Something Broken

Capítulo V

Al día siguiente Gabe se encontraba en la recepción de la escuela, esperando a que la secretaria que atendía le diera dos formularios para llenar.

-Aquí tienes.- le entrego la joven mujer a Gabe.

-Gracias.

Gabe fue a la biblioteca y se topo con Jane, quien leía un libro y de no ser porque estaba inmersa en su lectura habría molestado a Gabe con aquellas típicas miradas burlonas que eran usuales en ella.

Así que Gabe se alivio por que la joven chica no viera lo que tenían escrito los formularios que Gabe tenían en mano. Se alejó lo más que pudo de la peligrosa chica con el libro y se fue a sentar a una mesa para dos en un rincón, examinó los formularios y contestó con todo lo que se le ocurrió excepto la verdad. Pues tanto él como Connor sabían que si escribían la verdad en ese formulario jamás los aceptarían en el equipo de porristas y perderían la apuesta.

Minutos después, y una vez que Gabe había contestado su formulario y el de Connor los fue a dejar de nuevo a la recepción, en donde la joven mujer le indicó que la respuesta por parte de la administradora de porristas se la darían en un día.

Más tarde, sin tener más clases y sin Connor a su lado, Gabe decidió ir por un poco de diversión...

-He! Chicos.- Saludó a un grupo de hombres que se encontraban sentados en el suelo del extenso jardín.

-¡Gabe! viejo, ¿como has estado?- Uno de ellos se levantó animado y saludó a Gabe.- Me dijeron que te gano una chica en la clase de deportes.

El chico le guiño un ojo a Gabe y éste se apeno internamente.

-No fue la gran cosa.- se encogió de hombros.

-Genial, bueno ¿Irás a la fiesta de hoy?

-No me la perdería por nada. Pero recuerda que debemos llevar huevos podridos.- Le recordó Gabe al chico.

-¡Cierto! Lo había olvidado. Será fascinante.

-¿Tienen clase libre?-preguntó Gabe cambiando de tema.

-Algunos sí, otros solo se escaparon de sus clases.- el chico se encogió de hombros y Gabe asintió como si no fuera la gran cosa.- Por cierto ¿Donde está Connor?

-No lo sé, falto a la escuela hoy.- Gabe se lo pensó un momento antes de volver a hablar.- Tal vez lo visite en un rato...

La plática de esos dos fue interrumpida por el vibrar del bolsillo de Gabe.

-Hablando del rey de roma.- Dijo antes de contestar la llamada a Connor.- Disculpa.

-Claro.- Dijo el chico antes de volver a sentarse en el pasto, mientras que Gabe se alejo caminando a pasos perezosos de ahí.

-¿No encontraste el camino a la escuela o tu cueva se derrumbó sobre ti?- Saludó Gabe a Connor.

-Que gracioso.- Dijo Connor con sarcasmo.

-¿Todo bien? 

-Bueno...- Gabe escucho la respiración alerta de Connor.- Arrollé a alguien.

-¡¿Que tú qué?!

-No fue una persona, de hecho es un perro, iba camino a la escuela y él solo se atravesó. Estoy en el veterinario ahora.

-Idiota tú no tienes auto... ¿Cómo demonios...?

-Papá me lo presto.- lo cortó Connor con cierta culpabilidad.