Something Broken

Capítulo VII

Grace se encontraba en una de las mesas de la biblioteca pretendiendo estudiar, ya que Jane la había despedido de su mesa por no concentrarse en el tema a estudiar. Así que básicamente ambas hermanas estaban separadas por cuatro mesas más.

Connor se instaló frente a Jane y en la misma mesa, pues no se iba a sentar con alguien que no conociera del todo. Y Connor ya había ensayado una y otra vez ciertos comentarios en caso de que Jane se opusiera a la compañía. Pero ese no fue el caso. Jane estaba inmersa en sus estudios y Connor no paraba de reír internamente, pues la chica ponía un gesto de concentración muy divertido para Connor.

Minutos después, Jane se percató de la presencia de Connor, pues ya había terminado con sus deberes, pero quería leer un libro aprovechando el silencio y la comodidad de la biblioteca. 

-¿Te ayudo?-preguntó Jane señalando los deberes de Connor.

-No tengo tiempo para explicarle a una niña sobre planos cartesianos y... Bah, que vas a saber tú.- negó con la cabeza. Jane no se sintió ofendida, pues realmente solo había querido ser educada. La chica se concentró en su libro y pronto fue interrumpida por una mano puesta en su hombro.

-Hola nueva.- la chica era rubia, alta y de cara alargada. Connor la miró de reojo y en un instante sabía que esa chica iba a traer problemas. Pero la inocente Jane no dejaba de ver sus lindos ojos azules, su figura envidiable y sus labios generosos.

-Hola vieja.- Respondió Jane, quien no se dejó intimidar ante la chica.

-Me llamo Tessa, cariño.- dijo con una sonrisa fingida.

-Jane. ¿Se te ofrece algo Tessa?-preguntó cortante mientras aparentaba leer su libro.

-Bueno, me sorprende tu falta de conocimiento por esta escuela. ¿En serio no sabes lo que busco aquí?

-Bueno, no estoy al pendiente de los deseos de los demás por aquí. Así que ilumíname.- Jane no parecía prestarle mucha atención a Tessa y eso a ella le molestaba.

-¿De casualidad no sabes leer la mente? si no es así entonces no entiendo por qué otra cosa te alabarían.- rodó los ojos. y Connor logró ver a Jane sonreír falsamente.- En fin, eres nueva y pensé que...

-¿Piensas?- La interrumpió Jane, Connor rió por lo bajo y Tessa se limitó a serenarse para no soltarle un puñetazo a Jane en plena biblioteca.

-Como sea, estás invitada a la fiesta de esta noche en la casa frente a la avenida principal, a las ocho. Puedes llevar a tu hermanita de porcelana.- Jane se gira a verla disgustada. No le gustaba que hablaran de Grace así.

-¡Pues claro que asistiré!- Jane fingió emoción y Connor dejó a un lado su libro de texto para observar la escena que estaba a punto de hacer Jane.- Te llevaré más relleno para tu bra.- le guiñó un ojo, y Connor volvió a reír.

-No gracias, lo necesitas más que yo.- Tessa señaló  los pechos de Jane y ésta se encogió de hombros.

-Sí, bueno. No todos tenemos dinero para operarnos las...- suspiró Jane exagerada y se volvió a ver a Connor.- Deberías  darme el número de tu cirujano, parece ser barato. ¿O tú que opinas Connor? Yo no creo que estén bien hechas.- Tessa articuló una O con los labios y eso a Jane le fascinó.

-Hija de...

-No cariño, la tuya.- y sin más Jane tomó su libro y su mochila, dejando solo a Connor con la rubia furiosa quien lo fulminaba con la mirada.

-Auch.- sonrió Connor.- La verdad duele ¿No?- dijo con un guiño y media sonrisa. Haciendo que Tessa saliera furiosa de ahí.

Connor pensó que era todo lo que la chica haría, que soportaría los insultos de Jane y se iría al sanitario a retocarse las arrugas de expresión. Pero Tessa era rencorosa y le daría su merecido a Jane.

