muñeco

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-me sigo preguntando.......¿cómo es que llegue a esto?-dijo natsu de mal humor.

-solo tienes que actuar cuando haya clientes-dijo juvia animándolo.

-a mi mu gusta este trabajo-dijo Sting con una sonrisa.

-a ti te gusta porque no estas vestido asi-dijo el peli-rosa molesto.

POV DE JUVIA.

Juvia no se rinde, después de que me fuera corriendo a mi casa, juvia planeo su siguiente jugada, escogí un trabajo antes de salir al carnaval, se trata de solo ser camareros de un restaurante, y no de uno común, pensé esto le haría sonreír pero es un hueso difícil de roer, cuando el dueño nos entregó nuestros vestuarios vi lo que le entrego a natsu-san uno que me mato de risa, jejeje y se lo puso de regañadientes, y ahora lo veo y no lo creo, y Sting-san tampoco, con eso se ve adorable, y lo seria mas si tuviera una sonrisa.

FIN DEL POV.

-a trabajar-dijo la dueña con un pañuelo en la nariz y una sonrisa pervertida.

-argg-gruño natsu para salir a atender las mesas dejando a juvia y Sting con unas sonrisas oreja a oreja.

-creo que lo disfruta-dijo la maga de agua.

-¿tu crees?-dijo Sting.

-KYAAAAAA QUE LINDO NEKO-chillaron algunas clientas.

Sting y juvia se asomaron para ver como las clientas coqueteaban con natsu, ¿y cómo no hacerlo?, tenía en su cabeza unas orejas de gato negras, en su cuello una campanita, tenía su torso desnudo, y un pantalón ajustado negro con una cola de gato.

-me las pagaran-amenazo el peli-rosado a los dos magos con una mirada fría.

-vamos, hay que trabajar.....perrito-dijo juvia acomodándose sus orejas de conejo.

-ok-dijo emocionado.

Haci trabajaron como meseros en un restaurante que el tema del mes era animales, en toda la misión las clientas coqueteaban a natsu y Sting ya que sus disfraces mostraban mas de lo que deberían, incluso llegaron a manosearlos por sus torsos lo cual enfureció al peli-rosa, que por milagro de este se terminó la misión en la noche.

-fue divertido-dijo Sting.

-para ti-dijo este con una aura negra.

-jeje recuerdo que les decían dioses griegos-dijo juvia.

-y los somos-dijo el dragón Slayer de luz pícaro y orgulloso..

-no vuelva hacer una misión con ustedes-dijo mago de fuego.

-bueno me voy, hasta mañana-dijo Sting para irse corriendo y perdiéndose de vista.

-¿acaso esta escapando?-dijo natsu con una gotita.

-natsu-san-lo llamo juvia.

-¿qué quieres?-dijo cortante.

-etto....juvia quiere darle algo-dijo ruborizada.

-no me interesa-insistio.

-pero aun asi se lo quiero dar-dijo juvia para sacar de su mochila una cajita.

Natsu miro con curiosidad la caja, era un poco pequeña, pero aun así le daba curiosidad aunque no lo admitiera, con suavidad la cogió, y lentamente empezó a quitar la tapa y luego quedar sorprendido.

-juvia-dijo aun sorprendido.

-juvia lo hizo ella misma...espero que le guste natsu-san.....espero que te alegre......hasta mañana-dijo dándose la vuelta y empezar a caminar dejando a un peli-rosa parado mirando la caja.

-yo...yo-susurraba natsu, de la caja saco dos pequeños muñecos, uno era de el disfrazado de neko con una sonrisa y el otro era de juvia de conejita sonriente.

Miro al fondo de la caja y vio una nota.

"estos son muñecos que hice yo misma, espero que te gusten, jejeje perdón si hize el tuyo con una sonrisa pero creí que te varias bien, son únicos claro, los hice con mucho esfuerzo y amor, tanto que varias peces me piche con la aguja, no espero que los quieras pero guárdalos, por favor sonríe, sonríe por favor, nos duele, me duele verte así, quiero a ese natsu-san alegre, no tengas miedo, miedo de amistad, miedo de amar, jamás lo olvidare, aunque usted odie a juvia, juvia jamás lo dejara, siempre juvia estará para usted, y también Sting-san." " Sonríe."

-yo....yo....yo-tartamudeaba mientras dos lagrimas se deslizaban por sus mejillas, era la primera vez que le regalaban algo como esto.

Después se arrodillo y abrazo con fuerza a los dos muñecos.

el corazón le latía rápidamente, aunque tratara de reprimir el sentimiento no podía.

-yo.....sonreire-dijo mientras sonreía sinceramente y dos lagrimas mas se deslizaban por sus mejilla.

Se levantó para caminar mientras no dejaba de abrazar con fuerza su más preciado tesoro.

no me olviden.  (navia).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora