No tiene sentido decir que no te vayas,
porque ya te has ido,
ya no estás
y tampoco estarás.
Pero, joder, aún no me puedo creer lo que me has hecho, joder no puedo hacerlo.
No puedo aceptar haber sido la tonta de turno que se creyó todas tus putas mentiras,
la que hubiese pensado haber perdido su virginidad con un chaval que la quiere y la respeta,
que estaría para ella cuando nadie estuviese,
la manta en un enero friolento,
el paraguas en un día de lluvia.
Pero joder no me puedo creer esto.
Que sacase esto de mi,
esta parte que solo me sacaron una vez
y fue la vez que quizá me enamore.
Que joder,
podría haber llegado a darlo todo por ti,
a replantearme cosas de mi vida,
a empezar cosas nuevas ,
y volver a las cosas buenas del pasado,
recorrer museos
y ver luces
y estrellas brillando cuando el sol desaparece.
Joder, pensé que podría haber funcionado.
Que hubiese salido tan bien,
que nos hubiésemos querido y destrozado al acabar,
si hubiese habido final.