Era la hora del almuerzo y Tessa caminaba por los pasillos saludando a uno que otro estudiante mientras sus tacones sonaban en el suelo y su moderna bolsa se balanceaba de adelante hacia atrás mientras caminaba. Paró en seco cuando logró ver a Jane de espaldas en una fila para pedir el almuerzo. Pronto Tessa se apresuró a meterse casi hasta adelante de la fila y ordenar un café caliente en un vaso desechable y como era de esperarse, la chica no tenía otra mejor idea que derramarselo a Jane. Así que Tessa esperó un poco más hasta que Jane recibió su almuerzo y comenzó a caminar hacia la mesa en la que se encontraba Grace.

-Oh, lo siento.- Tessa fingió sorpresa e hizo como si su brazo sufriera un calambre ilógico, haciendo que el café caliente le cayera a Jane encima de la blusa.

-¿Cual es tu problema?- exclamó Jane en voz baja, despegando su blusa del pecho para no tener que sentir aquella sensación de humedad en ella.

-¿Creíste que yo había terminado de hablar?- Tessa sonrió graciosa y Jane le siguió el juego con una amplia sonrisa blanca.

-Bueno, ¿Ya terminaste de hablar mi querida Tessa?- Tessa asintió y se dio media vuelta, golpeándole a Jane en la cara con su cabello rubio. Jane se mentalizó para no golpear a Tessa en ese mismo instante, dio un suspiro y se dijo que más tarde Tessa tendría su castigo...

Era un espectáculo y Jane rodó los ojos, las burlas no se hicieron esperar y Grace se levantó de inmediato para llevar a Jane al sanitario y arreglar lo que se pudiera de su atuendo húmedo y pegajoso. Tessa se burlaba de ella junto con su clan de amigas y Gabe y Connor, quienes lo miraban todo no estaban muy felices con la rubia operada y sus molestas ofensas hacia Jane.

Ya en el tocador, Jane cerró la puerta y se quitó la blusa, Grace la tomó y comenzó a humedecerla con agua. Después la metieron debajo del secador de manos automático y esperaron a que se secara. Era fácil arreglarlo, pues no era la primera vez que a alguna de las dos les jugaban una mala broma en toda su historia escolar.

-¿Qué le hiciste Jane?-preguntó Grace, quien aún sostenía la blusa de su hermana debajo del secador de manos.

-Me invitó... nos invitó a una fiesta, y no lo hizo como es de esperarse ¿Sabes?

-¿Y por eso la insultaste?

-No Grace, la insulté porque ella te insultó primero.- Jane comenzaba a molestarse ante la falta de comprensión de Grace.

-¿Qué importa? mientras yo no lo escuche no tengo porqué ofenderme.

-Pero...

-Tú me dijiste eso ¿Recuerdas?.- la interrumpió Grace.- Así que no pelees por estúpidas cuando de eso me puedo encargar yo.

-Lo volvería a hacer.- dijo Jane con un suspiro.

-Ya sé, y por eso me caes muy mal.- le dijo Grace con una sonrisa sincera y devolviéndole su blusa seca. Jane la aceptó y volvió a ponérsela. Ambas hermanas volvieron a la cafetería y se sentaron como si nada a comer su almuerzo, mientras ignoraban por completo las burlas de la escuela.

Jane le pidió su soda a Grace y también guardó la suya para el final del almuerzo.

Cuando terminaron de almorzar, Grace tomó una lata más de soda y Jane también, se acercaron sigilosamente hacia Tessa y ha espaldas de ella rieron malvada y exageradamente. Jane contó hasta tres y juntas ambas hermanas vaciaron el contenido de las cuatro latas de soda sobre el cuidado cabello rubio de Tessa.

-¿Está frío Tessa? Déjame arreglarlo.- Jane tomó dos vasos de café de la bandeja de una chica de lentes y los vació sobre Tessa. 

-¡Lo pagarás Zorra!- dijo Tessa con voz chillona.

-¡Ansió ese día!- le gritó Jane en el oído, haciendo que Tessa se retorciera del coraje en su lugar y provocando chiflidos, insultos y risas hacia la rubia mojada.

Grace tomó de la mano a Jane y juntas salieron de ahí entre risas.