Una vez en casa de Sandra se pobrarón todos los vestidos que compraron. Entre ropa y carcajadas a Anna la tarde se le paso muy rápido, sin darse cuenta ya eran las 9 y media y aun que quería quedarse, tenía que volver a casa.
-Sandra... Gracias por esta tarde, necesitaba salir un rato de casa. Siento haber aguado tu tarde con Lucas...
-No, no. -Interrumpió.- Mi tarde ha sido perfecta. ¡Una tarde de compras con tu mejor amiga no lo supera nada! Lucas mañana me verá y se lo compensaré. -Dijo con una pícara sonrisa.
La morena salta sobre su amiga y le abraza agradeciendo su pequeño discurso. Le quiere muchísimo y agradece todo lo que hace por ella. Recoge su bolso y su móvil.
-Nena ¿Ya te vas?
-No sé si mi padre aparecerá por casa. Prefiero que ni aparezca...- Dijo suspirando.- Pero debo marcharme es tarde y tu madre estará al llegar.
-Le puedo decir que te quedes....- Sandra dió un puñetazo al sofá.- Joder los siento... Mañana esta aquí la manada y por la mañana quiero...
-Ir a ver a Lucas. -Interrumpió Anna.- No pasa nada, me voy a casa. Te quiero.
-¿Me perdonarás?...-Dijo con los ojos húmedos.
-No seas boba "pelirrosa" Ven y no me llores.
-Te quiero... Y la próxima vez las mechas californianas me las haré rubia que pelirrosa es raro. Prefiero que me digas rubia.
-Te quedan perfecta tonta. Eres preciosa con todo lo que te pongas. Anda dame un abrazo, me voy a casa. -Las dos amigas se quedan 30 segundos abrazadas y después Anna sale de casa de su amiga.
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Cierra los ojos y cuenta hasta tres.
Teen FictionAnna es una chica con una vida no deseable. Vive bajo el dolor de haber perdido a su madre, quedando a cuidados de su padre quien la trata con desprecio. En el amor tampoco ha tenido una buena racha desde que su exnovio, Daniel, se fue a Estados Uni...