Hasta Que La Muerte Nos Separe [PAUSADA]

Parte 2

Abrí mis ojos como platos y mi cuerpo se paralizó de los nervios cuando la puerta se abrió del todo.

-¿Qué haces aquí?- suspire de alivio. Solo era Harry. Me miraba extrañado sin entender absolutamente nada.

-¿Quién está ahí?- oímos la voz del subdirector y entramos en pánico. Lo tomé del brazo y tiré de él para tratar de escondernos, aunque ya nos había visto. Sus pasos se oían cada vez más cerca. Sin saber qué hacer mirábamos hacia todos lados. Mi mente se iluminó cuando pude ver, detrás de unas cajas, una ventanilla que daba hacia el campo de fútbol americano.

-Por aquí- señale y empezamos a mover todo lo que obstruía el paso. Trate de trepar pero no podía, era demasiado alto.

-Déjame ayudarte- dijo Harry sin perder más tiempo. Me tomó por la cintura y me levantó como si fuera una pluma. Este chico sí que iba al gimnasio. Toqué el césped con mi manos y, haciendo un poco de esfuerzo, logré salir. Le tendí mi brazo para ayudarlo a subir. Él lo tomó y como si fuera algo que hiciera todos los días trepó sin ninguna dificultad. Logramos escapar a tiempo. Nos asomamos por la ventanilla y vimos al subdirector entrar en el armario y, al no encontrarnos, bufo molesto y se fue, cerrando la puerta de un portazo.
Me apoyé sobre el muro tratando de recuperar el aliento. Eso había estado cerca.

-¿Qué se supone que hacías?- me preguntó interrogativo. Noté un poco de molestia en sus ojos y quité la mirada de él.

-Nada- respondí sin mucho interés y comencé a caminar.

-Por allí n- sentí algo chocar contra mi cabeza y caí al suelo. Abrí mis ojos confundida. A mi lado había una pelota. Supe que el impacto se debía a ella. Iba a levantarme pero sentí un dolor punzante en mi tobillo y volví a caer.

-Lo siento, no quise golpearte. ¿Te encuentras bien?- me preguntó un chico mientras se arrodillaba frente a mi. Tenía unos lindos ojos celestes y el cabello rubio. También estaba vestido de jugador, así que asumí que era del equipo.

-No lo creo, le lanzaste una pelota a la cabeza!- exclamó Harry parándose junto a nosotros. Miraba al chico con un poco de enfado.

-Lo siento mucho! Es mi primer día aquí. ¿Pero qué hacían en la cancha?-

-Nada importante- dije restándole importancia.- De todas formas ya me iba- me paré como pude pero luego de unos segundos volví a perder el equilibrio, solo que esta vez no caí. Unos brazos me sujetaban seguros. Voltee mi vista y vi al chico de cabello dorado sonriéndome tiernamente. Me quedé unos cuantos segundos mirando sus lindos ojos, pero de nuevo, el dolor me sacó del trance.

-Creo que me torcí el tobillo- dije tratando de contener mi expresión de dolor, aunque no podía del todo.

-¿Quieres que te lleve a la enfermeria?- me pregunto otra vez el chico, el cual no sabia su nombre aún.

-No, esta bien- dije recordando lo que había sucedido hace unos momentos. Si me verían allí dentro notarían que fui yo quien había escapado.

-Vamos, te llevare a casa- Harry se acercó y me tomó en brazos.

-Bájame! Yo puedo sola!- no quería que me cargara, no tengo cinco años. Oí al chico reír mientras nos alejábamos.

-Nos vemos!- habló un poco fuerte para que pudiera escucharlo. Alejé un poco la cabeza por sobre el hombro del rizado para observarlo.

-Adiós- le dije saludándolo con la mano como pude, ya que por alguna razón Harry tomó mi brazo evitando que pudiera moverlo.

-¿Qué haces?- pregunté esperando una respuesta aunque lo único que obtuve de su parte fue silencio. Sí que es bipolar.

Llegamos al estacionamiento para subir a su auto. Me abrió la puerta y me ayudó a entrar. Una vez que ambos estábamos arriba puso el carro en marcha. Solo me limitaba a mirar por la ventana. Era la segunda vez que subía a su auto y en ambas ocasiones no faltaba el silencio incómodo entre ambos. ¿Por qué hacía esto? Él sabe que yo no quería, y probablemente él tampoco. Nadie nos obligaba a nada.

Pasaron unos minutos y noté un pequeño detalle. Él no sabía dónde vivía, y yo tampoco le había dado mi dirección, entonces... A dónde rayos nos dirigíamos ?!

-¿Puedes decirme hacia dónde vamos?- pregunté confundida.

-A mi casa a hacer el proyecto.-

-¿Qué te sucede?-

-A mi nada. Tú eres. Dime por qué te alejas-

-No quiero hablar de eso.-

-¿No confías en mí?-

-No- Harry se volteó a mirarme ante mi respuesta. Tal vez haya sido un poco fría pero fui sincera. Apenas llevábamos unos días hablando, y todo el tiempo que lo veía trataba de evitarlo. No sé nada de él, y él no sabe nada sobre mi.

-Está bien. No puedo forzarte a hacer algo que tu no quieras. Pero si crees que me alejaré de ti estas equivocada. No soy una persona que se rinde fácil.-

-¿Crees que no lo noté?- dije con burla y él rió. A decir verdad... Tenía una linda sonrisa. También me agradaba su actitud. He tratado de la misma forma a muchas personas y ninguna de ellas se quedó, como estaba haciendo Harry. Tal vez no todas las personas eran iguales, como yo creía. Y, quizás, debería darle una oportunidad.

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Holaa otra vez 👋😂

Espero que les guste la segunda parte porque la hice con musho musho love 😂😂😂

Por ahora no pondré una imagen del nuevo chico, así que dejen volar su imagineishon 😂😉 No quiero cambiar la imagen que creen que tiene pero yo, por mi parte, me lo imagino parecido a Niall (perdonen mi obsesión con 1D, no ven que es una adiccioon :c nah mentira 😂) Aclaro que no es una fanfic, si no que así me los imagino yo. 😊

También quería decirles que a partir de este capitulo la historia comenzará a ponerse un poco más interesante (por lo menos eso creo 😂)

Nos vemos en la próxima actualización (o sería nos leemos(? ) 😁👋👋👋