Capítulo XIII

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~ En el anterior capítulo ~

Mientras _____ estaba tan concentrada en tocar esa melodía tan especial para ella, una chica de ojos violetas caminaba por los pasillos medio soñolienta. Se despertó para buscar un pedazo de carne, algo así como un bocadillo de media noche. Cada vez que daba un paso se acercaba más a la habitación donde la peli(c/c) tocaba. Cuando sus oídos captaron la melodía, abrió los ojos como platos... Esa melodía se le hacía familiar.
A paso lento se acercó a la puerta, la cual se encontraba totalmente abierta, y se quedó estática; escuchando con asombro.

Esa melodía...

Cuando _____ dejo de tocar, Alice salió de su trance y corrió en dirección a su habitación. La oji(c/o) escucho los pasos alejándose con velocidad por lo que enfoco su mirada hacia la puerta.

¿Quién... Estaría despierto a esta horas? —pregunto en un susurro mientras baja el violín y tomaba la pluma.

Narra _____

Abrí mis ojos con lentitud, para acostumbrarme a la luz del día. En cuanto pude ver con claridad note que seguía en la sala de música.
"¿Cuándo me quedé dormida?" pensé. Me levante y recogí todas mis pertenencias con la intención de salir de ahí. Caminé lentamente hacia la puerta, para evitar ser escuchada por alguien, y me dirigí hacia mi habitación. Me cambie la pijama y me puse un vestido algo sencillo pero bonito. En ese momento, escuche a alguien golpear mi puerta.

— ¿Quién?

— Soy Gilbert. Abre por favor ______.

El corazón se me aceleró por el modo en que lo dijo, fue tan suave pero al mismo tiempo demandante. "Dios, este hombre me trae a sus pies" pensé mientras abría la puerta con mano temblorosa. En cuanto abrí completamente la puerta me perdí en su mirada.

— Que se te ofrece, Gilbert —dije disimulando mis nervios con una sonrisa algo forzada a mi parecer.

— Ven conmigo por favor, tengo que hablar de algo contigo —dijo de forma seria, mientras apagaba su cigarrillo.

— Está bien...

Camine tras de él por toda la mansión Rainsworth y en todo el trayecto no cruzamos conversación alguna. Llegamos a las afueras de la mansión donde nos esperaba un carruaje. Me indico que subiera y eso hice, él subió detrás mío; entonces el carruaje comenzó a avanzar. Durante casi la mitad del trayecto nos mantuvimos en silencio, algo incómodo para mí... Tome aire y me dispuse a hablar.

— ¿A dónde vamos?

— A los cuarteles de Pandora. Ahí nos esperan los demás.

No me atreví a preguntar más. Lo que resto del trayecto nos quedamos en un silencio sepulcral.
Llegamos, por fin, a los cuarteles de Pandora. Tenía la esperanza de ver a mi padre por ahí pero no tuve tanta suerte. "No lo veo desde el incidente del teatro" me dije recordando la forma en que me vio, sentí una opresión en el pecho y las lágrimas asomarse por mis ojos. Trate de contener las lágrimas que amenazaban en salir por mis ojos y, afortunadamente, lo logre.

Gilbert se detuvo de repente, logrando que choque con su espalda. No se movía o emitía palabra alguna. Yo estaba extrañada con su comportamiento, no era normal tanta seriedad en él.

— Gilbert... ¿Te encuentras bien?

No hubo respuesta. Intente acercarme a él, pero en un rápido movimiento él me tenía agarrada de los hombros. Su mirada estaba clavada en la mía y sus mejillas estaban coloradas. Me sonroje fuertemente debido a su cercanía. Nos quedamos así unos minutos que, para mí, parecían horas.

Es mejor dejar el pasado y pensar en el futuro [Pandora Hearts]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora