¿Por qué dios?
¿Por qué a ella?
¡Era una niña solamente!
Aún no me cabe la idea
que se haya ido así,
tan rápido y bruscamente.Aún recuerdo su tierna risa,
cuando hablaba y me decía:
"Hermanita, ven a jugar"
Llegaba de trabajar muy cansada,
así que con furia le contestaba.¿Qué culpa tenía ella de los problemas míos?
Por eso te pido hoy dios mío,
que me regreses a mi hermanita,
tan sólo un momento,
por ella es mi llanto,
también mis lamentos.¡Dejame abrazarla!
poder jugar con ella,
como tanto me pedía,
cuando ella aún vivía.
Cumple ese deseo,
que pide mi corazón,
con tanto anhelo.Prometo ser mejor...
Seré mejor persona.
Seré buena con los vecinos,
que aún son niños,
como lo era mi hermanita.¡Por favor dios!
Concede ese deseo,
de ver de nuevo a mi hermana,
decirle que la extraño y la quiero,
abrazarla nuevamente,
aunque sea una vez más...
Aunque fuese la última.