Hoy quiero darte gracias por todo lo que me has dado. No soy merecedora de tanta misericordia. Siempre has puesto en mi Camino a personas que me dan ánimo y creen en mi; aún cuando yo no creo en mí misma.
Cuando estoy a punto de desviarme del Camino como un Padre amoroso me adviertes de las consecuencias que han de venir. Aún si tropiezo ahí estas para levantarme. Un amor como el tuyo nunca encontraré aquí en la tierra.
Fue por el derramamiento de la sangre de tu Amado hijo; que nos distes la puerta para nuestro perdón y Salvación. Tú nunca fallas. Tu Palabra y amor permanecen para siempre.
Gracias por todos mis hermanos y hermanas en Cristo. Quienes me aman y no quieren que tropiece y me quede. Ellos siempre me dejan saber cuando estoy haciendo las cosas fuera de tu voluntad.
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De Mí Para Ti
SpiritualEl libro De Mí Para Ti nació en el corazón de Dios y luego en el mío. Es un libro en el cual podrás disfrutar de pequeños poemas, reflexiones, pensamientos, acrósticos y mensajes inspirados en la palabra de Dios. También encontrarás versículos bíbl...
