A golpes e insultos llegan a casa. Ella con la cabeza gacha, con un par más de moratones de los que tenía antes. Él con su puro entre los dientes se sienta en su sillón. Anna decide irse a la ducha, aun que teme que a él no le guste el plan. Va a su cuarto, coge la ropa interior y un pijamas tan ancho que solo la camiseta le podría servir de camisón pero decide coger unos short de deporte para sentirse más cómoda. (Sí, ella era así. Con un vestido o camisón no se sentía tan cómoda como con una camiseta y unos shorts.)
-Voy a... a la ducha. No tardo ni cinco minutos lo prometo.
-Estas asquerosa, te vendrá bien. Cómo tardes más de la hora puesta, te "Premiaré".
"Premiarme es dejarme sin respiración como antes, ¿No capullo?"-Piensa pero no es capaz de pronunciar una palabra más. Se pone la alarma para no pasarse de la hora acordada y se ducha lo más rápido que puede. Al lavarse ve cómo su cuerpo esta lleno de heridas. Las marcas de las manos de aquel hombre siguen sobre su cuello y su brazo. Sus piernas estan rodeadas de moratones y varias rajas. Y la tripa esta llena de cortes. Cortes hechos por él y cortes más profundos por ella. Así se sentía bien, pero ya había parado de hacer aquella "gilipollez" como decía Sandra. Cuando termina de enjuagarse se mira al espejo mientras se revuelve el pelo, sólo tiene ganas de pegarle un puñetazo a algo o crearse un profundo corte donde se situan los demás para así tener menos rabia. Se controla por Sandra. Ella es su base de apoyo, le prometió que jamás volvería a hacer algo así y no podía fallarle. Suena su reloj de las princesas, (el que tenía desde los seis años) donde había puesto la alarma ya que todavía no tenía su móvil. Su corazón empieza a latir rápido tanto que cuando va a apagarlo nota que esta temblando. Respira agitada, todavía no se ha vestido. Se pone solo la parte interior de abajo y la camisa. Le resulta muy incómodo pero tiene que seguir el acuerdo y no retrasarse. Sale del baño sigilosa con el resto de ropa que no se había puesto en las manos. Esta dormido, respira aliviada al verlo así. Corre haciendo el minimo ruido posible y se encierra en la habitación. Cierra los pestillos y esta vez si que se pone toda la ropa. Se echa en la cama y en su portátil pone "My heart's on fire- Passenger." una de sus canciones favoritas. Y deja que pase una por una sus canciones hasta quedarse profundamente dormida.
Despierta asustada, ha tenido una horrible pesadilla en la que creía que no podía volver a despertarse. En ella un hombre de más o menos su edad quizás no muy guapo pero que conseguía hacerla sonreír y tenía un punto que para Anna le hacía muy atractivo, la guiaba hasta un bonito paisaje. Alli empezó a besarla, a ella le gustaba que fuera así hasta que poco a poco iba introduciendo sus manos en su pantalón. Entonces ella se despegó de él.
-¡Eh! Creo que vas demasiado rápido. Quedémonos sólo en los besos, ¿Sí?
-Venga tonta, confía en mi. Déjate llevar. Experimentemos cosas nuevas.
-No, no quiero. No creo que te guste... Mi cuerpo, no me gusta a mi misma. Además solo quiero que estemos juntos pero entre besos. Yo dándote lo poco que me gusta de mi y tú... mostrandome esa parte que me gusta tanto.
-Pero si me encantas. Además es la combinación perfecta, tu piel junto a la mia, besos recorriendote el cuerpo poco a poco; Lentamente. No seas tonta, ven aquí.
-No quiero, déjame.- En cuanto Anna dijo eso el rostro de aquel chico que parecía muy agradable cambió por completo transformandose en un horrible monstruo. Los ojos eran rojos, sus labios estaban llenos de heridas, acompañados por unos dientes más afilados de lo normal con los que podría desgarrarla en apenas unos minutos. Se le quedó mirando.
-Sólo quiero comerte a besos, Anna.-Entonces ella presa del miedo se deja llevar mientras grita y solloza de un modo desgarrador. Él mientras abusa de ella y sonríe. Él recorre a besos su clavícula y muerde pero sin apenas querer hacerle sufrir. Ella entonces grita.
-SÓLO QUERÍA SER FELIZ. LO SIENTO. LO SIENTO. Lo siento. Lo sien..to. lo..sien..- Cae dormida en un profundo sueño del que no puede despertar, llámado muerte.
Al acordarse se le herizan los pelos, ¿Por qué ha tenido ese horroroso sueño? Siente escalofríos y no quiere volver a recordarlo. Enciende el portatil y abre skipe. Escribe intentando tranquilizarse. "Sandra me tienes que ayudar a rescatar el móvil del ascensor. No preguntes, te lo contaré todo después. Ha sido una noche movidita." Suspira, sólo espera la respuesta de su amiga sin querer pensar en nada más. En apenas segundos recibe una respuesta que le sorprende. Se queda leyendo el mensaje varias veces hasta que cierra fuertemente el portátil y sale de la habitación lo más rápido que puede.
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Cierra los ojos y cuenta hasta tres.
Teen FictionAnna es una chica con una vida no deseable. Vive bajo el dolor de haber perdido a su madre, quedando a cuidados de su padre quien la trata con desprecio. En el amor tampoco ha tenido una buena racha desde que su exnovio, Daniel, se fue a Estados Uni...