Sentí la liberación de un peso sobre mi cuerpo y varias voces que me costaron identificar. Al abrir mis ojos, los dos compañeros de piso del rubio estaban agarrándolo y lo tenían en el suelo sentado. Uno de ellos, el segundo más mayor, se acercó a mí y dio varias cachetadas en mi rostro, como si quisiera que me espabilara. Se veía asustado y nervioso.
— Como le pase algo te corto el pene —dijo el chico que sacudía ahora mi débil cuerpo.
— No le va a pasar nada. Sin embargo, a mi polla sí. ¡Me habéis cortado todo el puto rollo! —el de piel lechosa se levantó, volviendo a ponerse su camiseta.
— ¿Qué hacemos? Si los padres lo ven así nos la cargamos —el castaño es el que más asustado se veía.
— Trae bebidas.
— ¡¿Qué?! ¿Quieres rematarlo? —su aguda voz resonó fuerte en mi oído, quejándome por ello.
— Mejor que parezca borracho que drogado, ¿no? —le dio un toque en el brazo al castaño y rápidamente salió de la habitación— Si le damos unas tres más creo que serán suficientes.
— ¿Suficientes? —se alejó de mí, acercándose al rubio— Si al menos mantuvieras tu pene dentro de los pantalones sería más que suficiente.
— Agh... —sin decir nada se sentó al otro extremo de la cama, alejado de mí.
— No te sientes, ve a darte una ducha o échate agua fría encima —el paliducho enarcó una ceja—. ¿Crees que no sé que también te has drogado?
El otro rodó los ojos y se dejó caer sobre la cama— Ignórame, ¿quieres?
Lo único que hice en todo ese momento fue abrir mi boca, pero no para hablar sino para quedarme embobado ante la conversación tan extraña que tenían estos individuos.
— Toma —el chico que desapareció hace unos minutos, llegó trayendo consigo varias botellas de las que ya tomé antes con el chico abusón.
— Bébetela, JungKook —me pasó una botella mientras abría otra.
— No quiero —contesté, rechazándola.
— Pórtate bien y tómatela, ¿vale? No nos cabrees —volvió a pasármela.
Terminé cogiéndola y bebiendo, nuevamente sintiendo ese dragón en mi estómago que quería salir y arrasar con todo. La segunda me costó bastante beberla, por no decir que la tercera me tomó el doble, o eso creo porque ya no lo recuerdo.
No sé como llegué al mar, pero de pronto mi tripulación y yo nos veíamos luchando contra el Kraken que el dios Poseidón había liberado para derrotarnos. Habíamos hecho enfurecer al señor de los mares, pero no nos íbamos a rendir ante nada, y ahí estábamos, afrontándolo.
— ¡Hombre al agua! —grité, había caído al mar y me había dolido, no sabía que el agua estaba tan dura— ¡Socorro! —volví a gritar, esperando que mi tripulación me salvara.
Intenté nadar, pero era imposible, las aguas eran duras y por más que lo intentaba no avanzaba.
Un ruido proveniente de algún lugar, hizo que detuviera mi nado. Al parecer un nuevo enemigo apareció y mi vida corría más peligro aún.
— ¿JungKook...? —oí una voz, pero no sonaba como un monstruo, ¿qué clase de enemigo es?— ¿Estás bien?
El enemigo se acercó a mí y tras ponerme de pie, me puse en guardia. De pronto no me encontraba en el mar, el agua había desaparecido con mi tripulación. Ahora una selva amazónica me rodeaba y seguro con muchos peligros acechando.
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Sólo Vecinos [JiKook]
FanfictionAburridos, así eran los días de JungKook hasta conocer a un nuevo vecino y que hiciera despertar en él la curiosidad de conocerlo un poco más. ❝Porque cada escalón que subo me hace estar más cerca tuyo❞ • Mención a: NamJin. » Historia Original. » No...