PJM
— No sé por qué la empresa va tan mal. Seguro es por tu mal manejo de las cosas.
— Te recuerdo que no todo el peso es mío, el padre de Eun Hye debería de estar aquí también.
— Él tiene muchas cosas que hacer hijo.
— ¿No te parece extraño?
— ¿Qué?
— La fusión de las dos empresas, los primeros años iban bien, pero, desde que las acciones decayeron el padre de Eun Hye no se aparece por ningún lado.
— Ya te lo dije es un hombre ocupado.
— Tal Vez...—le dije dudoso a mi padre. Eun Hye también se ha comportado extraña estos últimos meses y no creo que sea por el hecho de no poder tener bebes.
Salí de la empresa y directamente me fui a un bar. Si, desde que TN se fue mi vida ha cambiado completamente, ahora voy todos los días a tomar a bares y a acostarme con las mujeres que hay. Se que está mal, pero es la única manera de olvidar unos momentos a TN.
Cada vez que me miro al espejo veo mi rostro cansado por el alcohol, he cambiado mucho desde que TN se fue; supongo que ella también lo hizo e incluso ya esté casada. Pensar lo último hace revolver mi estómago.
No hay día en el que no me arrepienta por no luchar, ni siquiera intentar salvar lo nuestro, sin embargo aquí estoy en un bar con el alcohol corriendo por mis venas al lado de una mujer que apenas y sé su nombre.
Creo que con el tiempo me he resignado a nunca volver a ver a TN, mi corazón aún la ama. Ya no puedo hacer nada más, yo solo busque mi propio infierno....
Si TN estuviera aquí ¿Yo tendría problemas de alcohol? ¿Me acostaría con mujeres desconocidas? Claro que no, no si ella estuviera aquí.
TN
Hacía las labores de mi casa cuando el teléfono sonó.
— TN!
— Katlin ¿Qué sucede?
— ¡Eres mala!
— ¿Por qué?
— No me dijiste que He o tenía planeado pedirme matrimonio. —dijo con una pequeña risilla—.
— jajaja tenía que ser sorpresa.
— ¡No puedo contener la emoción!
— ¿Ya le diste una respuesta?
— ¡Claro! ¡Le dije que si!
— A este paso me vas a dejar sorda jajaja.
— Adivina en dónde va a ser la iglesia y recepción.
— mmmm...no, no tengo ni idea.
— ¡En Seúl,Corea! —mi sangre se heló al escuchar eso, tantos lugares en el mundo y tuvo que ser en el mismo país, en la misma ciudad...—.
— Hay lugares mejores Corea...
— ¿Heo aún no te ha dicho la otra razón por la que vamos?
— ¿Razón?
— Él me dijo que te iba a hablar sobre eso, tal vez luego te diga, es algo sobre el hospital.
— ahhh okay, yo le pregunto.
— Si, adiós.
— Adiós.
