Iván

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Después de caminar un rato, todavía sin ideas claras de lo que está pasando y lo que pienso hacer, encuentro a una chica rubia y pálida con los pies en un lago. Lleva ropa blanca como yo y se ve perdida. ¿Deberia acercarme o alejarme? En mis experiencias en juegos de guerra, se muy bien que no debo arriesgarme, pero cómo soy un idiota piso una rama y ella lo escucha. Por suerte, me corro a tiempo para esconderme detrás de un árbol. Mejor prevenir que lamentar.

Se que sigue mirando a donde yo estaba, pero no se si me vio. Hay un silencio parecido a cuando jugaba a mis videojuegos y se cortaba la electricidad diaria.

Más silencio, lo odio. El silencio me recuerda el día que creí haber muerto, cuando entraron a mi casa unos militares y mis padres me dijeron que me quedara en mi habitación y me prometieron que todo estaria bien. Sabía que era una promesa vacía, pero igualmente me la creí. Estuve casi una hora esperando, en silencio, hasta que escuche los dos disparos y los pasos por la escalera. Sabía lo que venía y por eso lloraba. No me sorprendió el militar que abrió la puerta y me apuntó con su arma. No podía hacer nada, estaba acorralado, así que no opuse resistencia y dejé que la bala entrará en mi pecho.

No aguanto más. No pienso volver a esconderme.

Salgo de atrás del árbol y miró a la chica que me mira confundida.

Ninguno de los dos apartamos la mirada ni decimos algo. Me mira tan profundamente que siento que me taladra con los ojos.

-Hola-digo, en algún momento alguno tenía que hablar-Soy Iván.

Tarda un rato en responder, como si estuviera decidiendo si era seguro o no.

-Amber-tiene un todo de voz suave pero se nota preocupada.

-¿Dónde estamos?

-Definitivamente, no en la Tierra- lo dice muy segura y a la vez con temor.

¿Cómo que no estamos en la Tierra, sino dónde estaríamos? No puede ser que no estemos en la Tierra, simplemente no tiene sentido ni para mí que toda mi vida estuve jugando videojuegos sobre el fin del mundo.

Habrá notado mi cara de confusión porque toma aire y dice:

-Mira, si estuviéramos en la Tierra cómo explicarías que el aire no esté contaminado, cómo explicarías que el agua sea cristalina, como explicarías que el Sol sea rojo y más grande, cómo...

-Bien, ya entendí- la corto- pero ¿cómo llegamos a este otro planeta?- no creo realmente que estemos en otro planeta, pero es mejor creer eso que haceme más preguntas.

Baja la mirada, obviamente no lo sabe.

Empiezo a rodear el lago para acercarme a ella. El lago es muy pequeño, así que no tardó mucho en llegar al otro lado. Cuando llego a ella me siento a su lado.

Tierra 2.0Donde viven las historias. Descúbrelo ahora