Los humanos somos imperfectos, somos débiles, somos impotentes ante el pecado, somos vulnerables, somos como una hoja que se desprende fácilmente del árbol de la vida. Pero todo cambia cuando somos hijos de Dios, cuando tenemos a Dios en nuestra vida ahi pasamos a ser otro tipo de humano, ahi somos humanos fuerte, ahi somos humanos poderosos capaces de luchar contra el mundo profano, somos como un vidrio que no se le vulnera nada, somos como un roble que por más que lo golpeen y traten de destruirlo permanecerá siempre firme pero sin embargo seguimos siendo imperfectos. No hay persona más fuerte que la persona que tiene a Jesús en su vida por que asi ningún destructor ni el pecado podrá con esa persona.
Seamos un fuerte roble ante los problemas y esos problemas no podrán contra nosotros.
¡¡¡¡Jesús es nuestro roble!!!!
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El Cristianismo Que Actúa Y Libera
EspiritualReflexiones que surgen con la cotidianidad huamana, en busca de ideas desde el cristianismo que nos permitan actuar y ser libres, en búsqueda de un cristianismo que nos libere de ataduras y cadenas que nos limitan nuestro actuar y el de las demás pe...
