No me Olvides [Death Note (LightxL) Yaoi]

Capítulo 5

Light me daba la espalda, caminando en esa dirección. Sonreí, mi plan acaba de ponerse en marcha. Tengo que disimular y a la vez llegar al centro deportivo antes que él. Será mejor que no la líe.

Me levanté sin hacer ruido, colgándome la bolsa de deporte al brazo izquierdo. Eché una pequeña miradita hacia atrás, le vi alejarse hasta que le perdí de vista. Fase 1 superada, pasamos a la fase 2 de mi segundo plan.

{11:04}

Llegar me ha llevado menos tiempo de lo que creía. Pensé que no lo iba a a conseguir a tiempo, que iba a llegar tarde. Había ido caminando y los últimos minutos corriendo, no quería llamar a Watari y decirle que le ocultara a Beyond que he salido otra vez. Aunque no es mi padre, no tiene que preocuparse tanto por mí.

Padre... hacía tiempo que no pensaba en aquella palabra. Mucho tiempo, desde que el mío murió junto a mi madre. Dolió, quise dejar de vivir puesto que Beyond se había convertido en asesino poco después. Mi vida era un desastre. Si no hubiera sido por Light, ahora estaría muerto.

En los vestuarios, había un enorme silencio, estaba yo sólo cambiando mi ropa habitual por mi uniforme de tenis. Formaba parte de un equipo de este sitio, siempre me elegían para representarles. Es porque soy el mejor, no me da vergüenza reconocerlo. Unos pasos se acercaron a la taquilla al lado de la mía, no me hizo falta mirarle para saber quién era.

-Hola, Elle~

Ryo Ogura, mi segundo acosador. Su madre fue amigo de la mía, pero al morir nos dijo que le importaba una mierda lo que pasara con Beyond y conmigo. Deduje que me acosaba para ganarse mi amistad y dejarme tirado otra vez.

Le miré a los ojos, a sus ojos azules que por un tiempo fueron los ojos de mi único amigo. Su familia nos traicionó, Beyond y yo le dimos la espalda, y ocho años después volvió. Para entonces Beyond ya estaba saliendo con Hirano, y todo se fue a la mierda después de casi un año.

-Ogura, no tengo tiempo. Déjame en paz, no vas a conseguir nada. Pierdes el tiempo.

-Vamos, Elle, no seas tan borde conmigo -replicó, su voz burlona me rayaba la cabeza-. Sabes que mi familia se arrepiente de lo ocurrido, y mucho más mi madre. ¿Qué sabía ella que ibais a necesitar tanta ayuda?

-Pues dile a esa hija de mil padres que se vaya a la mierda. Beyond y yo estamos perfectamente, ya no necesitamos ayuda. Nos valemos por nosotros mismos, nos volvimos independientes a los cuatro años. Al contrario que tú, que seguramente estarás viviendo con tus padres hasta los treinta y sin novia.

Cerré la puerta de mi pequeño pero espacioso y ordenado armario sin apartar los ojos de Ogura. Este chico me tiene hasta las narices, y ahora no puedo perder tiempo. Light llegará dentro de poco, tiene que encontrarme en uno de los campos. Si me ve aquí con este imbécil, ya podré ir despidiéndome de él. No se porqué sentí la presencia de Light cerca, razón de más para darme prisa.

Ogura no había cambiado su expresión en lo más mínimo, no le afectaban mis insultos, yo lo sé, pero me daba igual porque tenía que expresar lo que sentía hacia él. Odio. Asco. Repugnancia. ¿Miedo? No, miedo no. ¿Verdad?

Dio unos pasos hacia mí, hasta quedar a medio metro de distancia. Su mano derecha se posó a un lado de mi cuello, pasando delicadamente sus dedos por él. Me acercó aún más a él, haciendo que nuestras respiraciones chocaran. Se me escapó un jadeo, nunca había hecho algo parecido. No irá a...

-Aprende a jugar, Elle -susurró.

A continuación, sus labios acariciaron los míos. ¿Qué? ¿Qué está haciendo este gilipollas? ¡Que me suelte ahora mismo! ¡No quiero que Light llegue y...!