Los Tres Herederos: Serie 1# La hija de Afrodita.

Capítulo tres: La Bendición de Mamá.

Ahora tenía la certeza de aquello. Eso era una profecía, Una extraña profecía.

El agarré de la chica fue disminuyendo poco a poco, Hasta que la luz de sus ojos desapareció, Y sus colores volvieron a su rostro. Parpadeó varias veces, para luego comenzar a hablar.

-No otra vez- Dio masajes a su frente cargada de pecas, al igual que el resto de su cara- Han pasado años y sigo sin acostumbrarme.

-Disculpa, ¿Que fue aquello?

Ella me dedicó una sonrisa notablemente incómoda. Esta usando un camisón de pijama con pintura en el, Era obvio que se había levantado de la nada.

-No te había visto antes, ¿Eres nueva?

-Si, acabo de ingresar la tarde pasada.

Joshua Hicks estalló en risa detrás de mí.

¿Que le sucede al tipo? ¿No es capaz de sobrevivir sin lastimar la existencia de los demás?

-Creo que no tengo Nada más que hacer aquí. Nos vemos Reinita.

No mire por donde se fue, Y tampoco me importa, Se puede hundir en el tártaro y seré la última persona en la tierra en tenderle una mano. Muy pocas personas sacan lo peor de mi, Joshua lo logró en menos de un día.

-Por favor ignora su presencia.
-Tranquila, Sobre lo de antes... De veras lo siento, No es algo que pueda controlar, Sólo sale cuando menos lo espero.

-Creo que es increíble nacer con ese tipo de Don, Ya sabes, Lo de las profecías místicas y eso.

-Es más simple de lo que crees, Aunque casi muero al principio...

Ok, eso no sonaba nada simple. Rachel Elizabeth Daré, No nació con el espíritu de profecía en ella, lo adquirió hace algunos veranos durante la guerra con Kronos. Siempre fue una mortal capaz de ver a través de la niebla, También me explico lo que era la niebla, Por que no tenía ni idea.

Pero yo no puedo hacerlo, Soy incapaz de ver a través de ella, Y no soy como Rachel una mortal, No es una mentira que soy diferente a mis demás hermanos, pero... ¿Por que no puedo ver cosas que se suponen que son de mi mundo?

-Tenias que ver al anterior oráculo, Era una momia fea y mal oliente con un vestido para nada favorecedor... ¿Adara?

-Oh si, Lo siento algo mantuvo distraída.

Rachel tomo mis hombros obligándome a verla de frente.

-Escucha, Si es por lo de la profecía tranquila, No siempre son tan trágicas como lo pintan los dioses. Somos humanos y está en nuestras naturaleza buscar la forma en que más nos acomodé vivir, Incluso con una fea profecía a nuestras espaldas.

-Bien.
-Esa es la actitud.

Rachel se disculpó un millón de veces por estar en esas ropas, por las cosas extrañas que había dicho, Y por su poca higiene de esta mañana. El campamento comenzaba a tener mayor movimiento, Los chicos levantados se dirigen al comedor para empezar sus actividades diarias, Con un desayuno estilo griego.

-¡Adara!

Adrien corrió a mi encuentro. Había algo extraño en el este día, ¿Su cabello es negro? Esperen, ¿no era rubio ayer?

-¿Tu cabello es negro?
-¡Lo notaste! He mejorado desde el verano pasado.

Si mi cabeza pudiese tener más confusión explotaría.

-Como hijos de Afrodita tenemos el privilegio de cambiar de aspecto- Wow, Eso si no lo espere- Y este año como ves, Llegué a mi máximo cambio hasta el momento.