Dear Kitten's

❁ Capítulo 18 ❁

"¿Segura que tienes que ir?" pregunta Harry acariciando levemente mi cintura.

"Sí, todos los años lo hacemos, es tradición"

"Bueno, cuídate mucho y no trates de coquetar con ningún chico, no bebas ni tomes sustancias ilícitas" gruñe Harry besando mis labios rápidamente.

"Lo se, papi" sonrío y me separo de el "Hasta luego, papi"

"No nena, me dejarás tres días sin verte, aunque sea tengamos un polvo" gruñe restregándome su dura erección.

"Pero solo uno" digo dirigiendo mis labios hacía su cuello.

Doy unos cortos pero húmedos besos en su cuello dando una que otra lamida, voy desabrochando su camisa lentamente tocando sus abdominales para luego dirigir mis besos a sus pectorales donde dejé una pequeña marca entre la mariposa y las golondrinas. Subí mis besos hasta sus labios y quité mi camisa para luego desabrochar mi sujetador dejando libres mis pechos ante su atenta mirada.

Lamí mis labios para luego desabrochar el pantalón de Harry y bajarlo lentamente junto con su bóxer, nos encontrábamos en el mueble de su casa, era algo incómodo quitarle las prendas así.

Me levanté de sus piernas y me arrodillé en el suelo para luego bajarle el bóxer y agarrar su erección mientras le daba leves caricias haciéndolo gemir, que sexy se veía con la cabeza hacía atrás ahogando sus gemidos en su brazo el cual mordía en ocasiones.

Sentía su masculinidad palpitando entre mis manos, pronto llegaría al orgasmo así que traté de meter todo en mi boca mientras Harry acariciaba el cabello.

"Trágalo todo" gruñe mientras se quitaba por completo la camisa.

Me volví a sentar en sus piernas mientras el recogía su pantalón para sacar un condón del mismo.

"Debería comprarte pastillas, no quiero que a la hora de follar haya algo entre nosotros" gruñe colocándose el condón para entrar completamente en mi, mierda que bien se siente.

Colocó sus manos en mis caderas instando a que me mueva arriba de él para luego bajarlas hacía mi trasero y ayudarme con mis movimientos, sentía como mis paredes se contarían alrededor de su masculinidad mientras colocaba mi cara en su cuello ahogando mis gemidos ahí, maldición. No pasaron mas de 15 segundos para gemir un dulce "papi" indicando que ya había llegado al orgasmo, después de unos segundos Harry llegó y se levantó del sillón para luego botar el condón y dirigirse nuevamente hacía mi.

Recosté mi cabeza en su torso respirando agitadamente mientras el acariciaba levemente mi espalda, pasaron 2 horas mientras hablaba con Harry sobre lo que haría en mi pequeño viaje a Liverpool con Nathan el cual hacíamos cada año. Mañana iríamos a Liverpool luego de que yo salga de la escuela, se supone que el me haría a buscar.

Estoy muy emocionada, sin duda la pasaré muy bien con Nathan, ya eran las 6 de la tarde y pronto mi mamá llegaría así que me coloqué mi ropa rápidamente y salí de casa de Harry sin antes darle un gran beso.
Al entrar todavía mamá no había llegado y yo necesitaba empacar mis cosas para mañana, metí unos cuantos shorts, crop tops, vestidos de fiesta y trajes de baño ya que donde más siempre la pasábamos era en la playa.

Metí unos tacones, sandalias y por último mi maquillaje, dejé la pequeña maleta a un lado de la cama y me coloqué la pijama para acostarme en la cama y enviarle unos cuentos mensajes a Harry para quedar profundamente dormida.

Gruñí al escuchar la molesta alarma la cual indicaba que me tenía que despertar para la escuela así que fui rápidamente hacía la ducha y me di un corto baño, al colocarme mi uniforme bajé junto con mi bolso de la escuela a la cocina donde mamá me había dejado el desayuno, subí a la habitación de mamá y cuando vi a papá colocándose su corbata me acerqué a el y lo abracé, se supone que al salir de la escuela me iba con Nathan, no iba a ver a papá ni a mamá hasta el domingo.

Papá se despidió de mi dándome un corto beso en la frente y mamá me abrazó dándome mil libras para todo el fin de semana, seguro le dio también mil a Nathan. Yo hubiese sido feliz con solo quinientas libras pero si mamá me da mil, no es que me queje.

