Corazón confuso

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Llegamos a las diez y media aproximadamente pero la cala estaba casi desierta. A lo lejos vimos a los Greene, que al parecer acababan de llegar también, haciendo un gesto indicando que nos acercásemos.

Lo cierto es que no me apetecía pasar otro día con Tom Greene y su familia, puesto que ni siquiera sabía como actuar delante de él. Mi mente estaba confusa, por un lado me gustó lo que ocurrió ayer pero por otro mi corazón no me deja olvidar lo que siento al ver a Danny.

-¡Hola Sandy!- dijo Annie interrumpiendo mis pensamientos.

-Hola Annie, ¿cómo estás? Por cierto que bañador más bonito.

La pequeña sonrió entusiasmada y me explicó que fue un regalo que sus tíos le habían traído de Europa.

Mientras caminábamos hacia donde sus padres se habían acomodado, vi como Tom venía corriendo hacia nosotras.

-¡Eh Sandy!

-Hola Tom- dije de forma escueta, aunque no pude evitar sonreír.

-Deja que te ayude- me contestó de forma inmediata mientras cogía las sillas y la sombrilla.

-No era necesario, pero muchas gracias.

Annie estuvo hablando todo el trayecto sin hacer ni una pequeña pausa para respirar. Yo notaba como Tom me miraba de vez en cuando y se reía disimuladamente. Creo que el también notaba que esta situación era un tanto incómoda.

Afortunadamente Frenchy y su familia no tardó mucho en llegar, y verla me hizo recordar que mi amiga aun desconocía todo lo que había pasado el día anterior.

Todos nos habíamos acomodado ya. La señora Greene le estaba echando la crema a la pequeña Annie por todo el cuerpo, mientras que mi madre y la de Frenchy tomaban en sol y charlaban. Nuestros padres también hablaban pero lo hacían sentados en sus sillas de playa bajo la sombrilla y con un refresco en la mano. Tom y Scott estaban jugando con la pelota en el agua, por lo que aproveché para dar un paseo por la orilla con Frenchy.

-Verás Frenchy..., mientras tu has estado ausente estos últimos días han pasado cosas bastante... inesperadas.

El rostro de mi amiga se iluminó de emoción, y con curiosidad me pidió que me contase todo con detalle.

-¿Te acuerdas que te mencioné que me gustaba un chico de la playa?

-¡Sí! Un moreno muy guapo, ¿no es así?

-Sí, ese mismo. Pues ayer casi me dan con la pelota, y después me invitó a dar un paseo...Y bueno estuvimos hablando.

-¿Y pasó algo más?- me dijo entre risas.

-No, bueno... Eso fue todo lo que ocurrió en la playa... pero ocurrieron otras en la fiesta de los Greene.

-¡Vaya! Me voy unos días y de repente este pueblo se vuelve interesante. Bueno, ¿qué es lo que pasó? ¿Volviste a encontrarte a ese chico?

-No, pero... Tom y yo estábamos bailando, y de repente...

Mi amiga me miró perpleja esperando a que terminase la frase.

-Y me besó... ¡y yo no hice nada para detenerlo! Bueno..., luego me fui y él me siguió.

-¿Le gustas a Tom? Yo de ti tendría cuidado con Yvonne, porque como se entere de lo ocurrido estoy segura de que hará todo lo posible para quitarte de en medio- me advirtió Frenchy con mucha razón, ya que Yvonne nunca se andaba con tonterías.

-Ya... Pero no es mi culpa, ¿qué quieres que yo haga? Frenchy, necesito ayuda... ¡No sé que es lo que quiero!

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⏰ Última actualización: Apr 10, 2016 ⏰

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