Dear Kitten's

❁ Capítulo 47 ❁

Al salir de casa de Abby, ella empezó a llorar y así fue hasta que llegamos a mi casa. Admito que si a mí me dijeran que me fuese de la casa estuviese llorando tres siglos.

Al entrar mamá al verla la abrazó mientras papá acariciaba su espalda, ella trató de tranquilizarse y luego, le devolvió el abrazo a mi mamá.

Me di cuenta que no pintaba nada ahí, así que subí rápidamente a mi habitación. Harry estaba ahí hablando por teléfono mientras bufaba repetidas veces y alzaba la voz.

"Escúchame perra, Seth y Dylan son míos, no me importa que hayan pasado 9 meses dentro de ti y que hayan salido de tu asquerosa vagina, yo los he cuidado muchísimo más que tú y no dudaría que los amo más que tú así que mañana te veo en la corte, cancela tu viaje a Francia" él hace una pausa y luego sigue "Maldita sea Melody, ¿puedes escucharme? Mañana voy a ver en la corte, si no vas igual van a ser míos"

Harry luego de unos segundos colgó el celular y se sentó en la cama.

"Hola" sonrío levemente y él por primera vez dirige su mirada a mi.

"Hola" me devuelve la sonrisa. "Al salir de mi casa vi a tu padre, jamás hemos entablado una buena conversación; pero hoy estuvo apunto de darme un golpe" dice y suelto una fuerte carcajada.

"Fue porque le dije que estaba embarazada, dijo que eras un pedofilo de mierda, me dio mucha risa"

"¿Qué? ¿Estás embarazada?" Su voz se medio corta al decir esas palabras.

"Sí, yo no lo quería, pero se me olvidó tomar la píldora cuando me quedé en casa de Colton y Dios, jamás me lo esperé" sollozos empiezan a salir para luego empezar a salir lágrimas.

"Yo-y no sé si yo-" El nerviosismo de Harry se hace presente y empiezo a notar cómo sus ojos cambiaban de color, ya no era el verde hermoso que me encantaba vez, esta vez eran negros.

Su respiración empezó acelerar y sus manos las abría y las cerraba rápidamente como acto de ansiedad. Mierda.

Era increíble como toda su pupila estaba dilatada, no había un rastro del color de sus ojos.

"¡Mierda! ¿Qué pasa contigo? Tú solo tienes que tomar una maldita pastilla, no tienes que hacer nada, en la cama yo soy él que se mueve, yo soy él que todo, tú solo ganas placer y te tomas un simple pastilla que por cierto, yo pago" habla rápidamente caminando de un lado a otro asustándome un poco.

Sus manos no pararon de cerrarse y de abrirse en ningún momento.

"Cállate por Dios, es solo una broma"

Él al escuchar mi voz se para y se coloca justo al frente de mí y respira pesadamente robándome el aire. Siento su mano impactar en mi mejilla, con dolor rápidamente coloco mi mano ahí tratando de calmar el dolor.

"¡¿Qué mierda te pasa?!" Exclamo tratando de aguantar las lágrimas que pronto saldrían por mis ojos.

"No debes bromear con eso"

"Idiota" murmuro dándome una vuelta.

Siento como él agarra mis caderas y me lleva a la cama para tirarme bruscamente mientras retiraba mi suéter y rasgaba mi camisa. Me sentía mal, mi cabeza dolía y sin duda mi mejilla también, negaba y movía mis piernas impidiendo que Harry sacara mis pantalones pero fue imposible.

Me coloqué en posición fetal mientras él se sacaba su ropa, en un momento él relajó todo su cuerpo mirándome mientras yo me arrastraba poco a poco hacía la cabecera de la cama. Él al ver mi cara de miedo, lentamente se acercó a mí y acarició mi mejilla.

"Mierda nena, lo siento" dice rápidamente colocándose de rodillas en la orilla de la cama.

Él sabía que no lo quería cerca.

Limpio mis lágrimas rápidamente al mismo tiempo que agarraba mi camisa y me la ponía, ese tipo de cosas eran las que me habían dudar de él.

"Yo-y no sé, no deberías jugar con esas cosas" tartamudeaba al mismo tiempo que pasaba sus manos por su cabello despeinándolo.

"Tranquilo, no lo volveré hacer"

Siento su cuerpo recostarse en la cama para luego lentamente pasar sus brazos por mis caderas acercándome a él. Quizás haya tenido alguna reacción o algún síntoma de ansiedad por su condición psicológica, no lo sé. La inteligencia no es mi fuerte.

Recosté mi cabeza en su pecho y cerré los ojos lentamente, hoy había sido un día duro.

Al despertar Harry no estaba ahí, yo seguía en ropa interior. Me coloqué un suéter que hace mucho había dejado Harry el cual me llegaba más o menos por los muslos. Al bajar a la cocina por algo de comida, como siempre mamá había dejado un poco de efectivo para compráramos algo de comer.

Saqué una manzana del refrigerador junto con una barra de chocolate y fresas; y fui al sofá a ver que cosas habían en la TV.

Abby capaz sigue durmiendo, ella duerme mucho; me imagino que ahora que está embarazada duerme más. Mis ganas de despertar a Abby y a Nathan no eran normales, así que corrí por las escaleras y al entrar a mi habitación conecté mi celular a unas cornetas las cuales puse a máximo volumen y rápidamente fui a la habitación de mi hermano donde estaban durmiendo los dos.

Coloqué she bad de Cameron Dallas y me subí a la cama cantando a todo pulmón. Mientras ellos gemían debido al fastidio que les estaba causando. Nathan lanzó su almohada hacía mi pero logré esquivarla, la segunda vez fue punto de Nathan porque yo me encontraba en el piso con una mano en la cabeza.

Abby empezó a reír y yo traté de calmarme porque el golpe había sido muy fuerte. Mi vista se nubló un poco pero lo ignoré así que me levanté rápidamente y me costé junto con ellos en la cama.

"Creo que fue mala idea" murmuro colocándome la mano en la cabeza mientras reía levemente.

"Sí, yo lo creo" habla mi amiga y fijo mi vista en mi mano la cual estaba húmeda por un líquido espeso color rojo.

Abby y Nathan se miran rápidamente mientras yo ya tenía la vista un poco más nublada. Traté de levantarme de la cama pero fue imposible debido a que ya me encontraba en el suelo.