Ella & El

XV

         Recuerdo cuando mis amigas tenían algún conflicto con sus madres, yo por mi parte he sido bastante reservada con mi círculo familiar y lo que sucede dentro de él, suelo separar a mis amigos de mi familia, es como llevar dos vidas, pero me ha funcionado mejor que fusionar estos ambientes, en fin, como buenas amigas cada una daba un aporte de alguna anécdota de problema con sus padres y la manera como lo resolvieron esto junto a un consejo o una moraleja, y yo solo callaba y escuchaba, -sonreí para mí misma- preguntaban ¿y tu madre? y yo contestaba algo como mis padres son un perfecto, y ellas sonreían y movían la cabeza como queriendo decir "que tonta eres" o algo por el estilo, lo especial de estas conversaciones es que nadie parecía darle importancia a el error gramatical que cometía cada vez que daba esa respuesta, nadie parecía fijarse en eso "mis padres son un perfecto", era una frase no terminada, y ninguna se interesaba por el final de tal oración.

          Solo una persona se había interesado en el final de la oración, ella se llama Kira, la primera vez que escucho salir esa frase de mi boca éramos bastantes chicas, somos contemporáneas, por ende estudiamos juntas, casi crecimos juntas, esta vez si mal no recuerdo fue una profesora quien me pregunto qué tal era mi relación con mis padres, le respondí mi típico "mis padres son un perfecto", ella lo escucho, estaba sentada a mi lado, sonó el timbre, "al fin receso" pensé, y mientras salía Kira se acercó a mí.

- buena respuesta

- (pensé que se refería a las respuestas de los ejercicios de matemática) si, gracias, es el resultado de estudiar tanto.

- ¿a qué te refieres?

- me confundí, ¿de qué hablas tú?

- de lo que dijiste de tus padres, aunque no es razonable...

- ¿qué cosa no es razonable?

- lo que decías...

-Ambas nos quedamos en silencio por un momento...

- a menos que no terminaras la idea, ¡Sí! ¡Eso es! (hablando para sí misma en voz alta)

- ¿ah? no te entiendo, eres rara, ya veo por qué sueles estar sola... –lo dije sin querer, y al instante me arrepentí porque pensé que la había herido-

- se echó a reír a todo pulmón- que graciosa eres, pero te equivocas, estoy sola, porque prefiero estar así, y me refiero a que no terminaste de hablar, así que dime, ¿tus padres son un perfecto qué? –parece que no le afecto ni un poco mi comentario-.

- (quede muy sorprendida, por primera vez alguien se había fijado en mis palabras) ¡hasta que al fin hay alguien pensante aquí! mis padres son un perfecto desastre al igual que su hija

          Una sonrisa se escapó sin querer de mi boca, y no era que me enorgulleciera mi respuesta sino, que por fin alguien se había tomado la cautela de escuchar y pensar mi respuesta, mis palabras, uno pensaría que por estar en una institución académica o educativa, sería de gran importancia el ordenar bien las ideas, el léxico, el lenguaje, la coordinación verbal pero no era así, estando en una era tan prometedora, con tantos adelantos tecnológicos e invenciones, creo que hemos dado un paso atrás por que dejamos de lado lo más importante lo más fácil, el trato humanitario, los valores, las normas más básicas como los modales, las normas del buen hablante y del buen oyente, ya no nos preocupaba lo que sintieran, pensaran o dijeran quienes nos rodearan, por eso, me sentí muy entusiasmada de encontrar a alguien que tuviera esa calidez tan viva en su alma, pero la verdad me extrañaba que a una persona tan atenta le gustara estar sola.

- (sonríe) ¡Estoy de acuerdo con esa idea! la verdad, no pensé que ibas a responderme, como dijiste, soy rara, (se carcajeo bastante fuerte)

- veras, las respuestas correctas solo se las merecen las personas que hacen las preguntas correctas.

          y ambas sonreímos, pasamos toda la tarde hablando con gran soltura, sin pena alguna, nos dimos cuenta que éramos bastante parecidas, y allí inicio nuestra gran amistad, que hasta hoy 10 años después no se ha terminado, solíamos ser muy cercanas hasta hace poco, que le dieron la oportunidad de estudiar fuera del estado, ahora la veo de vez en cuando, y nuestra mejor manera de comunicarnos es por correo, ambas tenemos esta idea loca de que cada correo debe ser como una carta como un clasismo dentro de todo este mundo moderno, así hemos sido siempre, con ideas fuera de lo común y aunque con el pasar de los años ambas hemos conseguido hacer nuevas amistades ninguna amiga ha sido tan constante y tan atenta como Kira, peleamos todo el tiempo por pequeñeces, parecemos dos niñas, y cuando nos enojamos bastante la una con la otra parecemos un matrimonio sin remedio alguno, somos muy diferentes físicamente, pero pensamos muy parecido, ambas tenemos metas, principios, convicciones, ganas de crecer y superarnos.

Todo era irreal para nosotras, encontrar a una persona con quien poder hablar de lo que sea, que siempre que lo necesites estará allí para ayudarte, ella es genial, la razón por la Kira prefiere estar sola es porque no tiene que guardar apariencias por el contrario, es muy libre y le importa poco lo que el resto opine, amo eso de ella, yo por mi parte me rodeaba de mucha gente para que nadie sospechara que era diferente, Kira sabe querer sin juzgar, es muy madura e inteligente y podemos hacer tantas cosas juntas, la quiero demasiado, es mi hermana de otra madre.