Cuando salí y guardé el dinero en mi bolso fui a donde estaba Harry el cual se encontraba en su auto mientras leía algo en su celular, al abrir la puerta rápidamente guardó su celular y acercó sus labios a los míos besandome con ansias, incorporando su lengua a mitad del beso mientras bajaba sus besos por mi cuello.

"Deberíamos ir a la escuela" murmuro entrando en un éxtasis embriagador.

"Sí" murmura alejándose para encender el auto y arrancar hacía la escuela.

Al llegar me despedí con un largo beso debido a que iba un poco tarde y no podía quedarme más tiempo para luego bajar del auto y entrar a la institución.

Teníamos dibujo técnico, una de las tantas materia que odio ¿Por qué si no quiero estudiar arquitectura ni nada por el estilo tengo que pasar por esta aburrida y molesta materia? Ugh, no entiendo. Saqué mis audífonos en medio de clase debido a que me estaba quedando dormida porque estuve hablando con Harry por teléfono toda la noche y con suerte había dormido 4 o 5 horas, coloqué over and over again debido a que había agarrado una obsesión con dicha canción para cantarla levemente. Escuchando música la clase pasó un poco más rápido, para salir a química, otra materia que odio ¿Por qué nos obligan a estudiar materias que realmente no queremos estudiar? Seria feliz si solo me dieran historia del arte, latín, dibujo artístico, filosofía, psicología, ugh, pero no, tengo que estudiar física, química, matemáticas, cosas que no me gustan para nada.

El día paso rápido, las materias que me tocaban los viernes no eran tan molestas como otros días, al salir vi a Abby en los brazos de Nate mientras el último le daba cortos besos haciéndola sonreír.

"Prometeme que no hablarás, no jugarás billar, no bailarás con ninguna mujer" dice mi amiga mirándolo acusadoramente.

"Lo prometo, nena" dice mi hermano besando sus labios.

"Hola" digo acercándome un poco más a ellos para besar la mejilla de mi hermano.

"Cuando vayas a la playa no verás a mujeres del cuello para abajo, dudo que consigas a alguien más linda y tierna que yo" dice Abby besando sus labios, ellos aveces pueden ser un poco molestos.

"Amor, tu eres la persona más bella y más perfecta del mundo, jamás podré fijarme en alguien que no seas tu" mi hermano vuelve a dar un corto beso en los labios de mi amiga y ruedo los ojos al notar que mi hermano me esta mirando "malos ojos es amor" dice dedicándome una corta sonrisa haciéndome rodar nuevamente los ojos.

"Bueno, creo que ya mis padres están por llegar" dice Abby. "Chao amor, te amo" susurra Abby muy cerca de sus labios para darle otro beso ya un poco más largo. Ugh, deberían quitarse de la puerta del copiloto para yo que yo entrara.

"Yo te amo más" dice mi hermano dándole otro corto beso para abrazarla separándose un poco de ella.

"Hasta luego, Sky" mi amiga se acerca a mi para abrazarme pero tapo mi nariz al oler el fuerte olor de mi hermano en su ropa, seguro estuvieron un gran tiempo ahí.

"Hueles a Nate, deberías echarte de mi perfume" digo buscando mi perfume en algún lugar de mi bolso "Toma" se lo extiendo al ya tenerlo en la mano para que ella se lo echara.

Sus padres ya han aceptado un poco el hecho de que ella está saliendo con Nathan pero se lo tenían que tomar un poco con calma, si ella llegaba oliendo a Nathan a su casa seguro un gran regaño la esperaba. No puedo creer como sus padres pueden ser tan sobreprotectores con ella.

Mi hermano es un buen chico, el problema es que él tenía como un fetiche o que se yo con tatuarse el brazo y lo hizo, cosa que a los padres de Abby no les gustó para nada, no por tener tatuajes eres delincuente o estas mal visto ante la sociedad, para mi, los tatuajes realmente eran sexys en un hombre, tenemos como ejemplo a Harry. Con su sonrisa se un millón de dólares y sus tatuajes que cada vez un los veía podía morir lentamente, él realmente es caliente.

Cuando entré al auto me cambié de ropa rápidamente y coloqué mi cinturón de seguridad, Nathan arrancó hacía Liverpool con una gran sonrisa, un gran viaje lleno de aventuras nos espera.