Me encontraba camino al colegio como siempre acostumbraba a hacer de lunes a viernes por la mañana, iba con nervios ya que era el primer día de clases, al llegar al colegio me encontré con mis amigos.
Establecemos una charla mientras me llevaban al nuevo salón de clases, era prácticamente lo mismo de todos los años; misma rutina, mismos horarios, mismas personas.
Al pasar de unas semanas mis amigos y yo habíamos visto una chica en el recreo, esa chica era muy linda a simple vista, por lo tanto todos queríamos tener una oportunidad con ella, estábamos cegados. Mi amigo Gabriel consiguió contactar con la amiga de ella, se llamaba Romina, ellos comenzaron una relación amorosa o así se podía decir.Un día viernes a mitad de año, Gabriel estaba con Romina y su amiga "La chica linda", otro amigo que teníamos en común dijo que Gabriel me había llamado. Fui corriendo a donde se encontraba él, pregunté cuál era la razón por la que me llamaba, él no supo responderme ya que nunca me había llamado sólo había sido una pequeña jugada graciosa de mi otro amigo, pero estuvo bien porque Gabriel al no haberme llamado y como no sabía que hacer me presentó a ella y a Romina.
Romina y Gabriel nos dijeron que vayamos a dar una vuelta para conocernos, entonces; accedemos a la vuelta, había encontrado varias cosas en común, fue lindo haber encontrado a alguien con los mismos gustos que yo, especialmente si era ella, ¡la chica más linda tenía varios gustos en común conmigo! No podía creerlo, ese mismo día había conseguido su número.
Luego de salir del colegio comenzamos a enviarnos mensajes.
Había logrado comenzar una relación con ella, me sentía feliz pero no puedes amar cuando eres demasiado joven o al menos eso te hacen creer.
Pasaron los días y todo era muy aburrido, las clases y mis amigos. Con la chica más hermosa que ahora era mi novia, teniamos acostumbrado a vernos en los recreos y besarnos a escondidas para que no nos retaran, todos los días era lo mismo, ya estaba empezando a perder el significado de la relación, además ella no era la persona ideal con la que me hubiera apetecido continuar ese supuesto amor.
Su ex se había enterado que ella estaba conmigo, el estaba furioso, quería golpearme. Todos los días me iba con cuidado a mi casa al salir de la escuela, cuando llegaba del colegio me arrojaban piedras, por suerte ninguna llegó a golpearme, esos días me decían; "Juan te quiere golpear" sin dudas esos comentarios ya comenzaban a desesperarme, lo peor de todo es que era una chica que no quería ni ya no sentía nada por ella.
Un día salí con Gabriel del colegio (A el también le querían pegar porque Romina había estado con otro chico y le había pasado lo mismo que a mí).
Fuimos al parque que estaba a unas cuadras del colegio, estabamos con unos amigos que decían que si eran muchos nos iban a defender aunque yo sinceramente estaba decidido a enfrentar a su ex si me intentaba golpear pero desgraciadamente nunca andaba solo, siempre estaba con el ex de Romina, estaba todo bien hasta que comenzaron a tirarnos piedras, el hermano de Gabriel comenzó a enojarse se lo podía notar, además que a todos nos lo decía.
De repente llega el que quería golpear a Gabriel.-Me dijeron que andas hablando mal de mí.- En su mirada sólo se podía notar que quería problemas.
-No, yo no dije nada, ni siquiera te conozco.-Dijo Gabriel.
Gabriel recibió un puñetazo en el ojo, todos se juntaron, yo estaba muy nervioso porque en cualquier momento podría pasarme a mí lo mismo que a el y serían dos contra mí.
El hermano de Gabriel se acercó y lo espantó diciendo-¿Qué te pasa con Gabriel? ¿¡Qué te pasa con mi hermano!? Si te acercas; vas a ver lo que te va a pasar, estúpido. Mientras se quitaba la mochila.
El ex de Romina tuvo miedo así que comenzó a correr con temor al hermano, sí que me pareció patético, porque vienes a buscar pelea y cuando la encuentras te vas así sin más.
Volví a mi casa, por alguna razón ellos sabían donde se encontraba, comencé a sentir ruidos en el techo, eran las piedras que ellos arrojaban, sólo traté de ignorar esos ruidos y me acosté a dormir.
Estabamos en unos días de que no hacíamos nada en el colegio, ella estaba distante, no respondía los mensajes, no me hablaba.
Pude preguntarle si le pasaba algo si quería continuar la relación, en la tarde estuve preguntándole con una amiga, gracias a esa amiga pude ver lo que pasaba y era que ya no quería continuar la relación.
A mí no me importó, así que seguí con mi vida como si no hubiera pasado nada.
Durante un año no pasó nada más que fuera interesante, sólo iba al colegio y llegaba a mi casa, lamentablemente siempre era con el temor de que me agarraran los dos estando desprevenido, pero un día que llegué a la escuela vi a otra chica...era perfecta.
A la salida del colegio la hablé ella tenía una mochila de un anime que me gustaba, ella se llamaba "Shirley" era muy linda, su pelo, sus ojos, sus labios, su nariz, su carisma, su personalidad, era muy graciosa, muy agradable.
Definitivamente era perfecta para mí, anteriormente no sabía que era lo que quería pero ese día me di cuenta y era a ella.
Ese día a la tarde encontré su Facebook y comencé a enviarle mensajes, ella no mostraba interés en mí, cuando me respondía, yo la trataba de la mejor forma posible, me sentía bien hablando con ella, en mi cabeza me había hecho toda una historia, como todos acostumbramos a hacer cuando tenemos aquellas mariposas en el estomago, cuando iba al colegio no había día que no la miraba, era como mi motivo por el cual era feliz en el colegio, Hasta que pasaron los días y...
ESTÁS LEYENDO
LO QUE OCULTA UN ADOLESCENTE. (UN CAPITULO POR SEMANA)
Cerita PendekUn adolescente y una vida por vivir, puedes llegar a identificarte con el o algunas situaciones que vivió, viajaras por una vida con falta de afecto, amor, tristeza y por fin felicidad, o tal vez no, averigualo.