Katherine 2.
***Narra Abby***
- Katherine. – Dije, saliendo al balcón, manteniendo mi voz neutra - ¿Qué quieres? –
- Querida Abby. – Dijo burlona. - ¿Esa es la manera de saludar al primer amor de tu hombre? – Me sonrió.
No sé cómo no dudar en que pudiese ser Elena y no Katherine.
Sus rasgos son similares, ciertamente, pero los de Elena son más firmes, su cabello más castaño, y sus ojos de un marrón más profundo.
Katherine parecía más desamparada y frágil al estilo de su época, Elena más muscular y fuerte.
Y en su tiempo, el amor junto a la calidez que se veían en los ojos de Elena, no era nada comparado con la malicia que contenía Katherine.
- ¿Marcel te envió? – Pregunté, ignorando su comentario.
- ¿Dónde está Stefan? – Preguntó, jugando al mismo juego.
Inclinó su cabeza coquetamente.
– Ambos hermanos se llevaban tan bien la última vez que los vi. ¿Ya hay problemas en el paraíso? – No respondí y mi sonrisa creció. - Damon debería haber aceptado mi oferta. Habría sido más feliz conmigo. – Afirmó Katherine, orgullosa. –
Me encogí de hombros, negando a que las palabras de Katherine me afectaran.
- Damon ya no te ama, Katherine. – Señalé rencorosa. – No eras a la que quería. –
- Oh, sí, Elena. – Se acercó más hacia mí y movió sus dedos por su brazo, mirándome a través de sus pestañas. –
- Déjanos en paz. – Espeté. –
- Ya no estoy enfadada con Elena. – Dijo en voz baja. – Tuvo mucho tiempo para pensar. Después de que me matara. Ahora... hay otra persona a la que me gustaría ver sufrir. – Articuló. –
¿Lo dirá por mí?
Si es así, entonces pierde su tiempo.
Damon me ama tanto como yo a él, y jamás hará algo para lastimarnos.
- ¿A quién te refieres? – Pregunté haciéndome la desentendida. Quería oírlo de ella misma. –
- Vamos, Abby... - Caminó por alrededor mío, observando todo a su alrededor. – Sabes a quién me refiero. – Me susurró en el oído. –
Se paró en seco frente a mí, y tomó de mis brazos con fuerza, haciendo que la sangre que recorría mi cuerpo se estancara.
- Eres ese "pequeño obstáculo" entre Damon y yo. – Me miró desafiante. – Además... me debes una, ¿recuerdas? –
Estuvo a punto de golpearme, ya me había resignado. Pero una voz conocida la detiene.
- ¡Suéltala! – Oigo a Damon gritar, y al instante suena un estruendo. Se lanzó sobre ella para alejarla de mí, cayendo al primer piso.
Me asomé por la baranda para asegurarme de que Damon estuviera bien...
- ¡Damon! – Grité preocupada. –
Lo único que se distinguía en la oscuridad, era dos siluetas enfrentándose.
Mi grito se oyó por toda la casa al parecer, ya que Caroline corrió a nuestra habitación para ver que ocurría.
- ¿Qué está pasando? – Preguntó nerviosa y preocupada. –
Pero no hacía más que seguir mirando por el balcón hacia el primer piso. Mi mejor amiga se preocupó y se acercó para ver lo mismo que yo.
Damon y Katherine enfrentándose con las habilidades de ser vampiro. Uno más golpeado que el otro, claro.
- Maldición. – Gruñó mi amiga. –
Voltee para mirarla, pero ya no estaba.
Fue en busca de Stefan para separarlos, supongo.
Decidida, tomé el suficiente aire y bajé las escaleras a velocidad vampírica.
Pero para cuando me acerco a abrir la puerta, Damon estaba intercambiando palabras con Katherine, de lejos.
Stefan la tenía agarrada de ambas manos por la espalda, mientras que mi mejor amiga se acercaba con unas cuerdas y un bote de verbena.
Entiendo, pensé.
Es obvio, la amarrarán y la tendremos como rehén en nuestra casa.
Sí, nuestra.
Al igual que una vez lo hicieron, pero logró escapar por la tentación de que los dos hermanos aún seguían embobados con ella.
Ahora es distinto.
A no ser que... sea el mismo Marcel quién venga a sacarla de esta casa.
¿Qué les pareció?
Sí sé que es un capítulo corto, pero habrán mejores.
¡COMENTEN! Saludos & abrazos a la distancia. <3
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The Secret; Hereje [2] | Damon Salvatore [EN EDICIÓN]
FanfictionAhora que Abby ha despertado, se intensificarán sus emociones, pensamientos y más. Todo ha cambiado para ella en 360°, incluyendo sus nuevas amistades. Klaus sigue haciendo de las suyas en New Orleans, ¿Tendrá a Damon como él quiere par...