tres

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después de pasar la noche en comisaría, que me quitaran todas mis posesiones, de hablar con mis hermanas las cuales iban a ser llevadas con mis tíos a vivir, me encontraba en una mugrienta celda esperando que algo pasara.

-qué iluso eres. -escuché la voz de Marta y sí, efectivamente estaba en una esquina de la celda.

-HAS SIDO TÚ PEDAZO DE GUARRA -inenté cogerla, matarla con mis propias manos, pero no pude, ésta era demasiado escurridiza.

-ts... no grites, despertarás al bebé... -una imagen de un bebé y de una chica de espaldas cuidándolo vino a mi cabeza. otra visión. marta siempre me hacía tener visiones.

"la mujer que daba la espalda estaba cantándole una pequeña senerata a su bebé. ésta se dió la vuelta, dejando ver el rostro de Jay, la cual cogió el bebé, y le dio cuatro puñaladas en el pecho."

se me auguaron los ojos y me tiré del pelo.

-eres una malísima persona, Louis.

-CALLATE, DEJAME EN PAZ DE UNA JODIDA VEZ -me daba golpes en la cabdeza y los tirones no cesaban.

marta rió.

-sabes que nunca lo haré.

y grité.

grité con tanta fuerza que mi garganta dolió.

pero conseguí apagar la voz de marta y las visiones.

-hey hey, ¿estás bien? -un guardia se acercó a mi celda.

fuí hacia él.

golpeé mi cabeza contra los barrotes, haciéndome heridas en ésta, mientras seguió gritando.

-NECESITAMOS UN JODIDO PSICÓLOGO AQUÍ, POR FAVOR -gritó el guardia.

(Narrador pov)

le llevaron a otra sala por la fuerza, cosa que él intentó resistir.

la sala era azul marino, con una mesa negra en el centro y dos sillas, una en frente de la otra, con un pequeño foco encima de la mesa.

un hombre se encontraba allí sentado en una de esas sillas, y los guardias sentaron a Louis por la fuerza en una de ellas.

lo ataron a la silla.

¿pensaban que estaba loco o algo parecido?

él no estaba loco.

-Louis, ¿cómo te encuentras? -le preguntó el hombre de raza negra, aparentaba unos 30 o 35 años, y qué coño, ¿qué hacia pregúntandole eso?

-no me conoces de nada ni yo a ti.

-bueno, yo me llamo Joshua. ya me conoces. yo se que tú te llamas Louis y... -miró algo en una libreta que tenía delante. -¿asesinaste a tu madre?

-yo no he asesinado a nadie.

-entonces, ¿quién fue? las pruebas dicen que alguien la asesinó, y el único que estaba en casa cuando eso ocurrió, eras tú.

-no era el único.

-¿quién más estaba?

-mis hermanas, y mis compañeras de habitación.

el hombre iba apuntando cosas en su libreta.

¿qué coño apuntaba tanto?

-¿compañeras de habitación? interesante. ¿no son de tu familia?

-no. son sólo amigas que a veces están conmigo en mi habitación. se esconden allí, mamá no puede verlas, las echaría.

joshua frunció el ceño.

-¿cuáles son sus nombres?

-Marta, Laura, Cassandra y Gemma.

no digas nuestros nombres, estúpido.

-¿y ellas estaban en casa anoche?

-ajá.

-¿crees que haya podido ser alguna de ellas?

marta, fue marta.

-sí, fue marta.

-¿marta? ¿por qué lo hizo? -seguía apuntando cosas en su libretita y a mi me ponía más nervioso.

-pregúntele a ella.

-bueno, no está aquí ahora, podrías llamarla. ¿necesitas el teléfono para decirle que venga, y poder interrogarla?

-no, ya aparecerá.

-¿cómo que ya aparecerá?

-siempre aparece, nunca se sabe cómo entra a los sitios, pero siempre lo hace.

se escuchó una risa, y me giré mirando la puerta, en la cual estaba marta.

-eres tan iluso.

-mírela. -le dijo a Joshua- ya puede interrogarla.

éste se quedó mirando a louis como queriendo observarle bien la cara.

-¿estás bromeando o esto va en serio?

louis lo miro confuso.

-¿qué? uhm, por supuesto que va en serio, puede interrogarla, si me desamarra las manos de la silla podrá ella sentarse.

-tampoco lo necesito, eh.

-si, lo haces porque tú eres la culpable aquí. yo no he hecho nada.

-JAJAJAJAJAJAJA, como dije, iluso.

-¿por qué dices eso?

-realmente piensas que fui yo quien asesinó a tu madre. -se paseó por la sala.

Joshua miraba a Louis asombrado.

este niño definitivamente no estaba bromeando, tenía un problema de verdad.

louis empezó a ver luces, luces por todos lados, rayos de luces. esto ya no era la realidad.

se sintió acostado e incómodo, las luces no cesaban, al igual que las bajas voces a sus costados todo el rato.

schizophrenia. [ls]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora