terminaras con una bala en el cerebro.

-Puedo ofrecerte otra cosa.

-¿Dijiste que la otra era virgen?

-¿Si pero que tiene que ver?

-Te puedo pagar una suma considerable para romper el coño de la niña.

Mis ojos se abrieron de par en par y me sentí a punto de vomitar.

-¿Y más tiempo para conseguir la droga?

-No, el martes vendré a buscar a la virgen le conviene estar bien
limpia y a ti tener él encargue listo.- El hombre se puso de pie
apartando a Ilsa.- ¡Ya nos vamos Chris!

Tenía que idear un plan para escapar en los próximos días, huir,
evitar ser violada, utilizada como puta.

LeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora