-Donde La Sangre No Importa- Draco Malfoy

Blaise Zabini

Draco Malfoy se encontraba en la oficina de su mansión en esos momentos. Su postura era recta en su sillón acolchado rojo oscuro. Su corbata plateada contrastaba con su traje color oscuro y resaltaba sus ojos color grises. Su cabello engominado hacia atrás y su ceño fruncido al observar la carta en sus manos. Narcissa Malfoy volvía a pedirle a su hijo que reconsiderará proponerle matrimoño a la joven a
Astoria Greengrass. Últimamente estaba agobiandolo. Su madre luego de haber enviudado había decidido mudarse a la mansión de verano.
La puerta de su despacho sonó interrumpiendo sus pensamientos.
-señor Malfoy, el señor zabinni llegó, quiere verlo-dijo su viejo elfo pero fue interrumpido por un joven de piel oscura con una gran sonrisa en su rostro. Su mejor amigo Blaise zabinni
-Blaise ya te he dicho que no entres así a las habitaciones-
-deja tus tonterías y alegrate un poco. Mira esa cara de amargado. ¿Cuantos años tienes? ¿50?-respondió el joven risueño.
Blaise era la persona más alegre que podía existir en el planeta. Siempre iba de fiesta en fiesta rodeado de chicas sin importarle el mañana, no tenía vergüenza de nada y su sentido común era completamente nulo, todo lo contrario al joven rubio sentado tras el escritorio que racionalizaba todo en su vida.
-¿que quieres? Estoy trabajando- mintió el rubio a su amigo, la verdad que es que estaba muy aburrido.
-tu buen amigo Blaise viene a ofrecerte las mejores vacaciones de tu vida-dijo el sentándose en la silla frente al escritorio y poniendo las piernas sobre este, recibiendo una mirada fulminante del rubio-me han invitado a unas de las fiestas más grandes del mundo en belgica-Draco Malfoy observó a su amigo con curiosidad, no confiaba mucho en su criterio- una amiga me aseguró entradas con pases especiales-
-¿y te acuestas con esa amiga?-preguntó el sin interés, Blaise haría cualquier cosa para llevarse a una joven a la cama
-me ofendes draco malfoy-dijo su amigo con aires dramáticos
Decidió no seguir preguntando ya que no quería que el se pusiera gráfico al respecto.
-bien lo pensare- dijo finalmente indignando completamente a zabinni
-¿lo pensare?-preguntó su amigo con enfado-¡te estoy hablando de una de las mayores fiestas de la historia! ¡Con pases especiales! ¿Y tu lo pensarás?-respiro profundamente con los ojos cerrados y luego se levantó con tranquilidad-me iré para saber si Theo ya tiene su maleta lista, vendrá con nosotros, cuando pise tu mansión quiero tu trasero en el salón con tu maleta listo para irnos de juerga-
Dicho esto salió caminando con las manos en los bolsillos bufando por lo bajo ante la seriedad de su amigo.
El rubio espero que el se fuera para soltar una carcajada. Claro que iría. ¿Theodore, el misantropo, en una fiesta? No se lo perdería por nada del mundo.