Started [#ESDMO2]

Cap. 11 Cursi

Lewis
Hacía ya bastante tiempo que los chicos se habían marchado cuando Fetch y yo decidimos que era buen momento para marcharnos.
–¿Crees que todos estarán bien?– Fetch tenía los antebrazos apoyados encima de la silla del escritorio.
–Son fuertes, sobrevivirán.– concluí yo.
–No me refería a eso.
Me froté los ojos mientras pensaba, esta mierda me está dejando exhausto.
–¿Te refieres a las relaciones que están surgiendo?
–Efectivamente.
–También estarán bien. Saben el destino al que se enfrentan, son lo suficientemente adultos como para decidir que hacer.
–Supongo que tienes razón.
–¿Y tú qué, eh?– me miró, confusa.– ¿Cuando piensas traer un novio a casa?
Empezó a reír.
–El día que traigas tú una novia.
–Touché.
–¡Señora Wellington! ¿Está preparada?
–¡Si! ¡Ya estoy lista! Y, por favor, llámame Tania.– la abuela de Noah apareció por la puerta. De repente se paró y nos miró a ambos.– Esperad que piense, vosotros dos erais... ¿Hermanos?
–Primos, señora... Digo, Tania.– respondió Fetch por mi.
–Eso, eso, primos, disculpadme.
–No importa.– respondí yo.
Fetch dio una palmada.
–Bien, marchémonos. Nos queda un largo viaje hasta Tokyo.
–¿Habéis pensado en un plan para derrotar a esta mujer?
–En realidad trazaremos un plan cuando veamos que hay por allí. Así les daremos un poco de tiempo a los chicos para relajarse.– dije mientras empezábamos a caminar hacia la puerta.
–Será difícil que los descubran entre las multitudes de Tokyo.– aclaró Fetch.
–Me parece genial que penséis tanto en los chicos.
Cerré la puerta de la guarida con llave.
Mis sentidos se mantenían alerta, notaba a alguien observándonos pero no le hice demasiado caso, no quería que se dieran cuenta de que sabíamos que estaban ahí.
Empezamos a caminar, hablando de cosas triviales. 
Mis sentidos se mantenían alerta, alguien nos estaba siguiendo.
Le hice un gesto a Fech, ella asintió.
Al girar una esquina bastante oscura yo esperé pegado a la pared, casi indetectable gracias a mi poder.
Un chaval vestido entero de negro pasó en frente mía, mirando hacia Fetch y la señora Wellington.
–¡Mierda!– murmuró el chico.– ¡Cómo las pierda estoy muerto!
Empezó a caminar rápido.
Yo me coloqué detrás de él y le agarré, poniéndole una navaja al cuello.
–¿Trabajas para Jolene?
–¡Joder! ¡Tío, tranquilo, tranquilo...!
Apreté un poco la navaja, el chico soltó un quejido, como un sollozo. Menudo cagueta.
–Responde a mi pregunta.
–S-si, e-estoy con Jolene.– apreté un poco más la navaja, haciéndole soltar otro sollozo.
–Dame una buena razón para que no te raje el cuello ahora mismo.
–S-soy a-amigo de Luke, creo que le conoces... M-me llamo Hunter.
–¿Tú eres el que dio el chivatazo?– aflojé un poco la presión.
–Si, si, yo fui quien avisó a Luke.
–¿Por qué nos sigues?
–Mi jefe de escuadrón me mandó seguiros para ver a donde ibais. ¿Podrías, por favor, quitar eso de mi cuello?
–¿Piensas decirle donde estamos?
–Obviamente no. Y tampoco quiero que me digas a donde vais. Solo déjame inconsciente por ahí, si preguntan diré que me pillaste, siendo un novato no creo que pase nada.
Le solté.
–Gracias por cubrirnos, Hunter.
–No las des, Luke es un tío legal.
–Siento lo de la navaja.
–No pasa nada, lo comprendo. Buena suerte con lo que sea que vayáis a hacer.
Asentí. Le coloqué la mano en la cara y se quedó dormido.
Corrí para alcanzar a las chicas.

Noah
Hacía un rato que entramos en el avión, Sam se había quedado dormida apoyada en mi hombro, mientras leía.
Cogí uno de sus mechones de pelo y empecé a retorcerlo.
–¿Es tu novia?
Al buscar al dueño de esa voz me di cuenta de que se trataba de un niño de no más de diez años, encaramado al respaldo de su asiento, mirándome con curiosidad.
Sonreí.
–Algo así.– le contesté.
–¿Por qué vais a Japón?
–Nos vamos de vacaciones.
–¡Ala! ¿Y donde están vuestros padres?
–Ellos van en otro avión.
–¿Os dejan ir solos?
–Si, se fían de nosotros.
Sam empezó a desperezarse un poco.
–Hey.– me saludó.– ¿Quien es este pequeñín?
–Soy James y la semana que viene cumplo los once años.
–Que bien. Yo me llamo Sam.
De repente ambos se quedaron mirando el uno al otro, en silencio.
–¡James! ¡Siéntate! Lo siento, espero que no os haya molestado mucho.– una mujer que identifiqué como la madre del pequeño le hizo sentarse bien en el asiento.
Sam pareció despertar del trance.
–No se preocupe.– respondió con una sonrisa.– No molesta.
Se volvió a apoyar en mi hombro.
–Noah...
–¿Si?
–Ese niño... Es de los nuestros.
–¿Te refieres a que también es un bioterrorista?– dije, bajando la voz.
Sam asintió.
–Estoy casi segura de que puede controlar el fuego, como yo.
Nos quedamos un rato en silencio.
–¿En que piensas?– me preguntó de repente.
Exhalé una pequeña risa.
–En que le tengo miedo a los aviones.
Ella se enderezó y me miró con los ojos muy abiertos.
–¿De verdad?– asentí.– Eres idiota. ¿Por qué no lo dijiste antes?
–Pues... Como había prisa y eso...– me rasqué la nuca.
–¿Estás bien?
–Eso creo. No es tan malo como pensaba.
Me pegó un golpe suave en la frente.
–Tonto. Para otra vez dilo.
Cogí su mano.
–Estando tú aquí me atrevo a todo.
Ella dejó caer su cabeza hacia delante, riendo. Después me miró.
–¿Cómo puedes ser tan cursi?– me pellizcó el puente de la nariz.
–Vaya, ya estropeaste el momento romántico.
Aparté la mirada con falsa molestia.
Noté como me rodeaba con los brazos.
–Sabes que me encanta que seas tan ñoño.
–Ya, ya, intenta arreglarlo ahora.
En ese momento sonaron los altavoces del avión, pidiendo que nos abrocháramos el cinturón ya que íbamos a aterrizar.
–Acomodémonos.– dije justo después de bajar del avión.– Nos queda un largo rato hasta que lleguen los demás.
Sam se frotó los ojos.
–Voy a por café.– comenzó a caminar, dejándome solo con mis pensamientos.
Bueno, y con mi cansancio también.

¡Buenas tardes!
Si, lo sé, vuelve a ser corto.
Pero bueno, llegan los exámenes finales y como que mi inspiración se marcha volando -.-
En fin.
Hoy no entretengo más, que voy a ver una serie antes de ponerme a estudiar (no digo cual, que luego me la liáis y me hacéis spoiler).
Cualquier pregunta, sugerencia, crítica o lo que sea será bien recibida tanto por comentarios como por mensajes.
Que tengáis buena semana ^^.
Sarichal❣