❁ Capítulo 5 ❁

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14 de Noviembre del 2015

Querida kitten, siento que cada vez te agarro más cariño, eres hermosa sin duda alguna. Tengo fotos tuyas en mi celular pero jamás había tenido en mis manos una foto tuya tomada por ti misma de tus hermosos y perfectos dientes, tus hermosos ojos azules y ni hablar de tus largas y hermosas pestañas, solo te imagino de rodillas con mi gran erección en tu boca mientras miras hacia arriba con esa cara de viciosa que tienes. Pronto serás completamente mía.

-tu papi, Sr. Styles.

Suspiré pesadamente luego de salir de mi casa para caminar por las grandes calles de mi vecindario ubicado en Holmes Chapel. Caminé lentamente a la escuela sumergida en mis pensamientos hasta que un auto se coloca a mi lado, la persona que se encontraba adentro bajó la ventana del copiloto y me pude dar cuenta de quién era y suspiré levemente, oh.

-¿Quieres que te lleve?- preguntó Harry dedicándome una corta sonrisa de lado.

-No me vendría mal.- abrí lentamente la puerta y entré al auto un poco intimidada por su mirada.

Arrancó el auto y colocó su mano izquierda en mi muslo sorprendiéndome un poco. Al ver mi reacción me dirige una corta mirada y vuelve a ver el camino.

Llevaba unos pantalones de pijama y la misma camisa blanca de ayer, se veía realmente caliente. Sus rizos estaban despeinados viéndose algo tierno. Desvié mi vista nuevamente hacia su pantalón y me sorprendí al ver el bulto sobresaliente en su pantalón. Si luce así en estado normal no me quiero imaginar cuando esté feliz. Llegamos a mi escuela y detuvo el auto a un lado de la entrada del colegio. Volvió a dirigir su mirada a mi y sonrió.

-Bueno, llegamos a su destino, señorita.- dice ampliando un poco más su sonrisa.

-Muchas gracias, Harry-. Murmuré un poco avergonzada no se porqué.

-Ayer te repetí varias veces que me llamaras papi ¿no entiendes?- preguntó con un poco de enfado en su voz.

-Yo- Disculpa... Papi.- aparté mi mirada de él ya bajé rápidamente.

Colocó su dedo índice en mi mentón y levantó mi cara levemente. Mierda estamos a menos de 8 cm de distancia. Él sin pensarlo dos veces acercó sus labios a los míos y los pegó rápidamente. Él movía sus labios duramente y los movía tan rápido que me costaba un poco seguir el ritmo. Colocó sus manos en mi cintura y éstas empezaron a bajar lentamente hacia mi trasero para luego apretarlo robando un gemido de mi parte. Me levanté un poco más en el asiento debido a que la posición en la que estaba era un poco incómoda para los dos pero no quería romper el beso, no quería que esto terminara, mi acción le dio la facilidad de sentarme en sus piernas y seguir el beso. Coloqué mis manos en su nuca y acariciaba levemente su cabello, era demasiado suave y sedoso. Mordió levemente mi labio inferior para luego separarse un poco y sonreír mientras miraba mis labios los cuales seguramente deben estar rojos e hinchados.

-Siempre quise besar tus labios, Kitten-. Murmuró dándome un corto beso en los labios.- pero jamás me imaginé que besabas tan bien.

-Creo que debería irme.- agarré mi bolso escolar rápidamente para abrir la puerta del piloto y bajar rápidamente.

-¿No te vas a despedir de papi?- preguntó mientras bajaba el vidrio del auto.

-¿No fue suficiente con el beso que me acabas de dar?- pregunté sonriendo pícaramente.

-Otro nunca está de más.- me acerqué un poco más a su carro y le di un corto beso en los labios.

Mierda, creo que está mal que bese a mi vecino de 26 años cuando él me hace el favor de traerme la escuela. Qué tonta soy.

-Ahora sí deberías irte-. termina el encendiendo el carro nuevamente-. Nos vemos a las 3, nena.

Arrancó rápidamente para luego dejarme como una tonta ahí en la entrada de la escuela pensando en él. Jamás me había imaginado besar a un hombre mucho mayor que y menos si ese hombre es extremadamente caliente y como era de esperarse mi vecino. En la entrada se encontraban mis amigas esperándome, eso era como una ley, todas tenemos que esperarnos para entrar a la escuela. Las 4 lo hacemos desde hace mucho y eso nunca va a cambiar.

Fuimos al salón de química y esperamos a que la profesora entrara. No estuve muy al pendiente de la clase, mi mente solo estaba en Harry y el beso de hoy en el auto.

Sin duda jamás había pensado que iba a besar a un chico al segundo día que lo conocía pero Harry era distinto, Harry no es como los otros.

Al sonar el timbre fuimos al comedor debido a que teníamos literatura pero nuevamente la profesora no había venido. Mis amigas empezaron a charlar entre sí pero yo no estaba muy al pendiente de la conversación. Yo estaba en otro mundo.

-¿Qué te pasa?- me preguntó Kate sacándome de mis pensamientos.

-Disculpen chicas pero no les he contado.- dije un poco apenada debido a que el código de amigas decía que cada vez que pasaba algo interesante en nuestra vida amorosa o sexual teníamos que decirlo rápidamente.- Hay un chico que conocí ayer, es mi nuevo vecino-. Murmuré un poco sonrojada.

-¿Entonces?- preguntó Samantha esperando una respuesta más concreta de mi parte.

-No es precisamente un chico, es un hombre, tiene 26. Ayer estaba caminado y no se como me tropecé el salió de su casa sin camisa con tan sólo unos pantalones de pijama para ver que me pasaba, su torso estaba algo marcado y era muy duro tenía tatuajes, realmente no se como explicar lo que sentí al verlo, el realmente es caliente y tiene un aura de superioridad y de sensualidad que realmente no se como explicarlo.- suspiré e hice una pausa debido a que estaba hablando algo rápido y proseguí-. Estaba en mi habitación y subió por la ventana a mi habitación, me ayudó con la tarea de biología e inclusive quedamos hoy para que me ayudara con eso, lo más interesante de la historia es que venía caminando a la escuela y me preguntó si quería una ayuda, le dije que si y nos besamos-. Sonreí colocando mis manos en la mesa del comedor y mis amigas quedaron boquiabiertas.

-Espera, es mucha información que procesar-. Esta vez hablo Abby.

-También me dijo que le enviara una foto, lo hice y me respondió con un "nena eres muy caliente"

Lógicamente tenía que obviar la parte en la cual el me decía que lo tenía que llamar papi, sería muy extraño que ellas se enteraran de eso.

-Bueno amiga, con lo que me diste sin duda te ganaste la lotería, con tan sólo saber que te ayuda en biología me da de entender que es un gran hombre, no lo dejes ir, amiga.- dice Kate sacándome una sonora carcajada.

Dear Kitten'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora